El spin-off de 'Spawn' quiere a Leonardo DiCaprio de protagonista

Aquí tenemos uno de esos momentos en la carrera de DiCaprio que demuestran claramente que estamos ante un intérprete que se atreve con todo. En un momento clave de su carrera, en la que no es nada complicado imaginar el despacho de su representante inundado por guiones, el actor decidió escuchar la oferta que el estudio Lionsgate le realizó, con la promesa de pagarle 20 millones de dólares, para que protagonizara la adaptación cinematográfica de la polémica novela 'American Psycho', que llevaría a la gran pantalla la guionista y directora Mary Harron.

Y fue ella quien se opuso a Leo, argumentando una serie de prejuicios que, visto lo visto, no terminan de dejarla en muy buen lugar como visionaria. La cuestión es que Harron ganó, DiCaprio se cansó, Christian Bale le sustituyó y la película funcionó a medias.

Pese a que, en algunos momentos de nuestra vida como fans de la saga 'Star Wars' nos hayamos intentado convencer a nosotros mismos de la valía artística de las precuelas dirigidas por George Lucas, lo cierto es que cada vez son menos las tablas a las que nos podemos sujetar. Visualmente han envejecido entre mal y muy mal, y tan solo 'La venganza de los Sith' mantiene algo de poder dramático, pero, sin duda, todo habría mejorado un poco si DiCaprio hubiera conseguido el papel de Anakin Skywalker al que optó.

Y es que el actor realizó distintas pruebas de cámara, se reunió con el equipo creativo, mantuvo negociaciones con el estudio... Y decidió que no era lo que estaba buscando. Lucas intentó convencerle en vano y tuvo que buscar una alternativa. Hayden Christensen fue lo mejor que encontró. Quizás debería haber investigado un poco más.

A Leo le quedan pocos directores esenciales que tachar en su lista, pero sin duda, Paul Thomas Anderson es uno de ellos. Y eso que los caminos del responsable de obras maestras de las dimensiones de 'Magnolia', 'Pozos de ambición' o 'The Master', y el actor estuvieron a punto de unirse a las primeras de cambio. 'Boogie Nights', la película que situó en el mapa al cineasta a través de una demostración de talento que sigue impresionando en la actualidad, nació con la intención de estar protagonizada por DiCaprio, convertido en la primera opción para interpretar a Dirk Diggler.

Lástima que el intérprete tuviera que decir que no, recomendando a Mark Wahlberg para el papel. ¿Las razones de la negativa? Que acaba de firmar por otro proyecto. Un proyecto dirigido por James Cameron sobre la tragedia del Titanic. Y así es como la vida y la carrera de DiCaprio cambiaron para siempre.

Cuando, en 2012, se anunció que Leonardo DiCaprio protagonizaría 'The Imitation Game', el proyecto cinematográfico que llevaría a la gran pantalla la vida de Alan Turing, criptógrafo y matemático que colaboró para acabar con la Segunda Guerra Mundial tras facilitar que se descifraran los códigos secretos nazis, aportando también el primer precedente de una computadora, aparecieron las expectativas y la impaciencia. También el manido discurso de que el actor estaba intentando, otra vez, conseguir la estatuilla dorada. Pero la ilusión duró poco.

Meses más tarde después de que saliera publicada esa noticia, se confirmó que los responsables de Warner Bros. no habían conseguido llegar a un acuerdo con DiCaprio, lo que paralizó la película hasta que, dos años después, los hermanos Weinstein tomaron las riendas. El resultado fue una de las mejores interpretaciones de Benedict Cumberbatch mimetizándose con el personaje de Turing y ocho nominaciones a los Oscar incluyendo Mejor Película, y sí, Mejor Actor. Solamente ganó el de Mejor Guión Adaptado. Leo respiró tranquilo.

Imaginad que, en el momento en el que se anunció que Tobey Maguire iba a ser el nuevo hombre araña en el cine, se hubiera descubierto que DiCaprio acababa de decir NO al papel. Aquel aluvión de protestas habría quedado en nada en comparación con el terremoto de fans que habrían rogado de rodillas al pobre Leo para que se replanteara convertirse en el trepamuros más famoso de la historia. Pero no, el actor lo tenía muy claro y ni el mismísimo Sam Raimi pudo hacerle cambiar de opinión para que fuera su Spider-Man.

Y es que, en esos momentos, DiCaprio estaba ultimando su participación en esas dos joyas llamadas 'Atrápame si puedes' y 'Gangs of New York'. O lo que es lo mismo, prefirió trabajar con Spielberg y Scorsese antes que lanzar telarañas. Parece comprensible.

Tras aprobar con altísima nota en su primera unión artística con el director Baz Luhrmann en esa joya llamada 'Romeo y Julieta de William Shakespeare', el actor estuvo apunto de redondear la jugada participando en el siguiente proyecto del cineasta australiano: 'Moulin Rouge'. Todo estaba listo para que Leo liderara junto a Nicole Kidman aquel musical que resucitó el género por completo y se mantiene a día de hoy como una de las películas más arriesgadas y fascinantes de la pasada década. Pero apareció un 'pero' definitivo: Cantar.

DiCaprio tuvo que aceptar y admitir que las cuerdas vocales no eran uno de sus recursos interpretativos más valiosos y, finalmente, decidió abandonar la película. Afortunadamente, su sustituto, Ewan McGregor estuvo a la altura de la propuesta y consiguió que nadie pensara en la oportunidad perdida.

De todas las decisiones que han movido a DiCaprio a decir que no a un papel, aquí tenemos la mejor de todas. Spoiler: Terminó en Oscar. Y es que, en la primera etapa del proyecto el actor era el elegido para protagonizar este biopic sobre el fundador de Apple, algo que terminó yéndose al traste cuando entró en escena Alejandro González Iñárritu y le propuso liderar 'El renacido', su nuevo trabajo después de triunfar en los premios de la Academia con la sobresaliente 'Birdman'. El resto es historia (reciente).

Michael Fassbender realizó una interpretación maravillosa como Jobs y DiCaprio ofreció un recital que terminó con celebración mundial tras conseguir su ansiado Oscar en una noche en la que los dos actores se enfrentaban como alternativa y favorito, respectivamente. Ganó la intuición.