La veterana actriz japonesa Kirin Kiki, conocida por películas como 'Una pastelería en Tokio', 'Still Walking' o 'Después de la tormenta', ha fallecido este 15 de septiembre a los 75 años de edad, víctima de un cáncer contra el que llevaba luchando desde hacía varios años. Con más de 50 años trabajando de forma incombustible, la actriz logró tres premios de la Academia Japonesa, un premio Blue Ribbon y era considerada una de las grandes intérpretes de su país.
La noticia la dio a conocer el canal japonés NHK, que también informó que la actriz murió en Tokio, ciudad en la que había nacido, rodeada de su familia. Kirin Kiki, cuyo nombre real era Keiko Nakatani, nació el 15 de enero de 1943 en la capital nipona. Hija de un maestro del instrumento biwa, similar al laúd y utilizado para música tradicional japonesa, comenzó su carrera como actriz en 1961, poco después de graduarse en el instituto. Kiki tenía talento innato, ya que pronto ingresó en la prestigiosa compañía de teatro Bungakuza. Inicialmente, la actriz utilizó el nombre artístico de Chiho Yûki.
La popularidad la empieza a tener en su país natal gracias a papeles cómicos y excéntricos en series de televisión y cortes publicitarios. Fue en esa época cuando cambió de nombre artístico a Kirin Kiki. El motivo fue que, en uno de los programas de televisión en los que participaba, le pidieron que subastase algo suyo y ella optó por vender su primer nombre artístico, ya que "no tenía nada más que vender".
Actriz habitual de Hirokazu Kore-eda
En sus 57 años de carrera, Kirin Kiki se convirtió en una de las actrices más aclamadas del cine japonés. En 1985 fue candidata por primera vez al premio a la mejor interpretación femenina de la Academia de Cine de Japón, por 'Yumechiyo nikki', en la categoría de actriz de reparto. El premio se le resistiría hasta en 2008, cuando logró el premio a la mejor actriz protagonista por 'Tokyo Tower, Mom and Me, and Sometimes Dad'.
Su popularidad empezó a despuntar de la mano del cineasta Hirokazu Kore-eda, con el que empezó a colaborar en 2008 con 'Still Walking (Caminando)', por el que ganó el premio Blue Ribbon a la mejor actriz de reparto. Desde entonces, Kiki se convirtió en una habitual del realizador, ha llegado a participar en cinco de sus últimos proyectos, entre los que están 'Kiseki (Milagro)', 'De tal padre, tal hijo', 'Nuestra hermana pequeña', 'Después de la tormenta' y 'Un asunto de familia', esta última ganadora de la Palma de Oro en el 71º Festival de Cannes y que en España se estrenará el 21 de diciembre de la mano de Golem.
'Kamikaze Girl', 'Una pastelería en Tokio' y 'Arrietty y el mundo de los diminutos'
No solo ha trabajado con Kore-eda, la actriz participó también en la entrañable 'Una pastelería en Tokio', dirigida por Naomi Kawase, siendo uno de los grandes éxitos en taquilla de la directora japonesa tanto en su país natal como en varios mercados internacionales, incluido España. Kiki también participó antes en el doblaje original de 'Arrietty y el mundo de los diminutos', dirigida por Hiromasa Yonebayashi, escrita por Hayao Miyazaki y producida por Studio Ghibli.
Pese que padeció un desprendimiento de retina en 2003 y en 2005 le fue detectado un cáncer de mama, contra el que luchó hasta su muerte, Kirin Kiki no paró de trabajar de forma incombustible, llegando a rodar entre tres, cuatro y cinco películas por año. Entre otros premios que recibió en su carrera estuvieron el de mejor actriz de reparto en el Festival de Cine de Yokohama por 'Kamikaze Girls' y 'Half a Confession' y el premio de la Academia de Cine de Japón, que lo ganó tres veces, por la ya nombrada 'Tokyo Tower, Mom and Me, and Sometimes Dad' y por 'Akunin' y 'Chronicle of My Mother'.
La actriz acababa de rodar 'Nichinichi Kore Kôjitsu', dirigida por Tatsushi Ohmori y que se encuentra actualmente en postproducción y cuyo estreno en Japón está programado para el 13 de octubre. Con lo cual, este estreno póstumo será su despedida del cine.