Cinco películas, seis con la reciente 'Posesión Infernal: El despertar', una serie, videojuegos, cómics y hasta un musical. Otra cosa no, pero las posibilidades de disfrutar de la saga 'Posesión infernal', una de las más queridas del género desde la década de los ochenta, son tan variadas como gozosas. Y prácticamente todas cuentan con Bruce Campbell, lo cual las convierte automáticamente en una auténtica fiesta.
Desde el mediometraje con el que se inició la franquicia ('Within the Woods') a finales de la década de los setenta, la saga liderada por el director Sam Raimi, talento cuya visión marca cada pieza de este sangriento puzle, fue creciendo entrega a entrega, logrando incluso algo tan complicado como contar con un remake por encima del notable. Una evolución basada en el aumento del humor más disparatado y un irresistible delirio tanto visual como argumental.
Carcajadas, leyendas, criaturas imposibles, historias disparatadas, numerosísimas escenas para el recuerdo, un protagonista legendario y la sensación de que todavía queda material por explotar. El universo de 'Posesión infernal', aunque parezca una contradicción, está más vivo que nunca. Es lo que tiene el cine de calidad, locura e impacto atemporal.
La saga 'Posesión infernal', de peor a mejor
'Within the woods'
Pese a no ser poco más que una especie de (divertido) ensayo de lo que serían las dos primeras entregas de la saga, especialmente el capítulo inicial, hay algo encantador en 'Within the woods', mediometraje en el que Sam Raimi se las apaña para ofrecer algún que otro brillo de su característico talento. Ajustada en tiempo y ritmo, juguetona en su puesta en escena y sorprendentemente efectiva en el sobresalto, este prólogo de la saga resulta una disfrutable curiosidad.
'Posesión infernal'
No se puede negar el impacto que tuvo 'Posesión infernal' en la historia del cine de terror en general y de la década de los ochenta en particular, pero lo cierto es que, con el paso del tiempo, su capacidad para cautivar ha disminuido considerablemente. Por supuesto que sus virtudes siguen ahí, con la diabólica dirección de Sam Raimi a la cabeza, pero la sensación es la de asistir a un espectáculo demasiado fijado a su tiempo. En cualquier caso, imposible imaginar la trayectoria del cineasta sin un primer paso así de sorprendente, desvergonzado y frenético.
'Ash vs Evil Dead'
Partiendo de la basa de que solamente por su episodio piloto, dirigido por Sam Raimi, y la energía imparable de Bruce Campbell, un gigante, ya está justificada por completo la existencia de 'Ash vs Evil Dead', lo cierto es que la pieza televisiva de 'Posesión infernal' es de lo mejor de la saga. Más divertida y espectacular que terrorífica, algo que, bueno, es marca de la casa, hablamos de una serie cuyas tres temporadas se devoran entre carcajadas, sangre y acción. Una joya de la pequeña pantalla.
'Posesión infernal 2: Terroríficamente muertos'
Superior a su ilustre predecesora, 'Posesión infernal 2: Terroríficamente muertos' hace suya la filosofía del más es más de manera irresistible. Con un nivel infinitamente mayor de autoconsciencia y absurdo, la cinta de Sam Raimi se crece desde su magnífica escena de apertura y ya no baja de ahí hasta su memorable plano final. Todo ello ayudado de manera clave por un pletórico Bruce Campbell con el modo leyenda activado. Joya.
'Posesión infernal (Evil Dead)'
Podría haber salido (muy) mal, pero el resultado de 'Posesión infernal (Evil Dead)' no solamente esquivó por completo todas las trampas posibles, que no eran pocas, sino que engrandeció el material original sin dejar de respetarlo en lo que supone uno de los remakes más ejemplares de los últimos años. Dirigida con pasión contagiosa por un inspiradísimo Fede Álvarez y con un reparto entregado a la sangrienta causa, la película es un auténtico torbellino de imágenes brutales y escenas terroríficas que desembocan en unos diez minutos finales de levantarse y aplaudir. Magnífico mal rato.
'El ejército de las tinieblas'
Una de las locuras más maravillosas de la historia del cine se llama 'El ejército de las tinieblas', la dirige un Sam Raimi absolutamente desatado, la protagonizada un impresionante Bruce Campbell y tiene tal cantidad de escenas memorables que enumerarlas se parece demasiado a una feliz misión imposible. ¿Tiene algo que ver realmente con sus dos predecesoras en la saga de 'Posesión infernal'? Lo justo. ¿Es la mejor y más divertida de la trilogía original? Necesito un sí más grande.