Todos somos conscientes de algunas extravagancias de los actores de Hollywood más reconocidos, pero siempre suele surgir alguna noticia que consigue descolocarnos. Probablemente esta sea una de ellas, al descubrir recientemente que Nicolas Cage compró hace ocho años una calavera auténtica de dinosaurio.
Esta noticia se ha conocido tan tarde por un motivo muy sencillo: ahora es cuando se ha obligado al actor a devolver este cráneo ya que se ha descubierto que fue robado y debe volver a su lugar de origen, Mongolia. Obviamente, Nicolas Cage no ha incurrido en ningún tipo de delito, ya que cuando compró la cabeza en una subasta no contaba con ningún tipo de información que indicara que el cráneo había sido previamente robado.
Según informa la revista Rolling Stone, la calavera de dinosaurio en cuestión tiene 67 millones de años y fue comprada por el actor por una suma que alcanzó los 276.000 dólares (unos 252.000 euros). También es curioso descubrir que en esa subasta, realizada en Beverly Hills (California) en el año 2007, Nicolas Cage compitió frente a Leonardo DiCaprio, ya que ambos estaban muy interesados en adornar sus hogares con esta calavera.
La Autoridad de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos fue la que puso en alerta al actor y le exigió la devolución para que pudiese regresar a Mongolia. Ahora Nicolas Cage tendrá que buscarse otro cráneo extraño con el que adornar su salón, por desgracia. De forma concreta también se ha conocido que esta cabeza pertenecía a un Tyrannosaurus Bataar, que también es conocido como Tarbosaurus, y que como imaginaréis por el nombre se trataba de un enorme depredador que tenía mucho en común con el famoso Tyrannosaurus Rex que todos conocemos gracias a 'Parque Jurásico'.
El robo fue realizado por un paleontólogo
Como hemos comentado antes, Nicolas Cage no se ha metido en ningún lío y ya se conoce cuál ha sido el verdadero culpable de este robo: Erik Prokopi, un paleontólogo que ya ha sido condenado a prisión por reconocer que robó varios fósiles del desierto de Gobi en Mongolia y haberlos vendido a diferentes compradores de Estados Unidos. Ahora está colaborando para que las autoridades puedan recuperar todo lo que fue robado en su momento.