Llega a los cines españoles 'El país de las maravillas', interesante película italiana de la joven directora Alicia Rohrwacher, que obtuvo el Gran Premio del jurado de Cannes 2014 y que pudimos ver en el último Festival de Cine Sevilla en el que obtuvo una cálida acogida y se llevó dos merecidos premios (mejor actriz para su joven protagonista y premio especial del jurado).
La película relata la vida de una familia de apicultores de la región del Grosetto en la Toscana y nos ofrece el retrato de un mundo rural en peligro de extinción a través de sus vivencias, inquietudes y conflictos, que se multiplicarán con la llegada al pueblo de un equipo de televisión que busca participantes en un reality show que exalta de modo superficial y efectista las peculiaridades de la vida en el campo y del que procede el título español del film.
La fascinación de las hijas de la familia por ese mundo exterior del que se las ha apartado, se dispara con la llegada de los intrusos y desata las iras del patriarca, decidido a preservar el aislamiento familiar del mundo exterior y la sociedad de consumo cediendo el liderazgo familiar a su primogénita Gelsomina (en presumible guiño a la protagonista de 'La Strada'), una adolescente responsable y extremadamente madura a la que interpreta con magnética personalidad Maria Alexandra Lungu.
La película esquiva hábilmente las trampas en las que podría haber caído. Su retrato del ámbito rural no cede a lo falsamente bucólico, pues ahí están las luces y sombras de la decisión familiar del aislamiento y los conflictos que genera en unas jóvenes deseosas de traspasar su realidad acotada. La obra de Rohrwacher es una agradable experiencia sensorial que atrapa por el naturalismo de las interpretaciones, lideradas por su joven protagonista y por su creíble plasmación de un mundo en peligro de descomposición.
Dura crítica a la televisión
Donde el guion no admite matices -y con razón- es en el reflejo del pernicioso efecto desestabilizador de la televisión al irrumpir en el entorno filmado. La directora retrata con fiereza la visión superficial del mundo que impone este medio, los discutibles valores que exalta y las falsas expectativas que despierta en los más jóvenes (esa ambivalente hada madrina que encarna nada menos que Monica Bellucci, es un claro y cruel ejemplo). Que esta feroz denuncia venga desde la Italia del legado de Berlusconi, no nos sorprende y evoca la también reciente 'Reality' de Mateo Garrone que apuntaba igualmente a los terribles efectos del medio en una familia humilde.
En definitiva, 'El país de las maravillas' es una obra humilde en sus intenciones pero de notables resultados. La película de Rohrwacher acierta por el complejo abanico de sensaciones y encrucijadas morales a las que nos enfrenta desde un planteamiento sencillo, trascendiendo el panfleto ecologista o la historia de pérdida de la inocencia en la que podía haberse quedado. Un film bellamente filmado (atención a las imágenes que abren y cierran la película) y magníficamente interpretado que nos invita a seguir de cerca a su joven realizadora.