¿Qué tienen de especial los niños y niñas del terror? ¿Por qué nos aterran especialmente los miembros más pequeños de este género? Tal vez esta sensación de rechazo esté relacionada con la supuesta imagen de inocencia que rodea a la infancia, ver como aquellos supuestos pequeños se convierten en auténticos engendros del demonio (en más de un caso de manera literal) suele tener un fuerte efecto en la audiencia. Puede que no representen una gran amenaza física, pero la idea de que la maldad pura se disfrace de bondad e ingenuidad ataca a la parte más básica de nuestra mente: ¿Cómo pueden un niño o una niña ser tan escalofriantes?.
Muy sencillo, solo hace falta un buen guion, un cineasta a la altura y un pequeño actor o una pequeña actriz dispuestos a volcarse en el papel de uno de estos 10 niños y niñas del cine y la televisión que nos hicieron plantearnos si de verdad merece la pena criar a un hijo o una hija. Los asesinos del slasher nos aterrorizaron, los monstruos y demonios nos han hecho mirar debajo de la cama, pero los niños, los niños son impredecibles, nunca sospecharíamos de estos retorcidos y espeluznantes pequeñines (o tal vez sí).
Menciones de honor
Dando un repaso a los niños y niñas más aterradores del género nos hemos dado cuenta de que la lista es larga, muy larga. Por eso hemos decidido dejar este pequeño hueco para estos otros pequeños portadores de pesadillas. Como el pequeño Michael Myers que abre la estremecedora primera escena de 'La noche de Halloween', Toshio, el espectro japonés de 'El grito', o la niña de 'Poltergeist', que nos heló la sangre con su "Ya están aquí", avecinando la llegada de los espíritus pegada al televisor. Además de los niños de ojos brillantes de 'El pueblo de los malditos', que hicieron la vida imposible a Christopher Reeve. Pero eso no es todo, porque los pequeños emisarios del miedo también han tenido acento español, como Tomás, el espectro con cabeza de saco de 'El orfanato' o Santi, el espíritu de la Guerra Civil que Guillermo del Toro nos presentó en 'El espinazo del diablo'.
Niños del cine y la TV que te quitarán las ganas de ser padre/madre
Cole Sear ('El sexto sentido')
Vale, puede que el décimo de puesto de nuestro top sea un poco injusto, al fin y al cabo la interpretación de Haley Joel Osment (uno de los nominados al Oscar más jóvenes de la historia) estaba llena de vulnerabilidad y ternura, pero no hay forma de negar que este niño era totalmente escalofriante. Cualquiera habría llevado a su hijo al psiquiatra si lo escuchara hablar con los muertos, porque si hay algo más terrorífico que el espíritu de un niño muerto es que tu hijo atraiga a los fantasmas hasta tu hogar.
Este niño no es malvado, es más bien una víctima de sus terribles circunstancias, pero, independientemente de si sus intenciones son maliciosas o no, no podemos decir que este crío no sea espeluznante hasta decir basta. Puede que 'El sexto sentido' sea un drama familiar con un toque sobrenatural y un mensaje sobre saber pasar página y aceptar la muerte como parte de la vida, pero Cole Sear siempre será el niño que veía muertos, y tener un hijo médium no es el plan de ningún padre, eso está claro. En la vida real su madre (Toni Collette) lo habrían mandado a un internado en la otra punta del mundo solo para deshacerse de él.
Anthony Fremont ('La Dimensión desconocida' / 'En los límites de la realidad')
La televisión también ha tenido el gusto de dejarnos a algunos de los niños más desagradables de la ficción. Como el bueno de Anthony Fremont, protagonista de 'It's a Good Life', uno de los mejores episodios de 'La Dimensión desconocida' (serie también conocida como 'En los límites de la realidad'). A diferencia de Cole, este pequeño engendro si que tenía unas intenciones de lo más retorcidas. El pequeño Fremont era un niño con poderes sobrenaturales que le permitieron convertirse en el jovencito tirano de un recóndito pueblo en Ohio.
Basado en el protagonista del cuento 'It's a good life' escrito por Jerome Bixby, este diablillo podía mover objetos con la mente y leer tus pensamientos, por lo que ni siquiera estabas seguro en tu propia cabeza mientras pensabas en el mal rollo que da este niño con aspiraciones a Dios. De verdad, es que miradlo, esa mirada de odio no tiene desperdicio. La idea de que un niño pueda poseer tanto poder es aterradora, si al jovencito le da la una rabieta puede hacer que te estalle la cabeza con solo pensarlo. Buena suerte intentando decirle que es hora de irse a la cama o que se lave los dientes.
Gage Creed ('Cementerio de animales')
Los zombies dan miedo, pero un niño zombie revivido y con ansias de sangre da aún más miedo, porque "a veces lo mejor es seguir muerto". Basado en el personaje de una novela de Stephen King, el maestro en lo que a dar vida a niños perturbadores se refiere; el pequeño Gage es resucitado por su padre después de ser atropellado por un camión. Pero lo que vino de vuelta no era un adorable niño, sino una máquina de matar dispuesta a sembrar el caos allá por donde pasa.
Aunque el remake de 2019 decidiera darle un giro (de lo más gratuito) a la historia, Gage sigue siendo la versión más terrorífica de esta adaptación literaria, en parte porque es el miembro más jovencito de este top, pero también porque su angelical carita es sinónimo de derramamiento de sangre y una fuerza ancestral oculta en los bosques de Maine, la localización favorita de Stephen King.
Isaac Chroner ('Los chicos del maíz')
Stephen King vuelve a la carga con otro niño de lo más aterrador: Isaac Chroner, el líder de Los chicos del maíz. Este pequeño Charles Manson en potencia no solo es niño asesino y el líder de una secta en mitad de Nebraska, también es la personificación de un mal conocido como "He who Walks Behind the Rows" ("El que camina detrás de la fila"), una versión demoníaca del dios judeocristiano. Este joven "influencer" consiguió ingeniárselas para poner a todos los niños de su pueblo a su favor, dando caza a la pobre Linda Hamilton, que seguramente habría preferido tener que vérselas con el Terminator antes que tener que aguantarle la mirada a este diablillo con pinta de predicador.
Este personaje es tan popular que su icónica llegada a la gran pantalla dio lugar a seis secuelas y un remake. Por todo esto ocupa el séptimo puesto del top y se lleva el premio a la mirada más espeluznante del top, enhorabuena Isaac (por favor no nos mates. Gracias).
Los niños de Almanzora ('¿Quién puede matar a un niño'?)
Llegados a esto punto habréis pensado que en nuestro país estamos seguros, lejos de las manitas de niños asesinos. Pues bien, nada más lejos de la realidad, porque en '¿Quién puede matar a un niño?' Chicho Ibáñez Serrador nos recordó que los asesinos junior se esconden en los lugares más recónditos de España, como la isla ficticia de Almanzora (no confundir con la población almeriense real, esa no está repleta de críos con sed de sangre, que sepamos).
La trama de esta aterradora película de 1976 coloca a dos turistas anglosajones en el punto de mira de este clan de pequeños asesinos en potencia. No hemos podido seleccionar a un niño en concreto, pero creednos cuando os decimos que son todos igual de aterradores. "¿Quién puede matar a un niño?", ni idea pero lo que tenemos claro es que estos niños pueden matar a quién les venga en gana.
Charlie ('Hereditary')
El terror más contemporáneo también nos ha dejado ejemplos de niñas que nos hacen replantearnos si de verdad merece la pena molestarse en tener hijas. Todo sobre esta niña nos da miedo, desde su mirada al infinito hasta ese molesto ruidito que hace con la boca y que se te mete en la cabeza. 'Hereditary' es una de las mejores películas de terror de los últimos tiempo gracias a su tétrica atmósfera, que incomoda hasta decir basta, y eso es en gran parte gracias a la pequeña Charlie.
No desvelaremos demasiado acerca de su papel o su identidad real, pero os podemos asegurar que esta niña será la protagonista de vuestras pesadillas. Y para aquellos que ya hayan visto la película solo diremos un par de cosas. En primer lugar, nunca, repetimos: NUNCA, hay que sacar la cabeza por la ventanilla. Eso y el plano de las hormigas, si no sabéis de que estamos hablando tenéis que ver 'Hederitary' ya mismo, os hará perder la cabeza.
Samara Morgan ('The Ring')
"Siete días..." Samara no solo te va a matar, también te deja toda una semana para que pienses en ello y veas venir la muerte. También conocida como "la niña del pozo" este espíritu vengativo terminará con tu vida si ves la cinta maldita. Puede que Samara sea una víctima de un crimen trágico, pero eso no la convierte en inocente, porque este espectro ha sido la causa de incontables pesadillas. Más allá de lo aterrador de su llamada telefónica y lo espeluznante de su vídeo maldito, Samara da miedo porque encarna a la perfección la imagen del clásico fantasma japonés: niños pálidos de pelo negro que se aparecen y te matan de la forma más horrible posible.
El caso de Samara y 'The Ring' es especialmente particular dentro del género de terror porque (a pesar de que sea una opinión algo controvertida) creemos que el remake hollywoodiense es muy superior a la cinta japonesa original ('Ringu'). Gore Verbinski consiguió superar a la versión japonesa y cuando el director de la cinta original nipona tuvo que trabajar en la secuela con Naomi Watts el resultado fue desastroso, lo que demuestra que la versión estadounidense de 'The Ring' es uno de los pocos remakes de terror que realmente merecen la pena.
Damien Thorn ('La profecía')
No es que Damien sea un espíritu maligno o un niño asesino. Lo realmente aterrador de este crío es su auténtica naturaleza, porque el jovencito Thorn no es un niño cualquiera, es el Anticristo. Imagínate tener un hijo con tu pareja solo para que resulte que ese pequeño retoño es la personificación del mismísimo Satanás. Eso es lo que les pasa a Gregory Peck y Lee Remick en esta aterradora cinta de 1976, uno de los ejemplos más memorables de niños terroríficos en el cine (y viene acompañado de su propia banda sonora al estilo Darth Vader, el 'Ave Satanis' del oscarizado Jerry Goldsmith, un tema que ha hecho las delicias de los fans del satanismo desde los años 70).
Este crío da mal rollo por muchos motivos, el trajecito de niño bueno como contrapunto de su origen satánico es uno de ellos y que todo lo que haga lo acompañe de esa posturita de "no he roto un plato en mi vida" nos enternece a la vez que nos hace querer salir corriendo en la dirección opuesta. La escena de la niñera en el cumpleaños y la miradita final a la cámara por sí solas son suficientes como para situar a Damien en el tercer puesto de nuestro ránking, enhorabuena por el bronce Damien, no nos mates y alabado sea Satán.
Regan MacNeil ('El exorcista')
Regan MacNeil es uno de los personajes más icónicos del género, y aunque en realidad sea Pazuzu (una entidad demoníaca) lo que hace que actúe de esta manera tan terrorífica, lo realmente escalofriante de este personaje es ver a esa inocente joven convertida en un ser del averno. Con unas prácticas de contorsionismo sacadas del mismísimo infierno, la niña de 'El exorcista' nos lleva aterrando durante más de cuatro décadas.
Ya sea levitando sobre su cama, vomitando una asquerosa sustancia verde u orinándose encima, Regan nos ha dejado algunas de las imágenes más potentes del cine de terror, pero lo cierto es que ninguna de estas horripilantes representación de una posesión sería tan aterradora si no se tratara de una niña. Acompañada de las Tubular Bells de Mike Oldfield, Regan ha sido el fruto de muchas pesadillas y, sin lugar a dudas, ha dejado una marca imborrable en nuestra mente.
Las gemelas Grady ('El resplandor')
¿Qué pasa cuando juntas a Stephen King con Stanley Kubrick? Pesadillas, eso es lo que pasa. Porque el bueno de King ocupa el top de nuestro ranking y esta vez lo hace por partida doble. Puede que el escritor pensara que una niña macabra no era lo suficientemente aterradora y por eso decidió que era mejor idea utilizar a dos gemelas idénticas cogidas de la mano. Kubrick por su parte aporta un plano absurdamente simétrico (propio del perfeccionismo maniático del cineasta) y una atmósfera completamente aterradora dentro del tétrico Hotel Overlook, una de las localizaciones más terroríficas de la historia del cine.
Estas fantasmagóricas gemelas se aparecen en los pasillos del Overlook cuando Danny (un niño espeluznante por sí solo, que daría más de un quebradero de cabeza en el mundo real) pasea en su triciclo. Las hermanas Grady invitan a Danny a "jugar para siempre", justo cuando la aparentemente inofensivo estampa es interrumpida por una brutal y tétrica imagen de violencia que muestra los ensangrentados cadáveres de las niñas junto a un hacha, víctimas de los horripilantes actos de violencia de uno de los espíritus del Overlook, posiblemente su padre: Delbert Grady. Tal vez estas niñas no sean unos espíritus malignos, pero eso no cambia el hecho de que resulten completamente aterradoras. En resumen, ¿gemelas fantasmas y amenazadoras? No, gracias.