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El personaje original de RKO tuvo dos apariciones especiales en el universo de Toho. En ambas películas se mostraba un gorila mucho más grande que el original y con unas reacciones más cómicas, como el momento en el que es trasladado con globos al campo de batalla. Honda también dirigió las dos incursiones de Kong en tierras niponas: 'King Kong vs. Godzilla' y 'King Kong escapa'. En la primera luchaba con el atómico monstruo y en la segunda contra una versión robotizada del primate. Esos enfrentamientos a gran escala se convirtieron en habituales entre las producciones de Toho. Poco o nada se parecía este Kong al que debutó en 1933, pero se sacó un gran partido a su fuerza bruta añadiendo poderes vinculados con la electricidad. Sin duda uno de los monstruos más poderosos que batallaron en los films del estudio japonés.

La versión robotizada de Kong sirvió de inspiración para crear a esta némesis de Godzilla. Su aparición original se produjo en 1974, cuando fue presentado como una creación extraterrestre enviada a nuestro planeta con objetivos de conquista en 'Godzilla vs. Mechagodzilla'. Sus principales habilidades eran la creación de un campo de fuerza a su alrededor y, sobre todo, el lanzamiento de misiles desde sus extremidades de titanio. Debido al éxito de ese film, el personaje fue recuperado y dependiendo de la versión iba variando su origen, ya que, por ejemplo, en la secuela de aquella, Mechagodzilla era creado en la Tierra para combatir al desatado Godzilla.

Después de Godzilla, Mothra es el monstruo más prolífico de Toho. Esta polilla ha sido mostrada con una actitud menos hostil que el gran lagarto, pero igualmente es capaz de desplegar las artes de la destrucción si es necesario, sobre todo cuando se amenaza a su especie. Mothra apareció por primera vez en la gran pantalla en 1961, en la película que llevaba su nombre, dirigida también por Ishiro Honda. Desde entonces la polilla ha sido mostrada en diferentes etapas de su desarrollo, ya que en sus apariciones en las películas de Godzilla también apareció en diversas ocasiones caracterizada como larva.

En los años sesenta conocimos a otro de los grandes iconos del kaiju. En 'Godzilla contra Ghidorah, el dragón de tres cabezas' se presentaba a ese imponente monstruo tricéfalo, que siguiendo la tónica habitual se enfrentó a la criatura más popular de Toho. El dragón dorado tuvo que luchar en su debut no solo con Godzilla, sino con Mothra y Rodan, que se unieron para evitar que destruyera el planeta. Acostumbrados a ver a Godzilla sembrando el caos, ese rol de protector se convirtió en una alteración significativa de su comportamiento habitual. Después, King Ghidorah protagonizó otros enfrentamientos con Mothra y Godzilla, aunque su origen e intenciones dependieran de cada film y etapa de Toho (Showa, Heisei y Millennium).

Al igual que sus influyentes compañeros, Rodan debutó en una película que llevaba su nombre. En su caso el estreno se produjo en 1956, también de la mano del infatigable Ishiro Honda. Esa producción nos presentaba a un monstruo mucho más amenazante y criminal que en sus siguientes apariciones, con su característico pico plagado de dientes. Tras ese debut alejado de Godzilla, en sus siguientes irrupciones sí que compartiría pantalla con el líder de los monstruos. Entre sus poderes más conocidos: los clavos que plagan su pecho, la capacidad de generar huracanes con sus inmensas alas y la generación de potentes ráfagas de viento desde sus fauces.

Esta terrorífica morsa apareció únicamente en una producción de Toho, 'Gorath', pero se ganó un sitio especial entre los monstruos. Como se puede apreciar por su poco amigable aspecto, Maguma era el villano de la cinta de 1962, en la que fue despertado por el lanzamiento de un misil en el polo norte. Los humanos centraron todos sus esfuerzos en acabar con la nueva amenaza, que tenía como principal ventaja sus increíbles cincuenta metros de altura y una fuerza imparable. Los afilados colmillos definían su aspecto, pero cuando tenía que batallar recurría a sus potentes aletas para terminar con sus enemigos.

Al igual que Maguma, Dogora también contó con una única aparición. Hay que destacar su aportación al universo de Toho, saturado de una amplísima variedad de monstruos, porque fue el primer kaiju que no fue encarnado por un humano. Debido a la atípica forma de esta medusa, no se pudo recurrir al disfraz para lograr su movimiento. Su debut y despedida tuvo lugar en 1964, cuando este fruto de la radiación se posó sobre Tokio para imponer su caos personal. ¿La gran debilidad de la medusa? Los venenos de avispas y abejas, que convertían en rocas las células de un monstruo que apareció fugazmente pero de forma memorable.

El monstruo de Frankenstein, creado originalmente por la escritora Mary Shelley, también se unió a la ambiciosa fiesta de Toho. Las dos películas en las que apareció, 'Frankenstein Conquers the World' (1965) y 'The War of the Gargantuas' (1966), se referían a él simplemente como Frankenstein, sin diferenciarle del apellido de su creador. La primera de esas producciones mostraba a un monstruo con la valiosa habilidad de la regeneración de tejidos, mientras que en la segunda el personaje variaba sustancialmente. En 'The War of the Gargantuas' se desdoblaba al previo Frankenstein en dos peludos y gigantes seres, uno marrón y otro verde, llamados Sanda y Gaira, que terminaban enfrentándose entre ellos, como no podía ser de otra manera.