Hablar de terror de los ochenta sin hablar de slasher, sería algo así como hablar sobre el cine de género clásico obviando los títulos de la Universal. En unos años en los que la denominada modernidad cinematográfica había empezado a despuntar con títulos y cineastas que abanderaron una nueva forma de entender el terror, películas como 'Navidades negras' de Bob Clark, 'La matanza de Texas' de Tobe Hooper o 'La noche de Halloween' de John Carpenter sentaron las bases del cine slasher.
Con un origen que se remontaba a los sesenta, con títulos pioneros como 'Psicosis' o 'El fotógrafo del pánico', fueron los títulos citados anteriormente los que conformaron una serie de reglas no escritas sobre las cuales se fomentó el subgénero. Un año más tarde de haber conocido el primer enfrentamiento entre Jamie Lee Curtis y Michael Myers, llegaba otro de los hitos de la época, 'Viernes 13', que abría la veda a nuevas formas de presentar el terror, siempre en forma de asesino enmascarado dispuesto a acabar con la vida de todos aquellos adolescentes que se pusieran en su camino.
Explosión slasher
Sin duda, fue en 1981 cuando podríamos hablar de boom slasher, pues en ese mismo año la cantidad de títulos que llegaron dispuestos a imitar el éxito de las obras de Carpenter y Sean S. Cunningham, fue casi inabarcable.
Entre todas, y a medida que pasaron los años, destacaron por su propio espíritu de transgresión y originalidad obras de culto que todos conocen a día de hoy: desde 'Campamento sangriento' (y su valía como ejemplo de horror queer) a 'San Valentín sangriento' (como máximo representante del slasher centrado en festividades concretas). Sin embargo, son varios los slashers que no consiguieron llegar a todo el público y que acabaron siendo carne de videoclub y objeto de deseo solo apto para los más fieles al género.
A continuación, y con la intención de dar visibilidad a varios de los títulos que merecen un lugar propio dentro del universo slasher, seleccionamos diez películas que harán las delicias de todos los amantes de la sangre, la casquería y la mala baba, porque existe vida (y mucha muerte) más allá de Jason Voorhees y Freddy Krueger.
Slashers de los 80's
'La quema'
Año: 1981.
Dirección: Tony Maylam.
Sinopsis:
Siguiendo la estela de lo que nos presentó 'Viernes 13' en el Campamento Crystal Lake, 'La quema' nos lleva hasta el Camp Blackfoot, donde un grupo de niños le intenta gastar una broma al conserje, Cropsy, la cual acaba en tragedia y con él en el hospital bajo cuidados intensivos tras haberse quemado todo el cuerpo.
Años más tarde, y como no podía de ser otra forma, la venganza se hará presente en uno de los slashers cuyo gore pasó a la historia junto al hecho de que fue uno de los primeros en apostar por la figura del final boy en lugar por la de la final girl.
'El asesino de Rosemary'
Año: 1981.
Dirección: Joseph Zito.
Sinopsis:
Año 1945, Avalon Bay. Mientras los alumnos del instituto están en plena celebración del baile de graduación, deberán enfrentarse al acecho de un perturbado que, vestido de soldado, ha llegado al pueblo alentado por la carta de despedida que ha llegado a sus manos, a nombre de Rosemary y firmada con el dibujo de una rosa, adquirida por el asesino a modo de sello.
En el mismo año en el que slasher se convertía en un boom, Zito dirigía uno de los títulos de culto del subgénero, el cual mezclaba horror con thriller psicológico y que le serviría para dirigir, años más tarde, 'Viernes 14, 4ª parte: Último capítulo'.
'Pesadillas de una mente enferma'
Año: 1981.
Dirección: Romano Scavolini.
Sinopsis: Tras salir de un largo ingreso en un manicomio, y con algunos de los doctores sospechando que no está del todo curado, un hombre irá desgranando el trauma infantil que le llevó a su ingreso a medida que se deja llevar por una espiral de muerte y violencia.
Uno de los títulos más salvajes y prohibidos de la época, digno heredero del 'Maniac' de William Lustig y que, visto a día de hoy, hace honor a su título en castellano. Como no podía ser de otra forma, pasó a ser uno de los controvertidos Video Nasties que acabaron siendo procesados por obscenidad.
'The Slumber Party Massacre'
Año: 1982.
Dirección: Amy Holden Jones
Sinopsis: Un grupo de amigas se dispone a pasar una divertida noche de fiesta de pijama, hasta que un loco armado con un enorme taladro hace acto de presencia con la intención de perforarlas a todas.
Que el argumento no engañe a nadie, pues a pesar de que podríamos estar ante el enésimo ejemplo de cine misógino, el caso de 'The Slumber Party Massacre' acabó siendo uno completamente distinto y es que resultó ser una de las piezas clave del cine de terror feminista, pues en lugar de convertir a las mujeres en objeto, se reía de todos los clichés establecidos y abogaba por la liberación sexual (definitiva) de la mujer. Por si fuera poco, dirección y guion corrían a cargo de dos mujeres.
'Solos en la oscuridad'
Año: 1982.
Dirección: Jack Sholder.
Sinopsis: Varios enfermos mentales consiguen escapar del centro psiquiátrico en el que están recluidos, convirtiendo esa noche en una pesadilla para todo aquel que se cruce en su camino.
A camino entre 'La noche de Halloween' y 'Asalto a la comisaría del distrito 13', llegaba en 1982 este híbrido entre thriller y slasher (recordemos que, por aquel entonces, las normas básicas del subgénero aún no estaban del todo asentadas), en el que se dejaban ver varios rostros famosos de la talla de Donald Pleasence, Jack Palance, Martin Landau o Lin Shaye.
'Cortinas'
Año: 1983.
Dirección: Richard Ciupka.
Sinopsis: Durante el rodaje de una película de terror, los intérpretes de la misma empezarán a ser asesinados por un misterioso asesino que lleva la máscara de Audra, una mujer de mente inestable que protagoniza la película.
Alentados por el éxito de 'Prom Night', llegaba 'Cortinas' con la intención de convertirse en uno de los claros referentes del slasher canadiense, formando una triada perfecta junto a el citado título de Paul Lynch y 'El tren del terror', ambos protagonizados por Jamie Lee Curtis.
'Siete mujeres atrapadas'
Año: 1983.
Dirección: Mark Rosman.
Sinopsis: Inmersas en los preparativos de su fiesta de graduación, un grupo de chicas miembros de una hermandad universitaria deben hacer frente al despotismo de la dueña de la casa en la que viven. Con la intención de gastarle una broma pesada a la anciana, sus planes se tuercen cuando una pistola haga acto de presencia y todo acabe en tragedia. Tras lo que parece ser una muerte accidental, las chicas intentarán ocultar el cuerpo, pero la pesadilla no ha hecho más que comenzar.
Culto casi instantáneo para un título que se convertía en máximo exponente del slasher con hermandades universitarias de por medio, junto a 'Navidades negras', de cuya trama bebieron títulos de la nueva oleada del subgénero en los noventa tan dispares como 'Sé lo que hicisteis el último verano' o 'La monja'. Tuvo un más que decente remake en 2009, 'Hermandad de sangre'.
'The Mutilator'
Año: 1985.
Dirección: Buddy Cooper.
Sinopsis: Ed se dispone a pasar unas vacaciones inolvidables junto a sus amigos en su casa de la playa, después de haber recibido una invitación de su padre. Sin embargo, el progenitor vive anclado en el dolor que supuso la muerte de su esposa por culpa de Ed, quien disparó un rifle accidentalmente. A su llegada, comenzará el festín de vísceras y sangre.
En su día menospreciada, ha sido el paso de los años lo que ha convertido a 'The Mutilator' en una de las piezas de culto más divertidas y reivindicables de la década, y es que merece todo el amor posible solo por el hecho de tener un tagline como el de "By sword. By pick. By axe. Bye Bye".
'Blood Rage'
Año: 1987.
Dirección: John Grissmer.
Sinopsis: Siendo un niño, Terry asesinó a un hombre en un autocine, haciendo que su hermano gemelo, Todd, pareciese el culpable. Tras haber sido encerrado en un centro psiquiátrico, diez años después el joven Todd sale del mismo en Acción de Gracias, momento en el que una oleada de crímenes empieza a suceder y en la que tendrá que demostrar que, una vez más, es su hermano diabólico el responsable.
Seguramente este sea el título menos conocido de la presente selección, y es que 'Blood Rage', también conocida como 'Pesadilla en Sherman Woods', pasó un tanto desapercibida en su momento. Ha sido gracias a su reciente remasterización y recuperación del olvido que se ha demostrado que estamos ante uno de los slashers más sugerentes (y sangrientos) de los ochenta.
'Aquarius'
Año: 1987.
Dirección: Michele Soavi.
Sinopsis: Durante una noche de tormenta, un grupo de artistas está ultimando los ensayos de una nueva obra teatral. Tras una serie de extraños hechos, pronto descubrirán que están encerrados en el lugar y que un tipo que esconde su rostro tras una máscara de búho está acabando con ellos uno a uno.
Desde Italia llegaba a finales de la década 'Aquarius', de estética puramente pop y rara avis reconvertida en objeto de culto en la cual se fusionaban el slasher y el giallo, del mismo modo en que Mario Bava lo había hecho en 1971 con 'Bahía de sangre'.
