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OCIO PROHIBITIVO

Los españoles no somos los únicos que tenemos que pagar más por "películas premium"

Ir a ver 'Capitán América: Civil War' en un cine de Reino Unido cuesta libra y media más por tratarse de un blockbuster. Una entrada normal ya cuesta casi 11 euros.

Por Jesús Agudo Más 29 de Abril 2016 | 18:59
El redactor más veterano de esta web. Palomitero y fan de que las series estrenen un capítulo por semana.

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Sí, ir al cine en España es caro. Mucho. Y parece que va a seguir siendo así porque, sin gobierno que nos gobierne, casos como el desorbitado IVA cultural no va a moverse en ninguna dirección. Así, los que se acerquen a ver, por ejemplo, 'Capitán América: Civil War' en su primer fin de semana en un cine de una famosa cadena en el centro de Madrid, tendrán que desembolsar nada menos que 10 euros, sin contar con suplementos por las gafas o los asientos más cómodos. Pero al menos parece que ya se ha suavizado ese polémico plus de las "películas premium".

Cines Odeon

Todo esto empezó cuando, allá por octubre del año pasado, Cinesa empezó a cobrar 1 euro más por ciertas películas de alta demanda, como fue el caso de 'Regresión', que justificaron que servía para seguir manteniendo ciertas promociones vigentes, añadiendo que el suplemento solo se aplicaba los diez primeros días en cartel de la película. Ocurrió con otras cintas, como 'Star Wars: El despertar de la fuerza', pero parece que el asunto no salió tan rentable, y no encontramos ninguna película premium en la cartelera de esta cadena. Nos tendremos que dar con un canto en los dientes, porque en Reino Unido están que trinan gracias a estos suplementos que hacen más difícil animarse a ir al cine.

Dos de las cadenas principales del país, Vue y Odeon, también aplican los llamados "precios Blockbuster" a las películas con mayor demanda, que dependen del título. Así, 'Capitán América: Civil War' y 'Batman v Superman: El amanecer de la Justicia' tienen 1,50 libras de recargo, mientras que 'El Libro de la Selva' tiene 1 libra de suplemento y por 'Zootrópolis' hay que pagar 0,50 libras más. El tope llegó con 'Star Wars', que tenía 2 libras de recargo los primeros días en carteleras. Como podemos ver en este tuit hecho en unos cines de la cadena Odeon, a ello hay que sumarle los suplementos de asientos premium, gafas si no tenemos y el propio 3D, que casi ningún cine de España sigue cobrando.

En su momento, un representante de Odeon dio una respuesta bien parecida a la de Cinesa: "Desde el año pasado hemos ofrecido a nuestros visitantes una amplia selección de películas y entretenimiento con una política de precios flexibles. Así que como muchos cines y complejos de ocio, nuestros precios dependen de la localización, el tipo de entretenimiento que estemos mostrando, tipo de asiento, tiempo desde el lanzamiento, la edad de nuestros invitados y el número de personas reservando a la vez. Esto da a nuestros invitados mucha capacidad de elección y la oportunidad de disfrutar de descuentos y promociones en periodos más tranquilos, con todas las opciones de precios claramente señaladas en nuestros cines y online".

La burbuja del cine

El caso es que, como aquí, los espectadores se les han lanzado al cuello, sobre todo en casos en los que 'Regresión' o 'Batman v Superman' gran parte de ellos salen descontentos y critican que no ven el "premium" por ninguna parte. Más todavía cuando el precio base ya es bastante alto, que en Reino Unido tampoco andan mal. Una entrada cuesta unas 9 libras, que son unos 11,5 euros, pero si vamos a los Odeon que hay en la céntrica plaza de Leicester en Londres, una entrada puede llegar a costar, con todos los suplementos, hasta 25 libras. Casi 32 euros. Ellos no andan escasos de IVA cultural, que llega al 20%. Muy lejos del 5,5% francés, por ejemplo, aunque una entrada de cine allí cuesta también 11 euros un viernes cualquiera en una gran cadena de cines en París.

El problema del precio en los cines no se queda solo dentro de nuestras fronteras, como podemos comprobar. Cierto es que no podemos comparar los salarios de España y Reino Unido, que es lo que hace verdaderamente más sangrante el comprar una entrada en nuestro país, pero al igual que ocurre muchas veces aquí, los británicos reciben cada semana unas quince novedades en la cartelera, inabarcables a 9 libras la entrada. Suerte que las películas pequeñas empiezan a tener otras plataformas de exhibición, porque está claro que lo más probable es que la mayor parte del público, si puede permitirse una entrada de cine, la gaste en las llamadas "películas premium". Pero esta es una burbuja que sigue acabando con el hábito de ir al cine. Y sin cines, blockbusters precisamente "premium" pierden bastante su hábitat natural.