Cualquier persona que todavía relacione el nombre de Jamie Bell con la imagen de un niño que sueña con convertirse en bailarín de ballet en 'Billy Elliot (Quiero bailar)', olvidará esta asociación con 'Skin', donde Bell interpreta a un neonazi estadounidense.
"Me sorprendió. Era irreconocible", ha declarado Guy Nattiv, director de 'Skin' para Variety. En la película, Bell interpreta a Bryon "Babs" Widner, un neonazi de la vida real que abandonó el movimiento de la supremacía blanca para dar la espalda al odio e intentar transformar su vida.
Pasar tres horas al día en la silla de maquillaje para aplicarse los tatuajes ha sido solo una parte del cambio de imagen que Bell ha experimentado. También se ha afeitado la cabeza y ha llevado durante todo el rodaje un conjunto de dientes falsos y lentes de contacto opacas, además de seguir una dieta estricta para adelgazar.
Pretender que el espectador reflexione
Bell espera que 'Skin' tenga un efecto de concienciación en el público: "Si hace que unas pocas personas sean menos racistas, podemos seguir adelante con unas pocas personas menos racistas en el mundo". Por otra parte, Nattiv piensa lo imprescindible que es que los cineastas traigan historias sociales y políticas al mundo: "Cuando ves que está sucediendo el ascenso del supremacismo blanco y el fascismo con el que se está lidiando en momento, te das cuenta de que es importante hablar de eso".