Para todos aquellos que ya hayan agotados los planes tradicionales de San Valentín, desde eCartelera sugerimos algunas ideas "de cine" para pasar como dos estrellas de Hollywood un día tan especial como romántico. ¿A quién no le ha apetecido alguna vez desayunar delante del escaparate de Tiffany's o ir a probar colchones de IKEA en pareja un día cualquiera? Estas son solo algunas de las sugerencias dedicadas "de todo corazón".
Y es que desde los comienzos del cine, las comedias románticas han sido una constante en taquilla, a pesar de lo predecible de sus historias y de la cuestionada veracidad de los romances de los que somos testigos, no obstante, no hay que restarle mérito a las labores de cortejo de las que hemos sido testigos muchas veces sin saberlo. Tácticas varias al alcance de (casi) todos esos públicos con muchas ganas de sorprender con algo diferente a su enamorado/a.
1. Desayuno en Tiffany's
Empezamos con algo tan básico como es hacer la comida más importante del día observando atentamente joyas que muy probablemente jamás vayamos a llevar. Sin embargo, es cuanto menos interesante la opción de volar a Nueva York, coger un café para llevar en cualquiera de las cientos de cafeterías de la Gran Manzana, y a primera hora de la mañana ponernos delante del escaparate de la famosa joyería como si fuéramos Audrey Hepburn. Aunque esta vez, el requisito indispensable es hacerlo en pareja.
2. Sí quiero... En el 'Titanic'
Aunque desgraciadamente Jack y Rose no pudieron pronunciar estas palabras, son muchas las que tienen la opción de hacerlo si su bolsillo se lo permite. Privada o con público, en las escaleras oficiales de la película o al borde del mar, son múltiples opciones a elegir para todos aquellos fanáticos de esta emblemática película que hayan pensado en sellar su amor al estilo James Cameron. Packs que van desde los 450.000 dólares en adelante y que te ofrecen diferentes posibilidades en función de las preferencias de la pareja. No apto para alérgicos a lo pomposo y al exceso de adornos.
3. 'Pretty Woman' por un día
¿Quién no ha soñado ser 'Pretty Woman' en algún momento de su vida? La película romántica por excelencia que ha hecho soñar a millones de jóvenes de edades varias, contraataca frente a estenos como 'Cincuenta sombras de Grey' y lanza su "oferta" particular. Por el módico precio de 100.000 dólares, cualquiera podrá recorrer algunos de los lugares más emblemáticos de esta película que este 2015 cumple 25. Tres horas de compras por Rodeo Drive, un paseo en Rolls-Royce, una noche en el Beverly Wilshire -el hotel de la película-, o la degustación del cóctel "Ella no es mi sobrina" son algunas de las actividades que incluye este combo con todas las papeletas para arrasar en la celebración de algún que otro San Valentín.
4. Tarde en el IKEA al estilo '500 días juntos'
Para los que no estén dispuestos a gastarse cifras por encima de las seis cifras está esta plan, más asequible y humilde en los tiempos que corren. Zooey Deschanel y Joseph Gordon-Levitt, también conocidos como los reyes de la comedia romántica indie, fueron los precursores de esta idea altamente amorosa que solo funciona bajo la atenta mirada de una familia japonesa. La única pega de esta opción es que el final feliz puede tener fecha de caducidad.
5. Recorrido por Ámsterdam 'Bajo la misma estrella'
Este verano fuimos testigos de uno de los romances adolescentes más entrañables del 2014, pero no solo nosotros vivimos esta historia. Las calles de la capital holandesa les sirvieron a Shailene Woodley y a Ansel Elgort para dar rienda suelta a su pasión. La casa de Anna Frank, los canales y como no el famoso banco víctima de un secuestro express son tan solo algunas de las atracciones que ya están disponibles en untour y al alcance de todos aquellos enamorados con ganas de hacerse carantoñas "bajo la misma estrella". Pero no busquen el Oranjee, por desgracia, no existe.
6. Una degustación a ciegas es solo ' Una cuestión de tiempo'
Domhnall Gleeson se enamoró de Rachel McAdams en un restaurante a oscuras ¿hay algo que tenga más mérito que eso? 'Dans le noir' es el nombre del famoso y peculiar comedor londinense que acogió a estos comensales en una velada tan romántica como oscura. Puede que la lista de espera no haga posible una reserva para este San Valentín, pero conviene tenerlo en cuenta de cara al próximo año. Toda una experiencia de cine que elevará los sentidos y el romanticismo a lo más alto.
7. Un cortado en el café de 'Amelie'
'Café Les Deux Molins' es el nombre de la cafetería preferida de la que bien podría ser precursora de la corriente hipster actual. En pleno barrio de Pigalle, subiendo hacia Montmatre está este emblemático lugar en la que la bella e ingenua Amélie Poulin pasaba las horas. Un plan cuanto menos apetecible si tenemos en cuenta que se trata de la ciudad romántica por excelencia, una opción interesante a pesar de que como bien dijo Amélie en su día, "son tiempos difíciles para los soñadores" (que no para los enamorados).
8. Una noche temática para los más fanáticos
Y ya para ir terminando, ¿qué mejor que culminar el día de San Valentín en una habitación de un hotel ambientado al estilo Hogwarts? Quizá haya quien prefiera dárselas de James Bond, y hacer de agente 007 en una noche tan especial o entregar "el anillo" en una casa al más puro estilo Bilbo Bolsón. Para cualquiera de ellos hay opción en San Valentín. De manera que si eres un fan reconocido de 'Harry Potter' nada como las habitaciones para magos que tienen preparadas en 'The Georgian House', o si por otro lado eres más del espía británico mejor el Seven de París. Y ya para los seguidores de Peter Jackson y de toda la compañía La casa Hobbit en Montana.
9. Para vivir tu propio 'Cincuenta sombras de Grey'
A modo de bonus, y teniendo en cuenta que estamos ante una profunda historia de amor y en fechas muy señaladas para la cinta de Sam Taylor-Johnson, un plan al estilo 'Cincuenta sombras de Grey' no podría faltar entre nuestras sugerencias. Así que si quieres conquistar tu sumisa/o nada mejor que el Portland Coffe House (actualmente Public Domain Café) para comenzar a conoceros, y ya después de un tiempo, de algún que otro viaje en helicóptero y por si el ático en edificio Scala en Seattle se os queda algo grande, siempre quedará la suite del Hotel Heathman para pasar la primera noche, eso sí, previo paso por el famoso ascensor.