Como fans de 'Star Wars' no podemos contener la emoción porque hemos encontrado en España el equivalente a hacer un viaje a Lucasfilm, por lo menos. Y es que el emplazamiento definitivo en el que demostrar que tu pasión por la saga no tiene límites está en Barcelona, concretamente en su Museo de Cera, y más concretamente en una sala mágica que se asegurará de que viajes a aquella galaxia muy, muy lejana. El grado de imaginación y tolerancia a la libertad creativa ajena tiene que ser más que absoluto, pero viajar, puedes viajar. Es cierto que quizá el viaje pasa por ignorar que el parecido entre las figuras de este rincón y los personajes que tanto amas es absolutamente accidental (si es que existe alguno), pero viajar puedes viajar, ¿por qué no?
Que el hecho de ver a Chewbacca y pensar en 'El planeta de los simios' no te frene, eso no quiere decir que seas menos fan del universo creado por George Lucas, simplemente es un síntoma del gran cinéfilo que llevas dentro. Tampoco debería desalentarte el aspecto destartalado del escenario, que en realidad pretende hacer un guiño a la roña entrañable que cubre cada rincón del Halcón Milenario (todo depende de como se miren las cosas)... Eso sí, si al posar los ojos en tus héroes favoritos no se te cae la ilusión a los pies, asume que tu amor es ciego, pero de verdad.
Porque mirar a Luke (Mark Hamill) y no pensar que parece un cruce entre una Raffaella Carrà venida a menos y ese primo hortera que decide de repente que el rubio es su color, es prácticamente imposible, sobre todo teniendo en cuenta que probablemente la espada láser que tengas en tu casa de más el pego. Incluso le podemos sacar un parecido con Esperanza Aguirre, dispuesta a conquistar todo el universo. Su hermana Leia (Carrie Fisher) tampoco se queda atrás la pobre, con ese aspecto de estar sobreviviendo a su peor día, ya sin ensaimadas ni nada, con la mano en el pecho y cara de "¡ay señor llévame pronto!". La representación es libre, pero de verdad, porque el tercero en discordia ya es para plantearse que en realidad en esta sala nada es accidental.
¿Sabía el artista en cuestión que Han Solo seguiría dando guerra en el ocaso de su vida? ¿Buscaba hacer un guiño a las aventuras que estaban por venir? ¿Tenía información confidencial acerca de la aparición de un Harrison Ford algo achacoso en 'El despertar de la fuerza'? Más que tú y yo sí sabían los responsables de este peculiar homenaje si han decidido que en este viaje galáctico no podía faltar... E.T.
Ahora todo tiene sentido
Para los espectadores que van un poco más allá, y además de disfrutar de sus películas favoritas se sumergen en el pozo infinito de datos más o menos fiables que es internet, 'E.T., el extraterrestre' no sólo protagoniza una de las películas más adorables de Steven Spielberg sino que comparte universo con esta saga que no deja de ganar adeptos. Y es que cuando este alien decía aquello de "mi caaaaasaaaa" señalando al cielo, apuntaba exactamente a un apartamentito en Coruscant, cerca del Senado galáctico, que es donde los fans de 'Star Wars' pueden verle en 'La amenaza fantasma'. Hasta el momento, a pesar de que E.T. reconoce a un niño disfrazo de Yoda en el film protagonizado por Henry Thomas y Drew Barrymore, estos universos sólo parecían tocarse en la intuición de los cinéfilos, pero la confirmación definitiva podría esconderse en esta sala del Museo de Cera barcelonés en la que E.T posa tranquilamente con su maceta al lado de R2-D2. Lo que decíamos, nada es accidental en esta ambientación... Única, dejémoslo ahí.