Muchas veces nos quejamos de la falta de originalidad de los peces gordos de Hollywood, y con razón, pero hay algunas ocasiones en las que hay que reconocer cuándo alguien ha tenido una buena idea. Y la descripción cinematográfica de una buena idea sería una de las obras de Spike Jonze: 'Her'.
La película nos sitúa en un futuro cercano para presentarnos a Theodore: un escritor solitario con un divorcio traumático a cuestas, que adquiere un nuevo sistema operativo para su teléfono y ordenador. Su nombre es "Samantha" y está basado en un avanzado modelo de Inteligencia Artificial diseñado para satisfacer todas las necesidades del usuario. "Samantha" es sexy, divertida, compasiva, sabe escuchar, da buenos consejos y, para sorpresa de Theodore, ambos no tardan en enamorarse el uno del otro.
'Her' tenía un cóctel que señalaba a éxito seguro: un guion interesante, dos actores queridos por el público como son Joaquin Phoenix y Scarlett Johansson, y un apartado visual realmente atrayente. Desde eCartelera, homenajeamos a este film tan peculiar con sus curiosidades más divertidas.
Curiosidades de 'Her'
Sustitución de último minuto
Desgraciadamente, la industria del cine es realmente cruel y, por muy buen trabajo que hayas hecho, siempre pueden haber imprevistos. Y, si no, que se lo digan a Samantha Morton. La actriz rodó la película entera junto a Joaquin Phoenix, ya que ella era la voz de Samantha. Sin embargo, una vez terminada, Spike Jonze le pidió permiso a Morton para sustituir su voz por la de Scarlett Johansson.
Vistas chinescas
Los más perspicaces se habrán dado cuenta de que las vistas de la ciudad son bastante diferentes a las que nos tienen acostumbrados en la mayoría de películas americanas. Eso es porque, en realidad, la mayoría de vistas de la ciudad (especialmente en las que se ven rascacielos), están filmadas en Shangái. Incluso podríamos ver carteles en chino si nos fijáramos bien.
El encierro
Las tácticas de Spike Jonze como director son peculiares, pero, sin duda, efectivas. Joaquin Phoenix y Amy Adams lo saben muy bien, y es que el realizador los encerraba cada día en una habitación durante una o dos horas para que se fueran conociendo mejor. Al final, ambos intérpretes acabaron forjando una gran relación de amistad.
El corte de Soderbergh
Al terminar la cinta, Spike Jonze se juntó con un metraje total de 150 minutos; lo cual seguramente consideraba desmesurado. Por ello, no dudó en pedirle a Steven Soderbergh que le echara un cable con el montaje. Tras solo un día de trabajo, le presentó a Jonze un corte de 90 minutos. Sin embargo, el director del film acabó dejando el metraje en 126 minutos.
Pequeño alienígena
Casi todos conocemos el carácter gamberro del director de la cinta, y no quiso dejar pasar la oportunidad de hacer un cameo realmente divertido. Spike Jonze no dudó en poner la voz a uno de los personajes más extravagantes de esta cinta: el niño alienígena. De hecho, le gustó tanto su rol que, en ocasiones, le hablaba a su editor y a su productor con la misma voz que el alien.
El musical de Adams
Cuando las cosas se ponían intensas en el rodaje, Amy Adams no dudaba en comenzar a cantar canciones de musicales como 'Annie' o 'The Rocky Horror Picture Show' para animarse. Tras un tiempo, Joaquin Phoenix se acabó uniendo, y ambos cantaron. Sin embargo, los dos actores pararon al darse cuenta de que su director los estaba grabando.
El legado de Samantha
A pesar de la triste marcha de Samatha Morton, la intérprete sí que pudo dejar una pequeña huella en el film. Y es que ambos papeles protagonistas femeninos reciben el nombre de actriz que los interpreta. El personaje de Amy Adams se llama Amy, y el que más tarde acabaría ocupando Scarlett Johansson se quedó con el nombre de Samantha.
La estatua inventada
En la película, podemos ver una extraña escultura de un enorme avión boca abajo en medio de una plaza. Aunque parezca muy bien hecho, esa escultura no existe. Supuestamente, debería estar fuera del Pacific Design Center, en West Hollywood. Sin embargo, ese avión se hizo por ordenador expresamente para el film. Puro CGI.
El despertar de Jonze
A pesar de lo muchísimo que ha trabajado en la industria, estamos seguros de que Spike Jonze se sintió plenamente orgulloso de poder realizar un proyecto como éste, ya que tuvo libertad total para hacer y deshacer a su antojo. Y es que este supuso el primer film escrito y dirigido enteramente por el bueno de Spike Jonze.
Vistas y colores
Spike Jonze parecía tener bastante claro el estilo visual que quería conseguir con este film. Por ello, solía citarse con el equipo de diseño detrás del The High Line: un parque elevado en el West Side de Manhattan. Desde allí, debatían sobre el look futurístico de la película. El director también se inspiró en los vivos colores de la zumería Jamba Juice para su obra.