El género del western no ha conseguido asentarse en el cine patrio. A pesar de que en Estados Unidos es uno de los géneros más reconocidos y amados por el público, en la industria española todavía no nos hemos acostumbrado a estas películas, y nos hemos centrado más en otro tipo de cintas de reafirmado éxito entre los espectadores de nuestro país. Sin embargo, Alfonso Cortés-Cavanillas, un reparto de lujo (liderado por Asier Etxeandia) y 'Sordo' han llegado a la ciudad para reivindicar este género tan infravalorado en España.
'Sordo' nos traslada a la posguerra, a un grupo de maquis que sigue luchando contra el franquismo. En este grupo nos encontramos con Anselmo Rojas y Vicente, dos miembros de esa resistencia que, durante un ataque contra sus enemigos, terminarán en una situación extrema. En concreto, Anselmo se quedará completamente sordo, lo que le dejará indefenso en un mundo lleno de violencia y maldad, mientras es buscado por el capitán Bosch y su séquito, que no pararán hasta encontrarle, ya sea vivo o muerto. Vamos, lo que es un western en toda regla.
Vaqueros muy enérgicos
Teniendo en cuenta que este infravalorado género no ha tenido mucho recorrido en nuestro país (o, por lo menos, no en un pasado reciente), 'Sordo' es una película refrescante, que aboga por una trama y una historia muy poco habitual, original y que engancha al espectador desde su primera escena, en la que ya nos deja claro que esta película no es para cualquier espectador. La cinta logra a la perfección retratar esas características típicas del género y las traslada a un campo patrio, adaptándolas notablemente. Además, a lo largo de toda la película podemos encontrar guiños a algunos de los cineastas más queridos por Cortés-Cavanillas, como Eastwood o Leone.
Sin embargo, la magnificencia de esas determinadas características del género y su entretenimiento no son suficientes para maquillar los errores que tiene la película. Al tratarse de una adaptación de una novela gráfica, es complicado que todos los elementos del cómic queden igual de bien en la gran pantalla. Por ello, hay elementos que sí consiguen engrandecerse en esta adaptación cinematográfica (sobre todo los referidos a luchas y momentos de acción), pero la acción queda dañada por algunos momentos que entorpecen la narración y que hace que la película se comience a hacer larga durante todo el tercer acto.
Una película grandiosa con carencias
Junto a eso, 'Sordo' tiene otro problema aún más grave que el anterior, y es que no termina de conmover al espectador con su espectacular historia. Sí, es muy efectiva y consigue meterte de lleno en su violencia y su entretenida acción, pero en pocos momentos consigues empatizar del todo con los personajes, unos personajes que pasan sin pena ni gloria (exceptuando a los de Olimpia Melinte y Asier Etxeandia, que dejan huella). Si a eso le sumamos una trama desestructurada, con una magnífica primera parte y una regulera segunda, 'Sordo' se convierte en un entretenimiento cuyas carencias no dejan disfrutar por completo al espectador.
Sin embargo, estas notables carencias consigue maquillarlas gracias a una trama entretenida y, sobre todo, al factor técnico. Porque sí, 'Sordo' es una película de las grandes, muy épica, de esas que ya pocas veces vemos en el cine (y, mucho menos, en el cine español). La fotografía, que recuerda a las mejores películas western de los años 60/70 y que cuenta con varios de los planos más bellos que veremos en nuestro cine durante este 2019, es el elemento técnico más destacado de la película. Junto a ella, la banda sonora nos recuerda a esas épicas historias de vaqueros y damas en apuros (a pesar de que en varios momentos no parece que esté puesta en el momento adecuado). La acción y la energía aumentan gracias a unos efectos visuales que, sin llegar a ser perfectos, resultan efectivos para el público.
Un Etxeandia tremendo
Pero el verdadero punto fuerte de 'Sordo' es su protagonista. Asier Etxeandia, un actor que ya ha probado en repetidas ocasiones su talento (por ejemplo, en películas como 'La novia' o la alabada 'Dolor y gloria'), llega a otro nivel interpretativo con su papel de Anselmo Rojas en esta película. El intérprete lo da todo en uno de sus personajes (por no decir, el que más) más complicados de toda su carrera. Anselmo Rojas es el alma de la película, y Etxeandia es el perfecto actor para representarlo, con una actuación que sí logra emocionar y que logra su objetivo de que el espectador se ponga en su piel. El actor se come la película con patatas
Las interpretaciones secundarias también son muy destacables, aunque algunos consiguen llegar más al público que otras. De entre todos estos personajes, hay que destacar el interpretado por Olimpia Melinte, que tiene, indudablemente, el papel más complicado, interesante y tarantinesco de 'Sordo'. Y aún con esas, sigue siendo el mejor personaje secundario de la película. A partir de su primera aparición en la película, todo pega un vuelco (para bien, o para mal), y eso es algo digno de señalar. El resto de reparto consiguen interpretaciones aceptables y solventes, con especial mención a Marian Álvarez, que se presenta casi como un ángel en mitad de la destrucción y el infierno.
En conclusión, 'Sordo' es una obra a destacar dentro de nuestro cine del 2019. A pesar de que no consiga ser la adaptación perfecta, de tener unos personajes algo recurrentes, y una estructura que flojea con el paso de los minutos. La cinta de Alfonso Cortés-Cavanillas está dirigida de manera ejemplar, con unas interpretaciones mayormente notables y una factura técnica muy digna. Todos estos ingredientes hacen de 'Sordo' un entretenimiento para casi todos los públicos, con una pizca de nostalgia de aquellas grandes películas de indios y vaqueros que todos, en algún momento, hemos visto.
Nota: 6
Lo mejor: Su energía y su capacidad para entretener al espectador a pesar de sus carencias.
Lo peor: Su, por momentos, mala adaptación y una segunda parte que cae en picado.
