Olivia de Havilland, leyenda del cine clásico, conocida por su participación en películas como 'La heredera' o 'Robin de los bosques', ha fallecido por causas naturales a los 104 años de edad. La última de las estrellas de 'Lo que el viento se llevó' se ha marchado en su casa de París, según ha confirmado la publicista Lisa Goldberg.
Esta actriz, guerrera hasta el final, se enfrentó al Hollywood más arcaico en una batalla legal de la que salió airosa en los 40, después de lo cual fue premiada en dos ocasiones por la Academia con el Oscar a la Mejor Actriz, por su papel en la mencionada película de William Wyler, 'La heredera' y por el que interpretase en 'Vida íntima de Julia Norris'. Así el triunfo le llegó con dos papeles protagonistas, pero de Havilland ya había sido nominada por su interpretación de la dulce y sufridora Melania en la cinta dirigida por Victor Fleming y protagonizada por Vivien Leigh y Clark Gable, 'Lo que el viento se llevó'.
Se la recuerda por encarnar a Marian dando la réplica a Errol Flynn en 'Robin de los bosques', pero también trabajó junto a otras estrellas del Hollywood dorado como Rita Hayworth, Bette Davis o Dick Powell. Todo esto antes de que en el 43 demandase a Warner Bros. en un momento en que la industria consideraba que un contrato debía interpretarse como "suspendido" durante los períodos en los que el artista no estaba realmente trabajando. Esta interpretación significaba que, en el caso de De Havilland, siete años de trabajo para el mencionado estudio se convertían en un período mucho más largo.
De Havilland decidió plantarse cuando Warner intentó extender su contrato tras arrinconarla por rechazar una serie de papeles que ella consideraba inferiores. En 1945, los tribunales dictaminaron no solo que De Havilland llevaba razón, devolviéndole su libertad, sino que este cambio debía aplicarse a partir de ese momento a todos los artistas. Desde entonces al termino del contrato se acabaría la relación vinculante, independientemente de cuanto del tiempo de esos años de exclusividad hubiese estado trabajando la estrella. Se dice que en los círculos legales este acuerdo es conocido como "la decisión de De Havilland".
Peleona hasta el final
Ya con 101 años de edad De Havilland demandó a la cadena FX y a Ryan Murphy por cómo se trató su figura y su vida en la serie 'Feud: Bette and Joan', en la que Catherine Zeta-Jones se metía en su piel. Esta ficción, creada por Murphy junto a Jaffe Cohen y Michael Zam, se basaba en la eterna rivalidad que protagonizasen las estrellas Joan Crawford y Bette Davis, e incluía una aparición de De Havilland que se sintió dolida porque consideró que se la retrataba como a una "cotilla avariciosa". Además la serie pasa de puntillas sobre la supuesta mala relación que mantuviese con su hermana Joan, afirmación que la actriz desmintió en numerosas ocasiones.
