Protagonizada por Daniel Craig, Liev Schreiber, Jamie Bell, George MacKay, Alexa Davalos, y dirigida por Edward Zwick, responsable de títulso como 'Leyendas de pasión', 'El último samurai' o 'Diamante de sangre', 'Resistencia' llega a las pantallas norteamericanas el próximo 12 de diciembre.
La película, que cuenta la historia de cuatro hermanos judíos que viven en Polonia cuando estaba ocupada por los Nazis y que hacen alianza con la resistencia rusa, está basado en la novela 'Defiance: The Bielski Partisans', escrita por Nechama Tec.
Originalidad al poder
'Resistencia' ha sufrido no pocos retrasos hasta llegar a estrenarse en los cines, y no sólo por estos lares. Por desgracia, dicha demora no hace sino manifestar la escasa calidad de un film que podría haber llegado con toda tranquilidad directamente al formato doméstico a nuestro país, pero que aterriza en las salas gracias a la figura del nuevo Bond.
Abarcando la ya reiterativa temática del holocausto judío como telón de fondo, Resistencia se engloba dentro de títulos recientes como 'El último tren a Auschwitz' o 'El niño con el pijama de rayas', incapaces de emocionar ni con las técnicas más lacrimógenas al espectador. Por su parte, 'Resistencia' pretende ser una historia de fortaleza, orgullo y coraje, una suerte de La lista de Schindler en clave polaca que sigue la figura de tres hermanos.
Por desgracia, la película de Edward Zick resulta exasperantemente rígida y previsible, lo cual no hace sino convertir sus cerca de sus dos horas y media en una verdadera tortura para todo aquel que posea una mínima intuición, recurriendo a los giros argumentales de manual de bolsillo y los arquetipos interpretativos con una facilidad pasmosa: el personaje interpretado por Daniel Craig se erige en una mescolanza de Oskar Schindler y Vlad Tepes, reuniendo a los judíos dispersos en el bosque y sirviéndose de las técnicas de guerrilla y subterfugios varios para sobrevivir a la cacería nazi, teniendo a su propio hermano mayor como antítesis reconvertida en Némesis a la par que en paradigma de la rivalidad entre hermanos.
Del mismo modo, todos y cada uno de los personajes más o menos secundarios carecen tanto de vida propia como de credibilidad, dándonos constantemente la impresión de que estamos viendo a actores interpretando a sus personajes, y no a los propios personajes, sensación que queda acentuada por unos diálogos manidos enfatizados por la ya mencionada previsibilidad de su argumento.
De este modo, 'Resistencia' carece tanto de empaque como de tensión algunos, convirtiendo una idea repleta de posibilidades en un compendio de clichés carentes de fuerza y sorpresa.
Una lástima.