Antes de dedicarse enteramente a una galaxia muy muy lejana, J.J. Abrams se concentró en otra aventura espacial, la de la serie de televisión 'Star Trek' que adaptó al cine junto a Roberto Orci y Alex Kurtzman.
'Star Trek' estuvo bien, pero fue con 'Star Trek: En la oscuridad' cuando el trío consiguió ganarse a los fans de la mítica serie que esperaban que llegase a su punto más alto con la tercera. Sin embargo, esta última entrega no consigue arrancar. Primero se marchó J.J. Abrams, y después, Orci, dejando al proyecto sin director y sin guionista. En cuestión de días Universal encontró a sus sustitutos, Justin Lin como director y Simon Pegg y Doug Joun como guionistas, pero no se ha vuelto a saber nada de ella hasta ahora.
Durante la promoción de su última película, 'Kill Me Three Times', el actor y guionista ha dado las primeras pistas de los caminos que va a tomar 'Star Trek 3' y por qué se unió al proceso de escritura del guión. "Simplemente surgió durante las conversaciones que mantenía con J.J. (Abrams) y Bryan Burke, decidieron como empezar de nuevo el proceso", confesaba Pegg a Comic Book, "yo estaba en el set de 'Misión Imposible: Nación secreta' y me dijo, "quizá debería escribir el guión junto con Doug, Justin, Lindsey Webbery conmigo', y yo estaba como 'No. No quiero, ¡es demasiada presión!". Queremos traer de vuelta el espíritu de la serie de televisión. Es una historia sobre las fronteras, llena de aventuras, optimismo y diversión, ahí es a donde queremos llegar. ¿Dónde ningún hombre ha llegado jamás? Donde ningún hombre ha llegado jamás ligeramente corregida para una generación algo más ilustrada. Pero sí, este es el estado de ánimo por el momento".
Fue divertidísimo
Pegg también es uno de los protagonistas de la última 'Misión Imposible' y no pudieron evitar preguntarle por la espectacular escena del avión que Tom Cruise rodó sin dobles. "Yo estaba en el avión, de hecho", decía Pegg, "tenían que dar varias vueltas, porque tenía que aterrizar y despegar varias veces, así que yo tenía que grabar mi escena en otro momento y me preguntaron que si quería subir y dije, '¡por supuesto!'. Veía a Tom a través del monitor desde la cabina y vi como se abrió la puerta de atrás, fue divertidísimo. La única forma que tenía de superar lo de haber escalado el edificio más alto del mundo era subiéndose a algo que le llevase aún más alto, y la única manera de hacerlo era con un avión, así que lo hizo".