'Repo! The Genetic Opera' es la nueva película de Darren Lynn Bousman, el encargado de llevar a la gran pantalla 'Saw 2', 'Saw 3' y 'Saw 4', y que ha sido presentada en Festival de Sitges antes de su estreno en Estados Unidos y, por supuesto, de su aparición en las carteleras españolas el próximo 5 de diciembre.
Protagonizada por Alexa Vega, Bill Moseley, Paul Sorvino, Paris Hilton, Nivek Ogre o la cantante Sarah Brightman, entre muchos otros, este curioso musical nos ubica en un futuro no muy lejano, concretamente en el año 2056, cuando una temible epidemia ataca a los órganos internos de los humanos, diezmando a la población. Así pues, se iniciará una compra-venta masiva de tráfico de órganos que beneficiará a un despiadado magnate.
Buenas intenciones
No podemos sentir sino cierta decepción ante esta adaptación a largometraje del cortometraje compuesto por Darren Smith y Terrance Zdunich que en 2006 ya fuera dirigido por el propio Darren Lynn Bousman. Y es que, efectivamente, los casi 100 minutos que dura 'Repo! The Genetic Opera' se nos antojan como poco más que una permutación de una misma fórmula, un entramado en espiral que da demasiadas vueltas sobre sí mismo sin apenas avanzar en su argumento. Por ello, 'Repo! The Genetic Opera' no termina de funcionar en casi ningún momento, alejándose de esa preconcebida etiqueta de culto que muchos han (hemos) querido ver en ella, a la espera de que estuviéramos ante el 'The Rocky Horror Picture Show' o 'El Fantasma del Paraíso' del siglo XXI.
Por desgracia, y a pesar de resultar una película encomiable en muchos aspectos y, con diferencia, la mejor en la filmografía de su director, 'Repo! The Genetic Opera' queda relegada a ser poco más que una curiosidad, completamente alejada de las producciones más recientes del género como 'Sweeney Todd', por lo que compararlas resulta poco más que un ejercicio gratuito. Y es que 'Repo! The Genetic Opera' poco o nada tiene que ver con el musical ortodoxo, encontrándose más próximo al experimento Hi-Tech bajo los parámetros del videoclip que del musical al uso, en una película entretenida en líneas generales y que redime sus carencias tanto de talento como de presupuesto con efectistas (y efectivos, por otro lado) recursos.
Con una elegante introducción a modo de cómic que se repetirá en diversas ocasiones, Darren Lynn Bousman nos sumerge en un universo que amalgama el cyber-punk con el goticismo New Age, histriónico y deslumbrante, en el que el CGI y el atrezzo de cartón piedra más bizarro se funden en una escenografía que bien podría ser resultante de un híbrido entre el cine de Shinya Tsukamoto y la generación Mtv. Así pues, es por su faceta estética por lo que 'Repo! The Genetic Opera' merece ser recordada, sentando con toda probabilidad un futuro referente para el musical más underground.
Por desgracia, el entremado de la película de Darren Lynn Bousman carece del empaque suficiente argumentalmente hablando, resultando cansino y reincidente en un sempiterno planteamiento que apenas sí llega a avanzar en cuanto a acción se refiere, handycap que desmerece a su atrevimiento tanto técnico como artístico, en una película íntegramente cantada que suple grandes decorados y aglomeración de extras por una clara tendencia videoclipera, vistosa y colorista, en la que la grabación de estudio con constantes cambios de plano se erige como principal recurso.
Musicalmente hablando, 'Repo! The Genetic Opera' también merece cierto reconocimiento, hallándose, como decíamos, mucho más próximo a la esencia de la ópera rock descaradamente por la película de Brian De Palma que por la construcción de una partitura compleja y de estructura clásica, que bien podrá decepcionar a algunos pero que, a fin de cuentas, era lo que cabía esperar.