A diferencia de otros géneros, en cuanto a los remakes y el cine de terror ha existido siempre una especie de norma no escrita en ningún lugar que nos anuncia, tal y como ha constatado el paso de los años, que de forma cíclica van a repetirse ciertos patrones, ya sea por la recuperación de clásicos para actualizarlos al público del momento, o porque una serie de circunstancias hayan llevado a que se produzca alguna tendencia o moda pasajera, de las que casi siempre trae títulos de los que dejan huella.
El caso más célebre y que mejor sirve para hablar de la historia de los remakes de terror, nos remonta ya a los primeros títulos de la Universal de los años treinta. Con 'Drácula' o 'El doctor Frankenstein' revisitados en infinitas ocasiones, no vamos a llevarnos las manos a la cabeza porque de repente nos llegue una nueva oleada remakeadora. Al menos, eso no debería sorprendernos.
Remakes que olvidaste
A principios de los 2000, Hollywood puso el ojo en la gran mayoría de slashers y títulos más icónicos de los ochenta para pasar por la máquina ramakeadora; y no se cortó ni un pelo exprimiendo al máximo el boom del terror oriental haciendo suyas casi todas las producciones que nos llegaban desde Japón, Corea y compañía.
Fue en esta época cuando empezaron a llegar, siempre con la garantía de que venían a reversionar una historia ya hecha, algunos títulos que el tiempo ha puesto en su lugar sin hacerlos destacar demasiado. Puede que porque partían de películas que no eran muy conocidas, o porque la calidad de estos remakes no fue mucho más allá de la media, pero a día de hoy muchos han olvidado que algunas de ellas eran remakes.
Con nombres como los de Tobe Hooper, Guillermo del Toro, Alexandre Aja o Eli Roth entre sus directores, en el presente especial hacemos una selección de diez remakes de terror que, seguramente, habías olvidado que lo eran.
Películas de terror que no sabías que eran remakes
'Willard'
Aunque pasase desapercibida, en 2003 se estrenaba 'Willard', película de terror con puro aroma a serie B en la que Crispin Glover era el Willard del título, un hombre que decidirá emprender su venganza contra quienes le han hecho sufrir y convertido en un paria de la sociedad.
Para ello, liderará un ejército de ratas para sembrar el terror. Dirigida por Glen Morgan, la historia se basaba en la novela de Gilbert Ralston, la cual ya había sido llevada al cine en 1971 por Daniel Mann, quien contó con Bruce Davison para el papel de Willard en un film que aquí conocimos como 'La revolución de las ratas'.
'The Toolbox Murders'
De forma errónea, en 2004 'The Toolbox Murders' se tradujo en España como 'La masacre de Toolbox' (como si Toolbox fuese un lugar y no una caja de herramientas).
Dirigida por un Tobe Hooper en horas bajas, la película venía a dejar clara la tendencia hacia el carácter puramente exploit del realizador, quien reunió a Angela Bettis y Sheri Moon Zombie como protagonistas.
Lo que muchos entendieron como un slasher de segunda (con icónico psychokiller), en realidad no inventaba nada nuevo, pues se trataba de una actualización de 'El asesino de la caja de herramientas' de Dennis Donnelly, título que durante los últimos años se ha empezado a reivindicar como objeto de culto.
'Train'
En plena fiebre de los remakes de principios del nuevo siglo, uno de los títulos que se puso encima de la mesa para llevar a cabo una actualización fue 'El tren del terror', slasher de 1980 con Jamie Lee Curtis como scream queen y un asesino con la máscara de Groucho Marx.
Sin embargo, el guion que acabó escribiendo el también director Gideon Raff, se alejó totalmente de la premisa de la película original, manteniendo únicamente un tren como espacio donde desarrollar la trama. En esta ocasión, y con Thora Birch liderando el casting, los jóvenes eran un equipo de deportistas de viaje por Bulgaria, donde se toparán con una mafia de tráfico de órganos que mucho le debía a la sociedad secreta del 'Hostel' de Eli Roth.
'Reflejos'
Fue el propio Alexandre Aja quien llegó a decir que 'Reflejos' no era ningún remake. Pero si tenemos en cuenta que el director diría lo mismo de 'Piraña 3D' y que nunca ha llegado a confesar lo del plagio de 'Alta tensión', no hay por qué alarmarse.
Con Kiefer Sutherland como sufrido vigilante nocturno de un centro comercial, la historia nos presentaba a la temible amenaza que se erguía sobre el lugar a través de los espejos.
No le negaremos a 'Reflejos' su valía como título de horror mainstream, pero la idea original ya había visto la luz en 2003 de la mano del coreano Kim Seong-ho, bajo el título de 'El otro lado del espejo'.
'Silent House'
Del mismo modo en el que Hollywood copió uno a uno todos los éxitos del terror oriental, no iba a ser menos con las propuestas que llegaban desde Latinoamérica. Así, el mismo año en el que Jim Mickle presentaba 'Somos lo que somos', remake del film mexicano 'Somos lo que hay', Elizabeth Olsen protagonizaba 'Silent House', terror en tiempo real que funcionaba por lo original de su planteamiento.
Un año antes, el uruguayo Gustavo Hernández ya había dirigido la primera idea, llamada 'La casa muda', y con la que consiguió llamar la atención de todo el mundo. Si os parece que la de Olsen no está mal, echadle un vistazo a la apabullante película original.
'No tengas miedo a la oscuridad'
Producida por Guillermo del Toro, en 2010 se estrenaba 'No tengas miedo a la oscuridad', título que nos presentaba a unas temibles criaturas que vivían bajo la escalera de la mansión victoriana a la que se acababan de mudar Alex (Guy Pearce) y Kim (Katie Holmes) junto a la hija pequeña de él.
Del Toro había querido rendir su particular tributo a 'Don't Be Afraid of the Dark' (conocido también como 'Frío en la noche'), telefilm de 1973 que con el paso de los años había alcanzado notoriedad entre la crítica especializada.
'La mujer de negro'
De la pequeña pantalla también nace 'La mujer de negro', la recuperación del horror gótico que estrenaba la Hammer en 2012.
Con Daniel Radcliffe como protagonista y cogiéndole cariño por ser un carrusel de sustos bastante entretenido, la historia se basaba en la obra literaria de Susan Hill, la cual ya había tenido una primera adaptación en formato de largometraje, dirigido por Herbert Wise para la televisión inglesa y estrenado en 1989.
'All cheerleaders die'
Considerado uno de los Maestros del Horror del nuevo siglo por sus aportaciones al género ('May', 'The Woods', 'The Woman'), Lucky McKee presentaba en 2013 'All Cheerleaders die', la cual escribió y dirigió junto a su colega Chris Siverston.
En este cruce entre 'Chicas malas' y 'Jóvenes y brujas', McKee daba rienda suelta al humor negro que le ha caracterizado a lo largo de su trayectoria.
Lo que pocos saben, es que ya había una 'All Cheerleaders Die', dirigida por los dos compañeros en 2001, y cuyo resultado fue un film absolutamente amateur rodado sin presupuesto, teniendo que pasar más de una década para que lograse tener la adaptación que merecía.
'Toc toc'
Con su quinto largometraje, en 2015 Eli Roth consiguió desencantar a parte de su público, pues no somos pocos los que a día de hoy seguimos consternados por el cúmulo de despropósitos que juntó 'Toc toc'.
En esta especie de versión histriónica de un home invasion, Keanu Reeves se convertía en potencial víctima de dos taradas con las caras de Lorenza Izzo y Ana de Armas.
Roth, ferviente amante del cine exploit, había puesto el ojo sobre 'Death Game (Las sádicas)', película estrenada en 1977 y que muchos desconocerían si no fuese por este olvidable remake.
'Satan's Slaves'
Producida en 2017, 'Satan's Slaves' es una de tantas cintas de terror que nos llegan cada año desde Indonesia. En esta ocasión, y después de que ya haya pasado a formar parte del catálogo de algún canal de pago, es curioso afrontar esta propuesta de Joko Anwar.
Lo que a priori sería un título de casas encantadas, posesiones y exorcismos varios, esconde un par de capas que sorprenderán a más de uno. Para comenzar, el film remakea a uno del mismo nombre, estrenado en 1982. Lo curioso es que aquel 'Satan's Slave' ochentero, había sido ideado a su vez como un remake de 'Phantasma', el clásico de culto de Don Coscarelli.
