La cuarta edición del festival Nocturna de cine fantástico cierra con una sensación agridulce. Por segundo año consecutivo una sola película ha barrido con todos los premios, pero en esta ocasión ni público ni crítica ha coincidido con los gustos del jurado. La edición se resumen en menos películas y menos calidad, con una selección de títulos que ha dejado en secciones paralelas filmes que habrían lucido muchísimo la Sección Oficial (caso de la francesa 'The Open'), ofertando otros títulos (como 'Cold Moon'), carne de sobremesa, que dejan bastante que desear.
Así, no serán muchos los que puedan sacar más de tres - cuatro títulos verdaderamente destacables, pero no por ello todo es un desastre. Con algunas medianías y un clásico del género, os ofrecemos las propuestas más interesantes que hemos podido disfrutar (o sufrir) en la edición de este año del festival.
Nocturna 2016: Un balance en siete propuestas
'Polder'
Entre suizos y alemanes han concebido a la ganadora de la Sección Oficial de la cuarta edición del festival Nocturna. Ganadora con polémica, pues desató emociones encontradas tanto en crítica como en público. 'Polder' hace una desquiciada crítica a la sociedad actual, renovando conceptos planteados en filmes como 'Asesinos natos', 'Existenz', e incluso 'Gamer' (la de Gerard Butler, sí), aunque cae presa del postureo, dejando que la forma se coma a un contenido que a medida que avanza la trama se desparrama y pierde nuestro interés.
'Harvest Lake'
Scott Schirmer es ya un habitual de Nocturna, estando presente en tres de las cuatro ediciones del certamen, convirtiendo sus presentaciones ya casi en una tradición del mismo. Siguiendo la misma línea estética/formal que la desarrollada en 'Found' (haciendo de la precariedad de medios una forma de "homenajear" el cine de género de los años 70), en esta ocasión nos presenta una interesantísima propuesta que evoca al David Cronenberg de 'Rabia' o 'Vinieron de dentro de...'. Un grupo de amigos deciden celebrar un cumpleaños en una aislada cabaña al lado de un precioso lago. Todo muy "inocente" hasta que una extraña y perversa presencia los empieza a influenciar de formas muy libinidosas.
'Queen of Spades'
La película de Svyatoslav Podgayevskiy no es ninguna maravilla, y tampoco inventa nada nuevo, pero dentro de la oferta de la Sección Oficial, es de lo más destacable (lo que por otro lado tampoco dice mucho a favor del festival). Una entidad demoníaca es invocada cual Candyman (ya sabéis, os ponéis delante del espejo, pronunciáis las palabras adecuadas, ¡y que se desaten las maldiciones!), y hace la vida imposible a una desestructurada familia. Excesivamente previsible, Podgayevskiy muestra buenas maneras como realizador en el que es su segundo largometraje.
'Summer Camp'
El debut de Alberto Marini (guionista de películas como 'Mientras duermes' o 'El desconocido') no podría haber sido mejor. Rodeado de un reparto internacional, y con Jaume Balagueró apoyando desde las funciones de productor, el ahora cineasta lleva acabo un refrescante ejercicio de género, sin más pretensión que la de entretener (y hacer pasar un mal rato) a los espectadores con un título muy consciente de las reglas del juego y que sabe dónde y cómo tiene que estrujar su guion y a sus personajes.
'Embers'
Una pandemia de carácter neurológico provoca que los infectados pierdan la memoria, la completa conciencia de su identidad. Casi una década después de que se descontrolara la enfermedad es cuando arranca este relato de carácter coral que aborda el género desde su perspectiva más íntima y humanista. La película, coproducción entre EEUU y Polonia, también tiene cierto sabor español gracias a la participación de Roberto Cots y Greta Fernández (a quien veremos próximamente en 'La próxima piel').
'The Open'
Sus premios a mejor director, guion y película en el pasado Fantasporto ya hablan por sí mismos del debut en el largometraje del francés Marc Lahore. 'The Open' es una de las cintas más originales del panorama cinéfilo actual. En un mundo sumido en la guerra, dos tenistas y su entrenador se preparan en unos aislados montes para competir en un ficticio Roland Garros. La película potencia la actitud crítica y reflexiva del espectador, tal como debe hace la buena sci-fi.
'Un hombre lobo americano en Londres'
Como cierre de esta selección, un clásico. Con John Landis como invitado de excepción de esta cuarta edición del festival, no podíamos dejar pasar la oportunidad de reivindicar uno de los hitos del cine de licántropos: 'Un hombre lobo americano en Londres'. Junto a 'En compañía de lobos' y 'Aullidos', el filme de Landis marcó un punto de inflexión en el género, principalmente en lo referente a la concepción del monstruo (de hecho se llevó el Oscar a mejor maquillaje), que a partir de entonces, salvo alguna excepción, se acercaría más a una bestia y menos a un hombre con problemas por el exceso de vello. Ya sea en sagas millonarias como 'Underworld' o 'Crepúsculo' o en cintas de corte independiente como 'Dog Soldiers', la mano de Rick Baker y John Landis sigue muy presente.
