Aún faltan unos meses para el estreno de 'Rogue One: Una historia de Star Wars' y no digamos para el de 'Star Wars: Episodio VIII', sin embargo, su director Rian Johnson ha vuelto del mes de descanso que se tomó tras finalizar el rodaje y ya ha comenzado a editar la película. Aún faltan 16 meses para su estreno, pero el montaje de una película de estas dimensiones, con tantos efectos especiales (y tantas horas de renderizado) lleva su tiempo.
El director lo ha anunciado con una foto en su cuenta de Instagram, poniendo: "Día uno". Veremos si sigue tan contento después de todas las horas que pasará junto al montador en esa sala, o si se da el caso de que tenga que regrabar algunos planos. El hecho de haber comenzado el montaje no significa nada respecto al estreno de la película pero sí que acerca más la posibilidad de poder ver algún tráiler pronto.
Quien también vuelve al trabajo es John Williams, que ha afirmado que comenzará pronto a componer la banda sonora de la película. Aunque este debería ser un trabajo fácil para él puesto que la banda sonora no ha cambiado demasiado desde el estreno de 'Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza' en 1977.
El universo 'Star Wars'
Lo próximo que podremos ver de dicho universo es 'Rogue One: Una historia de Star Wars' que se estrenará en España el 16 de diciembre de 2016. Al año siguiente, el 15 de diciembre de 2017 llega 'Star Wars episodio VIII'. 'Han Solo: A Star Wars Story' en mayo de 2018 llega a EE.UU y 'Star Wars: Episodio IX' llegará a finales de 2019. Se rumorea que podría haber otro spin-off sobre este universo. Boba Feet es quien más sonaba respecto a esto, pero de momento no se sabe nada al respecto, aún así, los fans de la saga tienen motivos para estar contentos.
15 curiosidades de la saga 'Star Wars'
El miedo a una hecatombe
George Lucas pensaba que su creación iba a ser un fracaso, en lo que coincidían algunos amigos a los que había mostrado la película en un pase privado. Es el caso de Brian de Palma, quien la calificó como la peor película que había visto. Así que Lucas, en vez de atender al estreno, se fue de vacaciones a Hawaii con Steven Spielberg. Durante su estancia germinaron la idea de 'Indiana Jones'.
Cuando las secuelas no dominaban la Tierra
La escena de 'La guerra de las galaxias' en la que el el TIE fighter (caza estelar) que pilota Darth Vader queda fuera de control en el espacio, con el villano, por lo tanto, aún vivo, fue incluida más tarde, por la insistencia de Lucas, ya que otros componentes del equipo consideraban que dejaba abierta la opción de una secuela (y entonces no estaban bien consideradas como opción comercial rentable).
El director que solo sabía dos frases
Los actores achacaban a George Lucas que fuera poco comunicativo. Solo decía: "Más rápido" o "Más intenso". Cuando durante unos días se quedó sin voz, le facilitaron una pizarra donde estaban escritas esas palabras.
El héroe que podía parecer el líder de una secta
Ya había comenzado el rodaje cuando Lucas decidió modificar el apellido de Luke, del original Starkiller por Skywalker. Temía que "el asesino de estrellas" adquiriera connotaciones que se asociaran con Charles Manson (célebre por el asesinato de la actriz Sharon Tate y cuatro amigos el 9 de agosto de 1969). J.J. Abrams homenajea al nombre en 'El despertar de la fuerza': la principal base se llama 'Starkiller base'.
La amenaza fantasma de las prendas (o de su ausencia)
Los productores querían que Chewbacca no fuera desnudo, sino que vistiera algún atavío, como unos pantalones cortos. Peter Cushing sufría con las botas que tenía que portar. Por eso no las utilizaba en los planos que no eran generales y no se le veía de cuerpo entero. Los pechos de Carrie Fisher fueron cubiertos con cinta adhesiva para que no se transparentaran, ya que el vestuario no permitía portar lencería. Como dijo ella irónicamente: "Como todos sabemos, no hay ropa interior en el espacio exterior". Sus repetidas quejas sobre su vestuario en las dos primeras obras de la saga, con las que, dijo, "no parecía una mujer", dieron sus frutos. De ahí, su escaso vestuario como esclava de Boba Fett en el inicio de 'El retorno del Jedi'. Claro que difícil de manejar o controlar. Antes de rodar cada plano, tenía que estar pendiente alguien de vestuario de que los pechos se mantuvieran ajustados en el interior de tan escasa tela. Pero muchos planos debieron ser rodados de nuevo porque los rebeldes pechos no dejaban de desafiar al imperio de escasa tela.
La fuerza con ojos rasgados y tamaño pequeño
Antes de decantarse por Alec Guinness para interpretar a Obi Wan Kenobi, se consideró la posibilidad de que fuera el actor japonés Toshirô Mifune, protagonista de 'La fortaleza escondida', y que la princesa Leia también tuviera rasgos orientales. También se había considerado que Luke, y sus tíos, fueran enanos.
Los directores posibles
Paul Verhoeven fue considerado para rodar 'El imperio contraataca', tras rodar 'Eric, oficial de la reina'. Mantuvo una reunión, en la que enseñó su película 'Vivir a tope', pero no supo más. David Lynch (como ya te contamos) y David Cronenberg fueron tanteados para rodar 'El retorno del Jedi', pero ambos desestimaron la oferta.
La inspiración robótica y cómica
El antecedente del diseño de R2-D2 es el de los robots asistentes de 'Naves misteriosas' (1972), de Douglas Trumbull. Y el de C-3PO, el del Maria en 'Metropolis' (1926), de Fritz Lang, el primer robot de la historia del cine. Y se convirtieron en la versión robótica de 'El gordo y el flaco' (Oliver Hardy y Stan Laurel).
El maldito sonido de la fuerza
El sonido de los sables láser se consiguió golpeando con un martillo el alambre de retención de una radio torre de antena. En 'La amenaza fantasma' (1999), durante las peleas con las espadas láser, Ewan McGregor acompañaba cada movimiento con el zumbido correspondiente, cual niño que emula el combate y pone el efecto de sonido que falta. Fue advertido durante el proceso de montaje y suprimido. Por su parte, Jake Lloyd, el actor infantil que encarnó a Anakin, declaró que decidió no proseguir con la interpretación en más películas por el trauma que le supuso el comportamiento de otros niños que no dejaban de imitar el sonido de las espadas láser cada vez que se cruzaban con él. Lo que se agravó, convertido en tortura, por el hecho de que la película no satisfaciera las expectativas de los fans.
La fuerza tiene sus límites
En 'El imperio contraataca' (1980), Mark Hamill tuvo que golpear su cabeza 16 veces contra el techo de la choza de Yoda antes de que el director, Irvin Kershner, quedara satisfecho. En 'La guerra de las galaxias', en la secuencia de la trituradora, aguantó tanto la respiración bajo el agua que se le reventó una vena facial. En el siguiente plano que rodaron se le encuadró desde el perfil indemne.
En una galaxia muy lejana una patata y un zapato se convirtieron en asteroides
Se rumorea que un asteroide era un zapato. Por lo que parece, debido a la insistencia de Lucas en que rehicieran los asteroides, uno de los diseñadores de efectos especiales lanzó hastiado uno de sus zapatos entre los asteroides. Se dice que fue corregido en una posterior remasterización. Lo que sí es seguro es que un asteroide es una patata. Aparece cuando el Halcón Milenario entra en el campo de asteroides: es el tercero que aparece por la izquierda.
La caja mágica
Carrie Fisher tuvo que subirse a una caja en muchos de los planos compartidos con Harrison Ford, dada la notoria diferencia de estatura (1'81 frente a 1'51).
Doble casting
George Lucas hizo el casting a la vez que Brian De Palma el de 'Carrie' (1976). William Katt, que también hizo una audición para el papel de Luke Skywalker, acabó consiguiendo el papel del chico soñado por la protagonista de la adaptación de Stephen King.
El cameo de una directora
Una sonrisa risueña
Durante el rodaje en Londres, Carrie Fisher alquiló un piso que pertenecía a Eric Idle, quien junto a los otros componentes de Monty Phyton, rodaba entonces 'La vida de Brian'. En una fiesta organizada por Idle, a la que asistieron la actriz, Harrison Ford y los componentes de los Rolling Stones, entre otros, bebieron un potente licor que Idle llamaba "Limpiador de mesas tunecinas". Al día siguiente rodaban la escena de la llegada a la Ciudad de las nubes. Las secuelas del alcohol ingerido explica la expresión tan risueña de Carrie Fisher y Harrison Ford en esa escena.