Desde que 'El oficial y el espía' recibiese sus 12 nominaciones a los premios César, la cinta se ha visto envuelta en polémica por las acusaciones de violación hacia Roman Polanski, director del filme. Tras la oposición con la que el filme se recibió, el cineasta ha comunicado que no acudirá a la ceremonia del próximo 28 de febrero en París, según recoge France Press.
El director ha mantenido como la principal causa de su ausencia el linchamiento público y las manifestaciones con las que se le recibiría en la gala. "Durante varios días, la gente me ha preguntado si iría o no a la ceremonia. La pregunta es más: ¿Cómo podría?...Las activistas me están amenazando con un linchamiento público. Algunos han convocado manifestaciones, otros están planeando crear una plataforma...Esto promete parecerse más a un simposio que a una celebración del cine diseñada para premiar a sus mayores talentos", ha mantenido éste a través de su comunicado.
Esta decisión no ha sido recibida como una sorpresa, debido a que el país galo ha sido el que más acciones ha concentrado contra Polanski y su nueva cinta. Un ejemplo se vio el pasado 12 de febrero, cuando nueve mujeres de asociaciones feministas protestaron ante la Academia de las Artes y las Técnicas de Cine en París para que no votasen a la producción, al considerar que ésta actúa como un lavado de cara para el que fuese ganador del Oscar por 'El pianista'.
El cineasta fue acusado el pasado noviembre de 2019 por la actriz Valentine Monnier, que afirmó que el director la agredió y violó en 1975, algo que éste negó y por lo que no ha recibido ninguna condena. Por otro lado, recordemos que el director se exilió a Francia en 1978 para evitar ser condenado por las acusaciones de violar a una niña de 13 años en Estados Unidos, por lo que tampoco ha sido juzgado.
Francia protesta contra el director
Tras la confesión de Monnier, la cinta de Polanski fue recibida con manifestaciones y boicots en el país galo desde su estreno también el pasado noviembre de 2019. Así, algunos grupos protestaron con generadores de humo y pancartas con los nombres de las mujeres que han acusado a Polanski, con lo que lograron que ésta no se proyectase en uno de los cines de la ciudad.
Además, estas acciones se unen así a otras como las llevadas a cabo el pasado 26 de febrero, cuando se pegaron pósters frente a la Sala Pleyel (lugar donde se celebra la ceremonia) en los que se señalaban los delitos de éste. Ante todo esto, el director se ha defendido acusando a los que le atacan de atentar contra la ley y tachándolos de "irracionales que han vuelto a triunfar de nuevo".
