Los Oscars no son simplemente un reparto de premios votados por una serie de académicos, ni un escaparate para que las estrellas puedan lucir sus mejores galas, sino que muchas veces son el lugar idóneo para lanzar un mensaje reivindicativo que sea capaz de emocionar y envalentonar a todas las personas que estén escuchando, ya sea desde el propio teatro donde se celebre o desde casa. Esta 95º edición no iba a ser diferente, por lo que el Dolby Theatre se ha convertido de nuevo en el hogar donde se celebra la mayor fiesta del cine del mundo dejando, claro, discursos ya icónicos. Repasemos los más interesantes.
No por mucho que se repita algo, pierde su valor. Es el caso de Guillermo del Toro y su 'Pinocho de Guillermo del Toro' como Mejor película de animación, pues el director mexicano se ha ido encargando de reivindicar la animación como cine (y no como medio) en todos y cada uno de los galardones que ha ido conquistando; los Oscars, por supuesto, no iban a ser para menos. "La animación es cine, la animación está lista para llegar al siguiente nivel, mantengamos la conversación, ayudémonos. Quiero agradecerle al amor de mi vida, Kim, a mis hijos, a mi madre, a mi padre que están aquí conmigo (en su corazón). Soy su hijo y los quiero", ha declarado el cineasta.
Asimismo, otro de los Oscar prácticamente cantado era el de Ke Huy Quan por 'Todo a la vez en todas partes'. El actor vietnamita-estadounidense ya emocionó al mundo cuando se alzó con el Globo de Oro, haciendo alusión tanto a Steven Spielberg como a sus papeles en 'Indiana Jones y el Templo Maldito' y 'Los Goonies'. Huy Quan ha recordado sus orígenes en un discurso que ha terminado en lágrimas: "Mi viaje comenzó en un barco. Pasé un año en un campo de refugiados. Y de alguna manera, terminé aquí, en el escenario más grande de Hollywood. Dicen que historias como esta solo ocurren en las películas. No puedo creer que me esté pasando a mí. ¡Este es el sueño americano! Los sueños son algo en lo que tienes que creer. Casi me doy por vencido con el mío. A todos vosotros, por favor, mantened vivo vuestro sueño". Por su parte, Brendan Fraser ha hecho lo propio tras ganar a Mejor actor por 'La ballena', retornando a sus orígenes traumáticos: "Empecé en esto hace 30 años y las cosas no han sido fáciles, pero sí conté con algo que no agradecí hasta que dejé de tenerlo. Gracias por este reconocimiento. No habría tenido esto sin el resto del equipo".
Y no podemos olvidarnos de Jamie Lee Curtis, que ha terminado adelantando por la derecha a Angela Bassett y su papel en 'Black Panther: Wakanda Forever'. La actriz que interpreta a la divertidísima funcionaria de 'Todo a la vez en todas partes', ha querido acordarse de todos aquellos que le han ayudado en su longeva carrera, aquella que empezase en 1978 con 'La noche de Halloween': "Sé que parece que estoy parada aquí sola, pero no lo estoy. Soy cientos de personas. Soy un montón de personas... A mi familia, a mi hermoso marido, Christopher Guest; a nuestras hijas, Annie y Ruby; a mi hermana Kelly. ¡Acabo de ganar un Oscar! A todas las personas que han apoyado las películas de género que he hecho durante todos estos años, los miles y cientos de miles de personas, acabamos de ganar un Oscar juntos. Y a mi madre y mi padre que fueron nominados a los Oscar en diferentes categorías: acabo de ganar un Oscar".
Michelle Yeoh ha sido la voz cantante en lo que a reivindicar el tema de la edad en las mujeres se refiere: "Para todos los niños y niñas que se parecen a mí, que me están viendo esta noche. Esta es una luz de esperanza y posibilidades. Esta es la prueba de que puedes soñar en grande, de que los sueños se hacen realidad. Y chicas, no dejéis que nadie os diga que ya pasó vuestro momento, nunca os deis por vencidas". La actriz terminó su discurso encumbrando a las madres y señalando que estaban haciendo historia: "Debo dedicarle esto a mi madre, a todas las madres en el mundo porque ellas son las verdaderas superhéroes y sin ellas ninguno de nosotros estaría aquí. Ella tiene 84 y yo me llevo esto. Está viendo esto desde Malasia con mi familia. Me llevo esto (la estatuilla dorada) a casa. Gracias por impulsarme a estar aquí hoy. Gracias, gracias a la Academia, esto es historia".
Espacio para lo mordaz
El presentador Jimmy Kimmel se ha encargado de que lo más emotivo no opacase del todo lo más ácido, poniéndose manos a la obra para soltar algunas de las pullas más divertidas. Se ha acordado del famoso incidente de la anterior edición entre Chris Rock y Will Smith: "Si alguien en la sala comete un acto de violencia, se os dará el Oscar a Mejor Actor automáticamente y un discurso de 90 minutos, prometido". Tampoco estarán contentos Damien Chazelle y compañía, y ya no solo por las escasas nominaciones, sino porque el presentador les ha soltado un dardo envenenado: "Hay cosas que una serie no puede hacer: no puede perder 100 millones de dólares en taquilla. ¿Alguien de 'Babylon' en la sala?".
Pero no queda ahí la cosa, y es que Kimmel ha tenido para todos. Los siguientes en recibir por no acudir a la gala fueron Tom Cruise y James Cameron, nada menos: "Los dos tipos que han insistido más en que fuéramos al cine, no han venido hoy al cine". No obstante, aprovechó para criticar la ausencia de mujeres en la categoría de Mejor dirección enlazando con que el director de 'Avatar: El sentido del agua' no se personase allí: "Quiero decir, ¿cómo la Academia no nomina al tipo que dirigió 'Avatar'? ¿Qué se creen que es, una mujer?".
