Dirigida por Sam Raimi, 'Spider-Man' renovó el género de superhéroes a principios del siglo XXI. Su paso por los cines en 2002 la llevó a recaudar 825 millones de dólares en la taquilla internacional, cifras impensables para una película de superhéroes. Con dos secuelas, 'Spider-Man' es considerada por muchos una de las mejores películas superheroicas de todos los tiempos, así como la más influyente de la era moderna junto a 'El Caballero Oscuro'. Para conmemorar el 20 aniversario, los responsables de que la adaptación del arácnido triunfase de esa manera han hablado con Variety para desgranar por qué la película fue un éxito rotundo.
A finales de los 90, con las películas de Superman muy lejanas y las de Batman de Tim Burton consagrándose como un fracaso en taquilla, la posibilidad de encontrar un estudio que sacase adelante una película de superhéroes era muy pequeña. Pero incluso con una batalla por los derechos cinematográficos de por medio, el arácnido seguía siendo la joya de la corona de los personajes de Marvel. "Ningún estudio tenía interés en Spider-Man", contaba Avi Arad, productor de Marvel.
Después de encontrar en Sony una productora fiable, lo siguiente era hacerse con un director. Los rumores apuntaban a nombres como James Cameron, David Fincher o Chris Columbus. Sin embargo, en 1999, Sam Raimi se personó en las oficinas de Sony Pictures para proponerse así mismo como director de la nueva película de Spider-Man.
"Mi agente me decía 'Voy a ser sincero contigo: hay como 18 directores por delante de ti', a lo que yo respondía 'Bien, vale, diles que yo soy el número 19", contaba Raimi. Cuando al fin consiguió una reunión, se encontró con que allí estaban John Calley, el CEO de Sony Pictures, Amy Pascal, la presidenta de Columbia Pictures, Avi Arad, productor de Marvel Studios, Matt Tolmach, ejecutivo de Sony y Laura Ziskin, productora de la película.
Para romper el hielo, Raimi comenzó explicando porqué amaba tanto al personaje. Contó que tenía dibujos de los lanzaredes en la pared de su habitación, cómo Peter Parker le hizo verse a sí mismo como un superhéroe y no como un niño nerd y tonto, y cómo Stan Lee le dio vida a un personaje cuyos fracasos y fobias eran igual de importantes (o más) que sus increíbles poderes. "Quería asegurarme de que la audiencia no se tomaba a broma 'Spider-Man'. Para mí no era una broma. Simplemente había que creer que Spider-Man existía y apostar por su corazón y su alma".
¿Quién será Peter Parker?
La cantidad de nombres grandes que se rumoreaban para el papel fue enorme. Leonardo DiCaprio, Wes Bentley, Ewan McGregor o Jude Law eran solo algunos de los muchos candidatos. "Heath Ledger era alguien de quien se hablaba mucho porque yo había hecho dos películas con él", comentaba Pascal. "Me reuní con un gran número de actores pero muchos de ellos rechazaban el papel. No necesitábamos un Christopher Reeve, sino alguien con corazón y alma con el que el público se sintiese identificado", explicaba Raimi.
Entonces, Raimi vio 'Las normas de la casa de la sidra' y todo cambió. Un Tobey Maguire de 24 años aparecía en la película y convencía al director. "Ahí estaba Peter Parker, la misma falta de confianza". Aunque no era una de las primeras opciones de Pascal, la presidenta de Columbia comentó que "era una magnífico actor que tenía las cualidades adecuadas para ser Peter Parker".
El reparto se completaría con nombres de la talla de James Franco, Kirsten Dunst, J.K. Simmons o, por supuesto, Willem Dafoe. "Lo que me atrajo fue Sam Raimi", comentó el actor que se llevaría el papel del Duende Verde. "Probablemente fue la última vez que hice una audición para un papel, estaba reñido".
La polémica estaba servida
Una vez el elenco estaba seguro, Raimi y compañía trabajaron en cómo adaptarían el cómic a la pantalla, y cómo llevarían a cabo ciertas elecciones creativas, como el traje del Duende Verde (y, en concreto, su casco). Sin embargo, si algo levantó la polémica hasta niveles insospechados, eso fue el tema del lanzatelarañas.
Mientras que en las viñetas el personaje se fabrica sus propios lanzarredes, un guion previo que escribió James Cameron presentaba la telaraña como una parte orgánica, que salía de la piel de Parker. "Era consciente de ello y no fue una experiencia agradable", explicaba Raimi en referencia a lo que se consideró como una de las primeras oleadas de odio por parte de los fans hacia decisiones creativas a la hora de hacer una adaptación.
El guionista de la película, David Koepp, corroboró la mala experiencia de Raimi. "Había una fea cultura de Internet que apenas comenzaba a mostrar su potencial. Esa fue probablemente mi primera experiencia con lo que tenemos que lidiar todo el rato ahora, que es la distracción que provocan las personas que te dicen cómo creen que debería ser tu película". Aunque supuso una controversia sonada, Pascal afirmaba que "no fue nada comparado con lo que se vive ahora".
A pesar de los problemas para encontrar financiación y las críticas de los fans respecto a ciertas decisiones, 'Spider-Man' logró cosechar 114 millones en la taquilla doméstica en su estreno, convirtiéndose en la primera película en superar la barrera de los 100 millones en su primer fin de semana. Este solo fue el primer paso en el cine de un personaje legendario, al que le siguieron dos encarnaciones más por parte de Andrew Garfield y Tom Holland. La aparición de Maguire en 'Spider-Man: No Way Home' ha ilusionado a los fans hasta el punto de que Raimi se plantea una posible 'Spider-Man 4'. Con todo, podemos agradecer al equipo de 'Spider-Man' la película que salió y que allanó el camino de manera determinante para todo lo que vendría después.