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WON'T LET YOU FLY SOLO

'Star Wars': ¿Es este el título oficial del spin-off de Han Solo? Lo más seguro es que no

Unas camisetas de los empleados del rodaje hacen saltar las alarmas de los fans, ¿se llamará realmente así?

Por Enrique Torquemada García 17 de Junio 2017 | 12:47

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Las noticias que van saliendo a lo largo del año del spin-off de Han Solo de 'Star Wars' tienen que ser un quebradero de cabeza para los fans. Desde la imagen del rodaje en Fuerteventura hasta cualquier declaración mínima de alguien que tenga que ver en la película. Lucasfilm trata de proteger al máximo su producto estrella intentando que ninguna información salga de los sets de rodaje, incluso su título. Queda menos de un año para el estreno y ni siquiera se sabe, pero cualquier pequeño detalle es suficiente para que los rumores se desencadenen.

Después de conocer el casting y algunos pequeños detalles más, es el turno (bueno, lleva siéndolo desde que se anunció) del título. Como en cualquier otro trabajo, la plantilla tiene que ir vestida con su "uniforme" al trabajo, y uno de estos trabajadores ha publicado en redes sociales la camiseta que cita en la parte trasera "we shot first" (nosotros disparamos primero) y por delante un logo a la altura del pecho en el que pone SOLO donde la L es una pistola. Una usuaria de Twitter también ha colgado una foto de otra camiseta con el mismo texto pero con la tipografía normal de la saga. Normalmente estas camisetas sirven para que los empleados se reconozcan entre ellos, pero estas imágenes son suficientes como para empezar a especular con el hipotético título definitivo: ¿será finalmente 'Star Wars: Solo'? ¿O será 'Star Wars: We Shot First'?

 las camisetas del rodaje

Lo más seguro es que ninguno de los dos. Como ejemplo, cuando J.J. Abrams se encontraba rodando 'Star Wars: El despertar de la fuerza', el título sobre el que trabajaban era simplemente "Episodio VII". Los "working title" llamados en inglés son utilizados en absolutamente todas las empresas para poder trabajar de forma secreta hasta que revelan el producto final, en este caso un nombre. ¿Alguien se imagina que, por poner un símil, Apple trabajara sobre un proyecto llamado "proyecto iPhone" cuando estaban a punto de revolucionar el mercado de los móviles? Lo mismo ocurre con las películas. Lucasfilm y Disney no pueden permitir que un título se descubra por unas simples camisetas de sus empleados, si no el factor sorpresa se queda en nada.

Esperemos que pronto se revele al fin el título definitivo, mientras tanto, ponemos la mirada en diciembre con el estreno del octavo episodio 'Star Wars: Los últimos Jedi'. Llegará a los cines de prácticamente todo el mundo el 15 de diciembre y con muchísima seguridad batirá récords de recaudación como ya hizo su antecesora.

Otros títulos secretos de películas

El secretismo, como comentábamos antes, es crucial para ciertos productos. Algunas de las películas más exitosas han trabajado sobre títulos secretos, como por ejemplo 'Regreso al futuro II'. Después del éxito de la primera, no podían anunciar sin más los planes de la segunda, así que la llamaron "Paradox". 'Harry Potter y la cámara secreta' se llamó "Incident on 57th street" como la canción de Bruce Springsteen, 'Iron Man 2' se conocía como "Rasputin", y el más básico de todos el de 'Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal". Lucasfilm no se comió la cabeza y decidió llamarlo "Genre", más críptico imposible.

8 sucedáneos barateros de 'Star Wars'

'Buck Rogers en el siglo XXV'

'Buck Rogers en el siglo XXV'

1978: Universal contraataca el pelotazo de 'La guerra de las galaxias' (de Twentieth Century Fox) con dos lanzamientos espaciales consecutivos. Por un lado, estrena en la pequeña pantalla 'Galáctica', que en su momento fue el show televisivo más caro de la historia (y que Fox llevó a los tribunales por supuesto plagio) y que fue todo un éxito; un año después, apuesta por 'Buck Rogers', adaptación de las aventuras del personaje creado por Philip Francis Nowlan en 1928 y cuyo episodio piloto fue estrenado en salas comerciales. No le fue demasiado mal en taquilla, pero sus resultados artísticos fueron un auténtico desastre, y su héroe acartonado, sus FX de saldo, sus androides de juguete y su aire naïf desconcertaron a quienes esperaban algo más currado, habida cuenta de los logros de 'Galáctica'. El aplastante estreno de 'El Imperio contraataca' en 1980 propició la cancelación de la serie y que el Rogers cinematográfico fuese olvidado, con razón.

'Starcrash: Choque de galaxias'

'Starcrash: Choque de galaxias'

Nos encontramos ante una de esas joyas de la caspa-ficción que todo adicto al cine fantástico cutre busca como un Santo Grial. Con una ínfima parte del tiempo, recursos y presupuesto de 'Star Wars', el transalpino Luigi Cozzi (firmando con el seudónimo de Lewis Coates, que mola más) dirigió este pastiche italoamericano repleto de (malos) trucajes de cámara, heroínas en biquini, señores disfrazados de robots y una impostada trascendencia en los diálogos, copia barata de la filosofía jedi. ¿Por qué nos produce tanta risa? No me digáis que ver a una exchica Bond metida en este berenjenal (Caroline Munro, 'La espía que me amó'), a un bisoño David Hasselhoff de émulo de Han Solo o al mismísimo Christopher Plummer (¡el coronel Von Trapp de 'Sonrisas y lágrimas'!) imitando a Obi-Wan Kenobi no tiene su morbo. Y, atentos, que esa música que tan inconfundiblemente imita al score original de John Williams, está orquestada nada menos que por el cinco veces ganador del Oscar John Barry. Descacharrante, sí, pero viendo que en países como España casi llegó al millón de espectadores, normal que hasta se sacaran de la manga una secuela. ¿Quién es el que se ríe ahora?

'Flash Gordon'

'Flash Gordon'

Vale, hoy la recordamos con cierto cariño porque tenía una envidiable pléyade de secundarios (Topol, Max Von Sydow, Ornella Muti, Timothy Dalton, Brian Blessed), alguna secuencia inspirada (el borrado de memoria de Zarkov, esa ruleta rusa en torno al árbol de iniciación) y no nos olvidaremos nunca de la BSO compuesta e interpretada por el grupo Queen, con ese machacón tema principal que seguro que ya está resonando en nuestras cabezas. Objetivamente, esta producción de Dino de Laurentiis, con escenarios fotocopiados directamente de 'Star Wars' (los pasillos del palacio de Ming parecen más bien de la Estrella de la Muerte) y personajes prácticamente idénticos (que alguien me diga que ese Klytus no es un sosías de Darth Vader), es, sin embargo, una entrañable horterada de cartón piedra con un guion más preocupado en intentar superar a la saga de Lucas que en ser fiel al cómic original de Alex Raymond y al que no le ayudan para nada el pétreo carisma de su pareja protagonista, los olvidados Melody Anderson y Sam J. Jones. Él, por cierto, reapareció en un impagable cameo en 'Ted', film que nos regalaba la definición definitiva de 'Flash Gordon' en nueve palabras: "Es tan mala... ¡y a la vez tan buena!"

Flash Gordon en eCartelera

'Los siete magníficos del espacio'

'Los siete magníficos del espacio'

Otro que bailaba en aguas parecidas a De Laurentiis era Roger Corman: ¿que allá hay un éxito? ¡A ametrallarlo! Nos encontramos sin duda ante un caso paradigmático, digno de estudio: de entrada, el título en castellano es casi más acertado que el original ('Battle Beyond the Stars'), habida cuenta que la peliculita de marras mezcla descaradamente situaciones, personajes y tramas tanto de 'Star Wars' como de 'Los siete samuráis' (¿o quizá de su remake americano, 'Los siete magníficos'?); y, lo más gracioso, debe ser la única película del mundo en la que el director artístico, el guionista y el compositor tienen más importancia que el propio director en el póster promocional. Todo tiene una explicación: cuando llegó a la mayoría de videoclubs, el primero ya estaba dando la campanada con 'Terminator' (era James Cameron), el segundo ya era conocido por haber escrito y protagonizado 'Piraña' (John Sayles) y el tercero era un joven talentoso músico de nombre James Horner. ¿Y quién era el realizador? Pues un tal Jimmy T. Murakami, que debutaba oficialmente con este largo y del que prácticamente nunca más se supo. Decorados cutres, diseños de chiste (¿me lo parece a mí o el héroe pilota una nave con tetas?), un mix imposible de mercenarios (un vaquero, una valkiria, un lagarto humanoide, un lancero, un telépata albino...), villanos de pacotilla, efectos especiales de saldo y un gran misterio: ¿cómo es posible que gente como George Peppard o Robert Vaughn se prestaran a tamaña tontería?

'Space Riders'

'Space Riders'

A George Lucas le debió salir una úlcera, como poco, cuando el título de otro de sus grandes éxitos, 'Raiders of the Lost Ark' ('En busca del arca perdida'), servía de base para otro sucedáneo de 'Star Wars': 'Space Riders'. A saber: un niño de diez años es secuestrado accidentalmente por una nave en la que viaja un variopinto grupo de piratas espaciales, y vive con ellos un sinfín de aventuras. ¡Anda! ¿Se adelantó al Anakin del 'Episodio I'? Bueno, en realidad casi recuerda más al punto de partida del sesentero cómic 'Guardianes de la galaxia'... Roger Corman no tuvo reparos en reciclar naves, explosiones y el score de James Horner de 'Los siete magníficos del espacio' para rellenar esta olvidada y olvidable peliculilla, sólo vista (y sufrida) por espectadores estadounidenses y de la Alemania occidental.

'Turkish Star Wars'

'Turkish Star Wars'

Bueno, bueno, bueno... sí, hay que descubrirse ante el descaro sin complejos de Cüneyt Arkin, una estrella del cine turco de los años ochenta (en Occidente no le conocía ni Dios) que junto con el realizador Çetin Inanç perpetró este 'Dünyayi Kurtaran Adam', más conocido internacionalmente, gracias a los hados de internet, por el genérico título de 'Turkish Star Wars'. La película abre con una farragosa introducción sobre el destino de la humanidad en un futuro lejano, y para ilustrarlo no tiene ningún reparo en coger las escenas originales de 'Star Wars' y plantarlas en su película, tomándose la molestia, si acaso, de ponerle un filtro de color o reproducirlas marcha atrás, por ver si la cosa disimula... ¡ole, ole y ole, Arkin! ¡Que la saga galáctica eran creative commons, y nosotros sin enterarnos! La cosa no acaba ahí, claro. 'Turkish Star Wars' tiene secuencias propias, sí (aunque en algunas se usen como fondos, otra vez, material fílmico original de Lucas; atentos a esa batalla espacial), tales como esos combates en un planeta desértico (mira tú qué ingenioso) ambientadas con la banda sonora original de... ¡¡¡Indiana Jones!!! Huelga decir que la cinta es completamente insufrible, pero si queréis echaros unas pocas risas, no dejéis de buscarla en YouTube. Lo que digamos aquí, es poco.

'Starfighter: La aventura comienza'

'Starfighter: La aventura comienza'

El ecuador de la década de los ochenta comenzaba a ser terreno abonado para que space operas y videojuegos se cruzaran de manera inevitable. Quizá alguno recuerde el VHS de esta aventurilla juvenil con imberbe protagonista que logra vencer a la máquina recreativa 'Starfighter' y es por ello reclutado por un hombre del espacio para liderar una batalla en una galaxia muy, muy lejana... un punto de partida mitad 'Tron', mitad 'Juegos de guerra', que termina poniendo el punto de mira sí o sí en 'Star Wars', convirtiéndose en un pequeño batiburrillo de naves espaciales, aliens de látex y cierto look futurista a lo 'THX 1138', pero con ciertos hallazgos a descubrir, como ese vehículo espacial con volante de coche fantástico que se adelantó al DeLorean de 'Regreso al futuro'. Típica, sí, pero algo curiosa si creciste con este tipo de producciones a lo Amblin.

'Masters del Universo'

'Masters del Universo'

Durante buena parte de la década prodigiosa, Kenner ('Star Wars') y Mattel ('Masters del Universo') se disputaron los favores de los críos con sus figuras de acción y sus innumerables complementos. Hasta que a los inefables Menahem Golam y Yoram Globus (The Cannon Group) dijeron eureka: ¿cómo nadie había hecho antes una película con He-Man, Skeletor y toda esa amalgama de personajes fantásticos? Ok, pero una cosa es tener claro al bueno y al malo y otra muy distinta es tener un guion, y ahí es donde pincha 'Masters del Universo', la película: no tuvieron pudor en inspirarse (y algo más) en los mundos y personajes de Lucas, y aunque gran parte de la acción transcurre en La Tierra (planeta que, es verdad, no pertenece al universo lucasiano), eso no fue suficiente para levantar un film demasiado soso protagonizado por el inexpresivo cachas Dolph Lundgren, sin sable láser pero blandiendo espada de Grayskull al grito de: "¡Yo tengo el poder!". Dicen que cuando Stallone se enteró de este fichaje, no dudó en exclamar: "¿Pero le habéis dado diálogos?", refiriéndose a su rival en 'Rocky IV'. Pero eran otros tiempos, ahora comparten buen rollito y aventuras mercenarias. Por cierto, ¿os acordabais de que Frank Langella (bajo un horrendo maquillaje) y una adolescente Courteney Cox estaban también en el cast? Pues anotad también el nombre de Bill Conti (compositor de la mítica BSO de 'Rocky') como autor de una partitura que remezcla en una misma coctelera las fanfarrias de 'Star Wars' y 'Superman'. Se dice, se habla, se cuenta... que por los mentideros de Hollywood ya suena con cierta insistencia un posible (y temible) remake.