En 2009, todo estaba listo para que Neill Blomkamp accediera al reino de Hollywood por la puerta grande. Su debut en la gran pantalla, 'District 9', se había convertido en un fenómeno a todos los niveles, Academia incluida, y su nombre empezaba a sonar fuerte en todas las quinielas de aspirantes a Cineasta del Futuro. Sin embargo, casi una década después, el cineasta sudafricano cuenta sobre sus espaldas con más fracasos que éxitos, más proyectos perdidos que aplaudidos y más dudas que reconocimiento.
Y es una verdadera lástima porque, teniendo en cuenta las tres películas que ha firmado hasta la fecha, está claro que Blomkamp es uno de esos directores capaces de estructurar de manera organizada y clara auténticos espectáculos visuales que, por otro lado, se sitúan siempre muy por encima de la historia que está contando. Quizá la clave de su futuro más inmediato esté en acercarse a guiones ajenos, menos personales, sí, pero más compactos, algo que ya ha empezado a hacer con su próximo proyecto, la adaptación cinematográfica de la novela 'The Gone World' de Tom Sweterlitsch.
Mientras seguimos esperando el milagro de la resurrección, repasamos las tres cintas escritas y dirigidas por Blomkamp, observando con detalle la irregularidad de un cineasta capaz de lo mejor y lo peor en el menor espacio de tiempo posible. ¿Lo mejor? Su juventud. Queda mucha esperanza y, seguro, buen cine que disfrutar con su firma.
Neill Blomkamp, de peor a mejor
'Chappie'
Si 'Elysium' ya había contrariado a un buen número de espectadores y críticos con su inesperada apuesta por el universo blockbuster más palomitero, 'Chappie' directamente provocó gritos de horror entre aquellos que veían a Neill Blomkamp como el nuevo mesías de la ciencia ficción. Y es que, esta especie de remake de 'Cortocircuito' con toques de 'E.T., el extraterrestre', supone el punto más bajo en la breve pero intensa trayectoria profesional del cineasta.
Partiendo de un robot que parece empeñado en convertirse en 'El príncipe de Bel-Air' y finalizando en la peor versión de un Hugh Jackman pasadísimo de vueltas, 'Chappie' se las apaña para convertir cada una de sus posibles virtudes en errores de cálculo y precisión. Sumamos una banda sonora insoportable, la ausencia total de carisma de Dev Patel, el desperdicio de Sigourney Weaver y una duración en la que deberían haber entrado las tijeras por obligación y el resultado está claro: 'Chappie' es un trozo de chatarra oxidado y desechable.
'Elysium'
En su segunda película, Neill Blomkamp abandonó los ropajes de Nuevo Mesías de la Ciencia Ficción y apostó por el camino de las explosiones, las escenas de acción trepidantes y, claro, el atracón de palomitas. 'Elysium', que empieza como una interesante reflexión entre la (extrema) división de clases, con la marginación absoluta de los niveles medio y bajo frente a la comodidad y el lujo del paraíso de los ricos a la cabeza, termina convertida en una especie de 'Terminator' de nueva generación, con sus buenas dosis de golpes, tiroteos y naves espaciales estrellándose contra el suelo, edificios y todo lo que se ponga por delante.
Y aunque sea comprensible la decepción que sufrieron muchos espectadores ante la decisión de Blomkamp de no profundizar más en esa idea inicial, es innegable el disfrute que supone encontrarse con una buena película de acción futurista que reivindica el entretenimiento de toda la vida frente al dramatismo más pedante de muchos de los últimos blockbusters. Porque, sí, estamos ante un blockbuster en toda regla, con superestrella al frente, un insulso Matt Damon, al que solamente se le pueden poner dos cruces realmente graves: desaprovechar a Jodie Foster y utilizar una y mil veces el recurso de las escenas a cámara lenta con voces femeninas a lo Enya. Existen otras formas mejores de apaciguar el ruido.
'District 9'
Tras dirigir una trilogía de cortometrajes ambientados en el universo de 'Halo' para promocionar la llegada de la tercera entrega de la famosa saga de videojuegos, Neill Blomkamp tuvo la oportunidad de su vida de la mano del mismísimo Peter Jackson. El director de la saga de 'El señor de los anillos' acogió en sus brazos al joven director para producir su primer largometraje, la llegada a la pantalla grande de Halo. Pero no se consiguió la recaudación de fondos necesaria para un proyecto de estas dimensiones, así que se llevó a cabo la opción B, la adaptación cinematográfica de uno de los cortometrajes de Blomkamp: 'Alive in Joburg'.
Y así es como nació 'District 9', un trabajo que se convirtió en uno de los fenómenos cinematográficos más inesperados de los últimos años, coronando su éxito con cuatro nominaciones al Oscar, incluyendo el de Mejor Película y Mejor Guión Adaptado para el propio Blomkamp. El enésimo y más mediático reconocimiento para una de esas joyas que ejemplifican a la perfección el corazón social y profundamente contemporáneo que habita en las películas más importantes del género. Un debut memorable.
