El éxito mundial de 'Black Mirror: Bandersnatch' marcará el camino de Netflix en los próximos años. Así lo afirmó Todd Yellin, encargado de producto de la plataforma, durante una conferencia sobre medios y entretenimiento en Mombai como recoge Variety.
"Ha sido un fenómeno en La India y en todo el mundo, y nos hemos dado cuenta de que tenemos que apostar por más historias interactivas", afirmó el directivo. Además abrió el arco temático de esas posibles historias: "No tienen que ser ciencia ficción, podría ser comedia absurda, por ejemplo. También podría ser una película romántica, donde el público decidirá si se va o no con un chico".
'Bandersnatch': un boom global
El 28 de diciembre de 2018 Netflix estrenó 'Bandersnatch', en lo que sería su primera experiencia interactiva. La serie, con cinco finales y más de 300 minutos totales de grabación, se convirtió en un éxito mundial absoluto. Un hito que abre el camino a la búsqueda de nuevas formas de consumo y narrativas audiovisuales, cada vez más demandadas por el público.
Películas que demuestran que 'Black Mirror' no inventó nada
'Almas de metal (Westworld)'
Año: 1973.
País: Estados Unidos.
Dirección: Michael Crichton.
Sinopsis: Crichton debutaba en el cine como director adaptando su propia novela, esa en la que nos llevaba de viaje hasta un futuro próximo, en el que el ocio ha alcanzado tales cuotas que las personas pueden ir a pasar una aventura de total inmersión en un parque dividido en diferentes espacios temáticos. En el del Lejano Oeste, será donde uno de los robots, el del Pistolero (Yul Brynner), se revele en contra de sus creadores y, atentando con una de las leyes primordiales de la robótica de Asimov, inicie una cruenta persecución que no dejará a nadie que se cruce en su camino con vida.
'Videodrome'
Año: 1983.
País: Canadá.
Dirección: David Cronenberg.
Sinopsis: James Woods se mete en la piel de Max Renn, un tipo que un buen día descubre la existencia de un canal que emite la televisión de la realidad, y la cual tiene el poder de controlar a las personas, dominando el mundo en las sombras en lo que fue uno de los grandes hitos de la filosofía de la Nueva Carne.
'Juego mortal'
Año: 1994.
País: Canadá.
Dirección: John Flynn.
Sinopsis: Un joven Edward Furlong protagoniza este slasher de corte ultramoderno para la época, lo que le convertía en uno de aquellos títulos de cyberpunk a (re)descubrir, en el que encarnaba a un joven aficionado a los videojuegos que, tras hacerse con una copia de un CD-ROM que incluye un juego de realidad virtual, descubrirá que tras los avisos de que se trata del juego más aterrador jamás visto, se esconde una terrorífica verdad.
'The Game'
Año: 1997.
País: Estados Unidos.
Dirección: David Fincher.
Sinopsis: Imagina una compañía que hace de tu vida toda una experiencia de inmersión en la que se inmiscuye de forma abusiva para recrear algo parecido a un juego. Como si de un cruce entre una gymkhana, un flashmob mortal y una escape room de proporciones épicas, el jugador (en este caso, interpretado por Michael Douglas) perderá la noción de qué es aquello que separa la realidad de la ficción, considerando que el juego ha ido más allá de lo que pensaba y empezando a temer por su propia vida.
'El show de Truman'
Año: 1998.
País: Estados Unidos.
Dirección: Peter Weir.
Sinopsis: A veinte años de su estreno, 'El show de Truman' sigue siendo la más gloriosa sátira sobre el mundo de los reality shows, en la que Jim Carrey interpreta a Truman Burbank, un hombre normal que un buen día empezará a sospechar de que la realidad que le rodea no es tan real como parece, pues él es nada más y nada menos que la estrella de un reality en el que él es el único que no sabe que su vida está siendo filmada.
'eXistenZ'
Año: 1999.
País: Canadá.
Dirección: David Cronenberg.
Sinopsis: Jude Law y Jennifer Jason Leigh protagonizan una historia que nos lleva hasta una sociedad futura, donde el último grito en ocio son aquellos videojuegos en los que los jugadores pueden entrar dentro de forma física. Viniendo de la mente de Cronenberg, está claro que los límites entre realidad y ficción quedarán diluidos gracias a los brochazos de sus directrices a favor de la Nueva Carne fusionada con el cyberpunk, en uno de los títulos de ciencia ficción a rescatar de finales del pasado siglo.
'Matrix'
Año: 1999.
País: Estados Unidos.
Dirección: Lana & Lilly Wachowski.
Sinopsis: No solo revolucionó la ciencia ficción, hizo correr ríos de tinta en cuanto a todo su poso filosófico y supuso un hito en cuanto al cyberpunk, sino que 'Matrix' nos vino a contar una suerte de distopía en la que la humanidad está viviendo una mentira fruto del control de las máquinas, cuya rebelión se ha hecho con la totalidad del planeta y nos mantiene en una suerte de letargo donde vivimos una vida a modo de sueño. El mito de la Caverna de Platón llevado hasta el límite.
'¡Olvídate de mí!'
Año: 2004.
País: Estados Unidos.
Dirección: Michel Gondry.
Sinopsis: Con la intención de deshacerse de los recuerdos del amor de su vida, Clementine (Kate Winslet), Joel (Jim Carrey) contacta con un científico que ha desarrollado dicha técnica. El problema vendrá cuando Joel descubra que, en realidad, no quiere olvidar a Clementine, iniciando una lucha desde lo más profundo de su ser para conseguir que el proceso no se finalice.
'Las vidas posibles de Mr. Nobody'
Año: 2009.
País: Bélgica.
Dirección: Jaco Van Dormael.
Sinopsis: En el año 2092, la humanidad ha logrado la inmortalidad gracias a todos los avances científicos existentes. Sin embargo, aún vive el último ser humano mortal, Nemo Nobody (Jared Leto), que a sus 102 años y gracias a una serie de revolucionarias tecnologías, empieza a ser testigo de todas aquellas vidas que podría haber vivido a lo largo de su vida, según las decisiones que tomase en un momento u otro.
'In Time'
Año: 2011.
País: Estados Unidos.
Dirección: Andrew Niccol.
Sinopsis: En esta revisión de lo arquetipos presentados en 'Bonnie y Clyde', Amanda Seyfried y Justin Timberlake protagonizan un título que se nos presenta cual distopía en la que los avances tecnológicos y científicos han conseguido parar el envejecimiento. La moneda de cambio es el tiempo, haciendo que los ricos vivan eternamente y los pobres mueran jóvenes.
