Con tan solo 8 episodios 'Una serie de catastróficas desdichas' se ha convertido en uno de los mayores éxitos de Netflix. Quizá por su toque de humor negro mezclado con las mil caras del conde Olaf (Neil Patrick Harris), la serie ha ganado un gran número de seguidores y esto se reafirmó cuando Netflix confirmó su segunda temporada.
Pues bien, para realizar la segunda temporada, la plataforma de streaming ha querido completar el reparto con unos fichajes bastante buenos. Nathan Fillion, Tony Hale, Sara Rue, Lucy Punch y Roger Bart, han sido los elegidos para unirse al conde Olaf y sus locuras, aunque no se ha revelado que papel interpretarán.
Nathan Fillion es bastante conocido para aquellos que tengan televisores en sus casas. Además de protagonizar la serie de culto 'Firefly', Fillion ha pasado siete años al frente de 'Castle' y ahora mismo le podemos ver en la última temporada de 'Modern Family'. Por su parte, Tony Hale conoce bastante bien las plataformas de streaming, participa en la serie 'Arrested Development', rescatada por Netflix (de la cual esperamos con ansia la quinta temporada) y aparece en 'Veep' de HBO, serie con la que ha ganado dos premios Emmy.
Se unen a un reparto liderado por Neil Patrick Harris y sus huérfanos Malina Weissman, Louis Hynes y Presley Smith, donde se encuentran también los actores Patrick Warburton, Joan Cusack, Aasif Mandvi, Catherine O'Hara, Don Johnson y Alfre Woodard.
Basada en los libros de Daniel Handler (Lemoy Snicket), 'Una serie de catastróficas desdichas' narra la trágica historia de los huérfanos Baudelaire (Violet, Klaus y Sunny), cuyo malvado tutor, el Conde Olaf, no se detendrá ante nada ni nadie para conseguir su herencia.
Tercera temporada a la vista
Apenas un mes después de que se anunciara la segunda temporada de la serie, Netflix avanzó una ampliación para una tercera temporada, que llegaría a lo largo de 2019. Esta ampliación, hace que la serie pueda llegar hasta el final de los libros de Handler.
'Una serie de catastróficas desdichas' sigue el formato de mostramos la trama de un libro cada dos episodios, eso significaría que los últimos cuatro libros corresponden a la tercera temporada. De momento, no tenemos noticias sobre si continuarán la serie cuando acaben con el material de los libros, ya veremos que ocurre con el paso del tiempo.
'Una serie de catastróficas desdichas': Película vs serie
El argumento
Para empezar, tanto la serie como la película te advierten de una sola cosa: no es una historia con un final feliz. Ambos proyectos son adaptaciones de los libros de Daniel Handler, quien tiene por seudónimo el nombre de Lemony Snicket, y por tanto siguen muy de cerca la historia de las novelas. Aunque eso sí, hay ciertas diferencias entre la película y la serie.
La nueva serie de Netflix se basa en los libros: 'Un mal principio', 'La habitación de los reptiles', 'El ventanal' y 'El aserradero lúgubre', hasta llegar a 'Una academia muy austera'. En su último capítulo, Mr. Poe (K. Todd Freeman) deja a los niños en un internado. La ficción da continuidad a la historia, mientras que en la película el Conde Olaf es obligado por las autoridades a sufrir las mismas desdichas de los huérfanos.
La película, que también se basa en los tres primeros libros, altera ligeramente el orden de los sucesos, dejando el plan maquiavélico del Conde Olaf de casarse con Violet y hacerse con la fortuna de los niños, para el final. En la serie esta trama ya se muestra en el primer episodio de las catastróficas desdichas de los huérfanos Baudelaire.
Eso sí, ambas hacen uso de los mismos protagonistas y personajes, salvo algunas incorporaciones nuevas como los "supuestos padres" de otros niños, interpretados por Cobie Smulders y Will Arnett. La serie nunca deja claro de quiénes se trata realmente.
Ambas adaptaciones siguen el género de los libros, es decir, ficción absurda que incluye a personajes excéntricos y de lo más peculiares, protagonizando historias poco creíbles. Además, tanto la película como la serie hacen uso del humor negro y macabro en una historia infantil.
El desarrollo de ambos proyectos
Inicialmente, la película 'Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snicket' iba a ser dirigida por Barry Sonnenfeld, quien siempre se ha descrito a sí mismo como fan acérrimo de las novelas. Para dicho proyecto, el cineasta contaba con la ayuda de Daniel Handler (el autor de los libros) para que escribiera el guion. No obstante, Sonnenfeld abandonó el proyecto y su reemplazado director, Brad Silberling, descartó la mayor parte de las aportaciones de Handler.
En cambio la serie trajo de vuelta a Handler y Sonnenfeld trabajando en equipo. Además, tanto el guionista como el director actúan como productores ejecutivos de la innovadora versión del relato. El director de 'Men in Black: Hombres de negro' o la más reciente 'Siete vidas: Este gato es un peligro' se caracteriza por un humor más bizarro y el uso de los efectos especiales que siempre ayudan a ambientar de mejor manera la historia.
El narrador
Tanto la película como la serie hacen uso directo de un narrador llamado Lemony Snicket (el seudónimo del autor de los libros). En la película su figura aparece ante una máquina de escribir escribiendo el desarrollo de la historia, y cuenta con la voz del actor Jude Law.
En cuanto a la serie, este personaje está interpretado por Patrick Warburton y siempre aparece al principio y al final de cada episodio. La ficción también utiliza a este "personaje" para explicar algunas definiciones lingüísticas, referencias literarias y técnicas o simplemente para algunos de sus monólogos que narran la desdichada historia de los niños.
Los personajes
En ambos proyectos aparecen los protagonistas de los libros: los huérfanos Baudelaire (Violet, Klaus y Sunny), como también el Conde Olaf, y algunos de los personajes secundarios que aportan humor y chispa a las dos producciones.
Sr. Poe
En la película su personaje está interpretado por Timothy Spall (Colagusano en 'Harry Potter'). El despistado banquero que se hace cargo de la fortuna de los niños hasta que cumplan la mayoría de edad es uno de los personajes secundarios más disparatados. Nunca hace caso a los niños y no se da cuenta de lo peligroso que es el Conde Olaf.
En la serie sí aparece su esposa, Polly, y sus dos hijos, Edgar y Albert, tal y como sucede en la primera novela de la historia. En cambio en el film desconocemos muchos detalles del personaje, y tampoco llegamos a conocer a su secretaria, presunta aliada de los niños. Ambas muestran su inutilidad a la hora de ayudar a los niños.
La jueza Strauss
En la película, la jueza Strauss apenas tiene protagonismo salvo la escena clave en la que casa a Violet con el Conde Olaf. En cambio en la serie, su personaje pasa más tiempo con los niños, prestándoles más atención que el propio Olaf, su vecino.
El tío Monty o Montgomery Montgomery
El tío Monty es el segundo tutor de los niños según cuentan ambos relatos. Por desgracia, en ambas adaptaciones el herpetólogo cae en el malvado plan de Olaf. Tanto en la película como en la serie, este personaje recibe a los niños con los brazos abiertos y está dispuesto a protegerlos de las garras de Olaf. Pero finalmente, es envenenado por el villano Conde.
La tía Josephine
Al igual que el tío Monty, Josephine, quien vive en una casa situada en un peligroso acantilado, es una de las tutoras de los niños. Obsesionada con la gramática, ésta hospeda a los niños en su hogar. Temerosa de la muerte o las sanguinarias sanguijuelas del lago Lacrimógeno, conoce a Olaf disfrazado de un marinero. Tras percibir el peligro, se esconde en una cueva que encuentran los niños. Pero el Conde Olaf también acaba con su vida lanzándola al agua. En ambas historias, los acontecimientos que atañen a la tía Josephine son similares. En la película este personaje está interpretado por la 20 veces nominada a los premios Oscar, Meryl Streep.
Cómplices del Conde Olaf
El grupo de teatro del Conde Olaf es primordial en sus malvados planes. Al igual que Olaf, se disfrazan para no desenmascarar su verdadera identidad. En la película no cobran demasiado protagonismo, mientras que en la serie participan algo más en su argumento. Aunque en los libros, cada socio de Olaf renuncia o fallece, ni en en el film ni en la serie corren la misma suerte. De hecho, siguen apareciendo hasta el final de las dos versiones de la historia.
El tiempo
La película condensa las tres primeras novelas en un bloque de 105 minutos, mientras que la serie se beneficia de su propio formato. De este modo, la historia tiene mucha más cabida en la pantalla. Es más, otra de las ventajas de la serie es que si renueva por una segunda temporada, puede desarrollar mejor cada uno de los personajes, además de descubrir los entresijos de la misteriosa organización secreta, V.F.D.
La serie podría continuar la historia y ambientar en la pequeña pantalla (por primera vez) las siguientes entregas de los libros. De hecho, la primera temporada de 'Una serie de catastróficas desdichas' deja más de una incógnita sin respuesta.
Conde Olaf
Sin duda, uno de los protagonistas más carismáticos (tanto de los libros como de ambas adaptaciones en pantalla) es el Conde Olaf. Este curioso personaje es interpretado por dos comediantes de gran talla. En la película, el conde/actor/marinero/ está encarnado por Jim Carrey, quien ha aportado a muchas comedias su propio toque, nos referimos aquí a su mímica y gesticulación.
En la serie, es Neil Patrick Harris, conocido principalmente por su papel de Barney Stinson en la serie 'Cómo conocí a vuestra madre', quien encarna esta vil versión de Olaf. En comparación con Carrey, el actor ha optado por una actuación mucho "más tímida".
En ambos proyectos, el Conde Olaf es un desesperado actor, genio de disfraces y artimañas, capaz de todo por hacerse con la gran fortuna de los niños Baudelaire, de matar, aniquilar o desaparecer sin ningún tipo de escrúpulos. El estrafalario personaje también aporta a la historia su característico humor negro. Estamos ante un personaje muy caricaturesco y disparatado.
La organización secreta
La historia de las novelas esconde un gran misterio sobre la organización secreta con las iniciales V.F.D., mencionada en ambas producciones. Según avanza la trama, los niños Baudelaire descubren a lo largo de los episodios de la serie que sus propios padres formaban parte del misterioso grupo, además del Conde Olaf y otros de sus tutores. Aunque ni la película ni la serie jamás descubren en qué consiste realmente esta asociación.
En la película, también existen referencias a la organización secreta, junto a algunos objetos que la simbolizan, como el catalejo que los padres regalan a los niños al final del film. Pero es realmente en la serie donde se profundiza más en el grupo. Mientras que en la película el tema de la organización se trata de forma más superficial, sin involucrarse demasiado en su pasado e historia. En la serie de Netflix, cada episodio contiene una pequeña pista. Los propios niños Baudelaire están dispuestos a descubrir cada uno de sus secretos. ¿Se explicará finalmente cuál es su finalidad en la siguiente temporada?
Extra: Futuros proyectos
Por ahora no se sabe si la serie será renovada por una segunda temporada. En el último episodio, se ve cómo los niños Baudelaire se quedan en una academia de lo más austera. ¿Intentará el Conde Olaf llegar hasta los niños de nuevo? ¿Cómo se disfrazaría para la ocasión? ¿Se haría pasar por un estudiante?
La ficción podría basarse en los siguientes libros de la serie literaria, 'Una academia muy austera', 'El ascensor artificioso', 'La villa vil' y 'El hospital captivo'. Además, seguimos sin saber absolutamente nada sobre la organización secreta. ¿Se revelarían en los nuevos episodios algunos entresijos del misterioso grupo? La futura segunda temporada podría responder a todas estas cuestiones.
En cuanto a una adaptación cinematográfica, tanto el equipo artístico como el propio director del film, Brad Silberling han puesto interés en hacer más entregas de la historia. De hecho, el cineasta habló sobre un posible proyecto que se basaría en las próximas novelas. Pero éste ni siquiera cuenta con un guion. Además, el mismo Silberling ha manifestado su descontento por la prolongada realización del proyecto, que probablemente nunca llegue a hacerse y menos después del éxito que ha supuesto la serie. Es más, los actores que aparecieron en la película ya han cambiado de aspecto ya que ha pasado mucho tiempo desde su estreno en 2004.
Una película de Silberling tiene muy pocas posibilidades de realizarse, mientras que la serie tiene toda la pinta de ser renovada por una segunda temporada.