Desde que entre los sesenta y setenta llegase el denominado Nuevo Cine USA, ampliamente influenciado por la nouvelle vague y la obra de directores como Jean-Luc Godard, François Truffaut o Jacques Rivette, pronto empezaron a explorarse una serie de caminos en la industria cinematográfica que hasta entonces no parecían tener lugar en ella (pese a escasas excepciones). Hacemos referencia a la violencia plasmada en pantalla, ya sea de un modo más gráfico u otro, y teniendo en cuenta como principales referentes para la época títulos tan dispares como 'Bonnie y Clyde' de Arthur Penn, 'El Padrino' de Coppola, 'La matanza de Texas' de Tobe Hooper, o 'Taxi Driver' de Scorsese.
Cineastas como Stanley Kubrick o Sam Peckinpah consiguieron con 'La naranja mecánica' (en el primer caso) y 'Perros de paja' y 'Grupo salvaje' (en el segundo), realizar sus respectivos discursos alrededor de la violencia sin caer en lo burdo que puede considerarse cuando este se utilizaba de forma gratuita en el cine de serie y de explotación.
Para los amantes de las emociones fuertes
En otros textos anteriores, ya hemos hecho mención a películas que causaron polémicas por su alto contenido en violencia gráfica, la cual se tradujo en una serie de consecuencias en el público que fueron desde los desmayos hasta la muerte. Además, también se ha hecho referencia a algunas de las secuencias más fuertes de la historia del cine. En esta ocasión, y partiendo desde la llegada del nuevo siglo, son diez los títulos escogidos para representar a lo mejor y más logrado de lo que podemos denominar como películas más bestias de los últimos años.
Dejando a un lado los caminos que van hacia el cine gore reciente, y sin querer caer en la repetición de títulos de los que ya pudimos hablar largo y tendido en los artículos anteriormente citados (y en el dedicado al New French Extremity), entre la presente selección nos encontramos con obras que vienen firmadas por cineastas como Gaspar Noé, Takashi Miike, Quentin Tarantino,
Ben Wheatley o Nicolas Winding Refn. Todos ellos, claros referentes de esa nueva forma de representación de la violencia en pantalla, y quienes podrían ser los que recogen el testigo de la generación que en el segundo tercio del siglo XX convulsionó la industria.
Desde Estados Unidos a Japón, pasando por gran parte de Europa gracias a producciones que han llegado a escandalizar y convertirse en objeto de polémicas, los diez títulos vienen a reflejar el estado actual de una sociedad actual que, marcada por la desensibilización por parte del espectador (sobre todo, debido a los mass media), necesita que de vez en cuando se sobrepasen ciertos límites y se refleje cierta contundencia frente a la cámara. Recordemos además, que pese a que haya algunas inspiraciones en la realidad, estamos hablando de historias de ficción.
Las películas más bestias de los últimos años
'Ichi the Killer'
Año: 2001.
Dirección: Takashi Miike.
País: Japón.
Sinopsis: Yakihara (Tadanobu Asano), sanguinario miembro de una banda yakuza, emprende la búsqueda de su jefe, quien creen que ha sido secuestrado. Cuando descubran que ha sido víctima de un esquizofrénico e implacable asesino llamado Ichi (Nao Ohmori), se desatará un estallido de violencia en el que la sangre y el gore se convertirán en el principal aliciente de la historia.
El incombustible Miike adapta en su decimoséptimo largometraje el conocido manga homónimo de Hideo Yamamoto, donde el realizador apuesta por su característico uso de la violencia gráfica sin pasar a cuestiones morales o éticas, convirtiendo 'Ichi the killer' en todo un festín de vísceras y representación de personajes llevados al límite.
'Irreversible'
Año: 2002.
Dirección: Gaspar Noé.
País: Francia.
Sinopsis: Presentando sus hechos de forma cronológicamente inversa, 'Irreversible' nos lleva a conocer en primera persona la brutal cruzada que Marcus (Vincent Cassel) quiere llevar a cabo durante la noche en la que debe vengar algo terrible que le ha pasado a su novia, Alex (Monica Bellucci).
Jugando con el tiempo y su representación en la pantalla, la segunda película de Gaspar Noé no solo se convierte por motu propio en una de las grandes representantes del New French Extremity, sino que pasa a formar parte de ese selecto conjunto de títulos dispuestos a remover conciencias y provocar la inquietud en el espectador, tomando como principal motor argumental la ira y las pulsiones de amor y muerte.
'The Human Centipede'
Año: 2009.
Dirección: Tom Six.
País: Holanda.
Sinopsis: Dos jóvenes estadounidenses, Lindsay (Ashley C. Williams) y Jenny (Ashlynn Yennie), se pierden por una carretera secundaria mientras realizan un viaje por Alemania. Topándose con una casa propiedad del Dr. Heiter (Dieter Laser), un experimentado cirujano con un largo historial dentro del campo de la separación de hermanos siameses, se acabará convirtiendo en parte de sus conejillos de indias para un espeluznante experimento.
El caso de 'The Human Centipede', quizá sea uno de los de película actual de las que mucha gente ha oído hablar sin haber llegado a verla. Porque son muchos quienes han dicho aquello de "la película del ciempiés humano", escandalizándose ante su argumento y negándose a verla por lo bestia que debe ser. Nada más lejos de la realidad: no solo estamos ante uno de los títulos de culto indispensables del cine de género del siglo XXI, sino que Tom Six consigue representar en pantalla algo que va desde lo original hasta lo mezquinamente inhumano, dejando a otros torture porn coetáneos como 'Hostel', a la altura del betún.
'A Serbian Film'
Año: 2010.
Dirección: Srdjan Spasojevic.
País: Serbia.
Sinopsis: Un actor porno retirado, Milo (Srdan Todorovic), que está pasando por problemas económicos, decide regresar a la industria del cine para adultos con la intención de asegurar la estabilidad de su familia. Tras aceptar trabajar a las órdenes de Vukmir (Sergej Trifunovic), un realizador de porno en clave experimental, acabará cayendo en una espiral de drogas en la que se verá obligado a cometer todo tipo de actos violentos inimaginables.
La polémica llegó de la mano de la ópera prima de Spasojevic, quien realiza sin ningún tipo de miramientos una radiografía absolutamente descarnada de la podredumbre moral y ética que domina la sociedad actual, poniendo el foco en su Serbia natal, y dispuesto a remover conciencias tocando temas tan espinosos como lo son la pedofilia o las cintas snuff.
'Drive'
Año: 2011.
Dirección: Nicolas Winding Refn.
País: Estados Unidos.
Sinopsis: Trabajador de un taller y especialista de cine, Driver (Ryan Gosling) compagina su faceta laboral diurna con la de conductor de coches para ladrones y criminales, ya que gracias a su experiencia como conductor, es el mejor para las fugas. Su vida cambiará cuando conozca a Irene (Carey Mulligan), una dulce vecina con que espera la salida de su marido (Oscar Isaac) de la cárcel.
Pese a haber dirigido anteriormente siete largometrajes, podríamos decir que fue gracias a 'Drive' por lo que Winding Refn pasó a ser conocido más allá de los círculos de la crítica (pese a tener ya en su filmografía títulos del calibre de 'Bronson'). En esta obra de espíritu pop y puramente estético, la armonía de sus imágenes acabará chocando diametralmente con la violencia gráfica que acabará desatándose hacia el tercer tercio del film.
'Kill List'
Año: 2011.
Dirección: Ben Wheatley.
País: Reino Unido.
Sinopsis: Jay (Neil Maskell) es un soldado que, traumatizado por un terrible suceso que tuvo lugar en Kiev, se ha reconvertido en asesino a sueldo. Sin embargo, la falta de trabajo le ha arrastrado a una profunda depresión de la que creerá poder salir cuando acepte un encargo con el que descubrirá una sórdida trama de asesinatos y pedofilia, la cual no es más que la punta del iceberg para un horror inconmensurable.
Tras haber debutado con 'Down Terrace', la segunda película de Wheatley pasó un tanto desapercibida en su momento, pero llegó a subir la adrenalina a quienes tuvieron la suerte de verla en su recorrido por festivales.
'The Tribe'
Año: 2014.
Dirección: Miroslav Slaboshpitsky.
País: Ucrania.
Sinopsis: Un problemático joven sordomudo ingresa en un internado en el que, a su manera, deberá hacerse respetar entre los miembros de la banda que domina el lugar cuando se enamore de la novia de uno de los líderes de la misma.
En lenguaje de signos y sin subtítulos, así se presentaba en 2014 'The Tribe', una de las propuestas más radicales e interesantes del cine contemporáneo, la cual no se cortaba un pelo a la hora de plasmar en pantalla una violencia tan despiadada como sórdida, entre la que se incluía la polémica secuencia del aborto con una percha.
'Bone Tomahawk'
Año: 2015.
Dirección: S. Craig Zahler.
País: Estados Unidos.
Sinopsis: Tras haber huido de lo que parecía una emboscada india, Purvis (David Arquette) llega hasta Bright Hope, donde levantará las sospechas del Sheriff Franklin Hunt (Kurt Russell), quien le detendrá. Esa misma noche, desaparecerá junto a una joven, emprendiendo el Sheriff su búsqueda siguiendo la única pista que tiene: una flecha india.
El monumental western con el que Zahler debutó, no solo cuenta con un sugerente reparto (acompañan a Russell y Arquette, Patrick Wilson, Sid Haig, Matthew Fox y Sean Young), sino que acaba derivando hacia el terror más descarnado cuando se convierta en un espectáculo gore con caníbales por medio, incluyendo una de las castraciones más brutales que se recuerdan.
'Los odiosos ocho'
Año: 2015.
Dirección: Quentin Tarantino.
País: Estados Unidos.
Sinopsis: De camino a llevar a Daisy Domergue (Jennifer Jason Leigh) ante la justicia, el cazarrecompensas John Ruth (Kurt Russell) se verá obligado a pasar la noche en la Mercería de Minnie, donde compartirán espacio junto a Marquis Warren (Samuel L. Jackson), un antiguo soldado de la Unión; Chris Mannix (Walton Goggins), quien afirma ser el nuevo sheriff; un vaquero llamado Joe Gage (Michael Madsen); Sanford Smithers (Bruce Dern), un antiguo general condecorado; Oswaldo Mobray (Tim Roth), el verdugo de Red Rock; y un mexicano llamado Bob (Demián Bichir). Pronto caerán en la cuenta de que puede que no todos salgan vivos del lugar tras esa noche.
Para su largometraje número 8, Tarantino nos presenta un western invernal sobre el que sobrevuelan los espíritus de 'Los diez negritos' de Agatha Christie y de 'La cosa' de John Carpenter, convirtiéndose en un festival gore festivo obra de Greg Nicotero.
'El hijo de Saúl'
Año: 2015.
Dirección: László Nemes.
País: Hungría.
Sinopsis: Auschwitz, 1944. Saul (Géza Röhrig), judío húngaro que debe llevar a cabo las tareas de limpieza en las cámaras de gas, decide salvar a un niño al que hará pasar por su propio hijo.
Ganadora del Oscar y el Globo de Oro a la Mejor Película de Habla No Inglesa en 2016, 'El hijo de Saúl' realiza uno de los acercamientos más realistas y descarnados al horror de los campos de exterminio nazis, dejando claro que tan manido tema siempre puede llegar a sorprender (e incluso, aterrar) al público.
