En 1988 se estrenó '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', una película pionera que mezclaba acción real y animación y que fue todo un éxito de taquilla. Considerada hoy en día un título de culto, hay a quien le gustaría ver una secuela, entre ellos al director de la cinta, Robert Zemeckis. Lamentablemente, y según el propio cineasta, parece que Disney no tiene pensado resucitar a Roger Rabbit para la gran pantalla.
En una entrevista con Yahoo con motivo del estreno de su nueva película, 'Bienvenidos a Marwen', Zemeckis ha hablado sobre la posibilidad de una segunda parte de 'Roger Rabbit', dejando caer que Disney apenas tiene interés: "No sé si encaja en su universo. No hay princesa en ella, así que no sé dónde estaría. Hay un guion maravilloso guardado en Disney que es realmente bueno, pero creo no está en su radar".
No es la primera vez que Zemeckis habla sobre este truncado proyecto. Tal y como recuerda Slash Film, el director ya dio pistas sobre el guion, explicando que era "más una continuación que una secuela" y que seguiría la andadura de Roger Rabbit y Jessica "en los siguientes años del cine de la época, desde el cine negro hasta el mundo de la década de los 50". Zemeckis ya confesó entonces que, a pesar de que el guion era "magnífico", la película no tenía sitio en Disney: "La cultura corporativa actual de Disney no tiene ningún interés en Roger, y ciertamente a ellos no les gusta Jessica en absoluto". Este intento, además, habría contado con el fantasma de Eddie Valiant, interpretado por Bob Hoskins en la cinta original. Para recrear a su personaje habrían utilizado técnicas digitales, ya que el actor murió en 2014.
Intentos fallidos
Parece que no veremos una secuela de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', y no porque no se haya intentado. En 1989, un año después del estreno de la original, se escribió el guion para una secuela, titulado 'Roger Rabbit: The Toon Platoon', en el que Roger trataba de encontrar a su madre biológica. El guion no era muy del agrado del productor, Steven Spielberg, y nunca se llegó a hacer. Otro guion titulado 'Who Discovered Roger Rabbit' circulo por un tiempo, pero en 2013 Gary K. Wolf, autor de la novela en la que se basaba la película original, aseguró que estaba trabajando en una precuela protagonizada por Roger y Mickey Mouse. Incluso J.J. Abrams estuvo a punto de escribir un guion en cierto punto. Ninguno de estos proyectos vio la luz del día.
10 curiosidades de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?'
Presupuesto histórico
Un mes después de que 'Rambo III' pasara a la historia gracias a su presupuesto de 12 millones, el más alto de la historia del cine hasta ese momento, apareció un conejo para robarle el protagonismo en el podio. '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' pulverizó la marca del bueno de Stallone con sus, atención, 70 millones de dólares de presupuesto, una cifra absolutamente increíble.
Dos años después, 'Terminator 2: El juicio final' superó a la película de Zemeckis al costar 100 millones de dólares. A día de hoy, parecen cantidades casi ridículas en comparación con las superproducciones actuales, pero en la década de los 90 consiguieron desencajar más de una mandíbula.
Sueños rotos
Hablemos en serio, ¿es posible ver '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' y no terminar enamorado de ella? Se trata de una propuesta tan memorable que cuesta imaginarlo. En el momento de su estreno, desde luego, sus detractores se podían contar con los dedos de una mano. Eso sí, tenían un líder destacado, el hijo de Bob Hoskins, que decidió dejar de hablar a su padre después de ver la película.
El actor, que no entendía nada de aquella situación, terminó preguntándole directamente que es lo que ocurría. La respuesta de su hijo fue que nunca podría perdonar a su padre que trabajara con personajes como Mickey o Bugs Bunny y nunca se los hubiera presentado. Cosas (maravillosas) de niños.
El juego de la silla (de director)
El trabajo que realizó Robert Zemeckis detrás de las cámaras sigue siendo uno de los puntos más deslumbrantes y convincentes de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' pero, sin embargo, no se trató de la primera opción para los productores. Y es que, antes de que el director de 'Forrest Gump' y 'Náufrago', entre otros clásicos, se ocupara del proyecto, Terry Gilliam y Steven Spielberg recibieron la oferta para ponerse al frente. En el primero de los casos, Gilliam terminó abandonando el barco al considerarlo un trabajo demasiado complicado. Spielberg, por su parte, prefirió dirigir 'El imperio del sol', una de sus obras más personales.
Animación de toda la vida
Pese a que su acabado técnico sea su verdadero triunfo histórico, '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' consiguió convertirse en todo un referente dentro del género de la animación de una manera mucho menos avanzada de lo que pueda parecer. ¿La razón? Todos y cada uno de los dibujos que aparecen en la película están pintados a mano sin que se usara en ningún momento el ordenador para su elaboración, más allá de algún que otro retoque a las sombras y brillos para mejorar su aspecto tridimensional. Una fórmula que hace que su interacción con los personajes de carne y hueso sea aún más impactante.
Títulos interminables
Cuando termina una película, siempre es recomendable quedarse a ver los títulos de crédito hasta el final. Se trata de una demostración de respeto hacia el trabajo de muchísimas personas que han trabajado sin descanso para que la obra llegue hasta nosotros de la mejor manera posible. En el caso de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', la exigencia para el espectador era un poco más alta ya que, después de la última escena, aparecían en pantalla más de 800 nombres. Una cifra que hizo que los títulos de crédito de la película, con una duración de más de diez minutos, se convirtieran en los más largos de la historia del cine.
Condiciones entre dibujos
Contar en tu reparto con algunos de los personajes más emblemáticos de la historia de la animación es todo un logro. Poner de acuerdo a dos estudios como Warner y Disney, un milagro. Sin embargo, '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' lo consiguió. Aunque tuvo que sudar para ello. Y es que, Warner cedió los derechos de personajes como el Pato Lucas o Bugs Bunny, entre otros, a condición de que estuvieran en pantalla el mismo tiempo que Mickey y compañía. Ni un minuto más, ni uno menos. Además, tenían que tener un control absoluto del comportamiento de cada uno de ellos, sin excusas. Los responsables de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', claro, accedieron. Merecía la pena.
Divas
Una creación cinematográfica tan deslumbrante e inolvidables como la de Jessica Rabbit solamente podía surgir del eco de las más grandes actrices de la historia. Divas absolutas, leyendas que sirvieron de inspiración a la hora de dibujar a un icono absoluto del género de la animación.
Zemeckis lo tenía claro, Jessica debía tener la silueta más parecida posible a la de Rita Hayworth, los rasgos más característicos de Lauren Bacall y el estilo a la hora de moverse de Veronica Lake. Tres actrices maravillosas cuya combinación solamente podía terminar en éxito.
Efectos secundarios
Antes de que los avances tecnológicos facilitaran el proceso de una manera espectacular, los actores y actrices no estaban nada acostumbrados a actuar frente a personajes imaginarios. Nada de captura de movimientos. Nada de pantallas verdes. La imaginación debía ser clave para el éxito del proceso. Por eso, para preparar su papel en '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', Bob Hoskins estuvo observando en secreto a su hija para aprender a compartir escena con elementos y personajes invisibles. Un juego de niños que casi termina en tragedia, ya que el actor estuvo sufriendo alucinaciones durante gran parte del rodaje.
Muñeca Rabbit
Una película como '¿Quién engañó a Roger Rabbit?' podría haber salido muy bien o muy mal, pero lo que está claro es que en términos de merchandising nunca debería haber tenido ningún problema. La cantidad de personajes inolvidables que aparecen en la inmensa mayoría de sus escenas suponía un valor seguro a la hora de hacer dinero. Por supuesto, cuando la taquilla comenzó a funcionar de manera destacada, se comenzó a aumentar la caja con juguetes, camisetas, tazas, etc.
Un conjunto de productos que, sin embargo, no contó entre ellos con una muñeca hinchable a imagen y semejanza de Jessica Rabbit, una propuesta que recibieron los productores y a la que se negaron en rotundo.
Atrapado en el arrepentimiento
Robert Zemeckis y Steven Spielberg, director y productor de '¿Quién engañó a Roger Rabbit?', tenían claro que Bill Murray era el actor perfecto para protagonizar la película.
Una opción que, teniendo en cuenta el personaje propuesto y el espíritu de la cinta, parecía más que acertada. Sin embargo, ninguno de ellos consiguió contactar con el actor, tirando la toalla y decantándose finalmente por el gran Bob Hoskins. Años más tarde, el propio Murray confesó sentir mucho rabia y pena por no haber conseguido participar en la película, ya que habría aceptado el papel sin dudarlo.