Oliver Stone recogió la pasada noche el Premio Donostia Especial 60 Aniversario en reconocimiento a toda su carrera. Supongo que sobre todo por su logros en los años 80 y principios de los 90 con películas emblemáticas del cine norteamericano como 'Platoon', 'Nacido el cuatro de julio' y 'JFK'. Un cine combativo que ha perdido fuerza y compromiso con el paso de los años hasta convertirse en una caricatura de sí mismo. No será 'Salvajes' precisamente la película que le saque del pozo, pero ofrece un ruidoso entretenimiento que quizá conecte con los gustos de la juventud actual.
'Salvajes' da para pasar un buen rato. El problema es que no tiene absolutamente nada. Frívola y superficial, sus impostados momentos de profundidad resultan toda una desfachatez. El argumento toca el negocio de la marihuana, los conflictos entre una pareja de jóvenes inconscientes que comparten una chica objeto y un cartel de la droga mexicana, pero no hay mensaje, y eso incluso en un Stone en baja forma, sorprende. Los personajes son planos y sin motivaciones, los actores (y seamos generosos) no se encuentran en su mejor momento -vemos al también galardonado John Travolta tan acabado que se ha dejado la peluca en casa-. Se salva Benicio del Toro, al que su talento saca chicha de un personaje también escaso de matices. La película tiene momentos de bochornosa ridiculez, provoca risas involuntarias, pero tampoco puedo ocultar la realidad: se me ha hecho amena, ha conseguido divertirme.
Joyita de animación francesa
El sorpresón del día llegó con 'Le jour des corneilles', película de animación francesa que bebe mucho del Studio Ghibli pero adquiere una arrebatadora entidad propia. Es la historia de un niño criado en el bosque que se relaciona con criaturas antropomorfas que lo conducen al contacto con la civilización. Una cinta preciosa, emotiva, empapada por un seductor realismo mágico y envuelta por una atmósfera colorista, de contrastes y que por momentos parece enmarcada en un cuadro. Una magnífica película que ojalá tenga suerte y traspase fronteras.
Sensaciones encontradas
Una de las películas que esperaba con más ganas del certamen era el falso documental 'El impostor'. Está apoyada en una premisa muy atractiva: un hombre con problemas emocionales que se hace pasar por un chaval desaparecido hace años; sus características físicas y edad son totalmente opuestas, pero la familia acepta al muchacho como suyo sin cuestionarse su falsa identidad. Sin embargo, el film se convierte en un recital de trampas, cada cual más enrevesada para enganchar a la audiencia. Los personajes se contradicen a sí mismos y el tono desconcierta tanto que por momentos da baza a creer que se trata de una comedia. Pero no parece esa su intención. La etiqueta basado en hechos reales lleva consigo lo de "la realidad supera la ficción". Y vale, sí, me puedo creer su premisa, aunque sea muy surrealista, lo irritante es que su desarrollo sea una tomadura de pelo con unas licencias de guión escandalosas. No cuela.
Para cerrar el análisis del día, 'El artista y la modelo', película de Sección Oficial a Competición dirigida por Fernando Trueba. Una propuesta muy artística que se apoya mucho en su fotografía en blanco y negro, la cual me recuerda a la Nouvelle Vague. Puede que algo falta de sustancia, pero está compensado con su belleza. Generará controversia, aunque por mi parte, me ha gustado. Y a destacar, ni siquiera me ha resultado pesada, y eso que carece de todo golpe de efecto.
Calurosa acogida a 'En la casa'
'En la casa', drama centrado en los retorcidos juegos entre un alumno y un profesor, ya ha sido proyectada con las mejores críticas para una película en competición por la Concha de Oro. Servidor la verá hoy lunes junto a 'Foxfire' de Laurent Cantent, la premiada en Sundance 'Las sesiones' y la nueva película de Penélope Cruz a las órdenes de Sergio Castellitto, 'Volver a nacer'.