'Vengadores: Infinity War' sigue arrasando varias semanas después de su estreno con más de 1.800 millones de dólares recaudados en todo el mundo, unas críticas muy positivas y una conversación inagotable que muchos seguidores y medios especializados han relacionado con el éxito y debate que acompañasen a 'Star Wars: Los últimos Jedi'. ¿Es natural o lo único que tienen en común estas dos producciones es que tienen a Disney detrás?
En este nuevo Tatooine Directo hablamos de lo que es hoy en día una "película-evento" y lo que significa, algo muy diferente a lo que implicase en la época de 'Titanic', cuando un lanzamiento tenía un recorrido de meses, se convertía en indispensable de manera muchísimo más generalizada que en la actualidad y no dejaba de crecer gracias al boca oreja. Hoy este tipo de citas ineludibles en el mundo del cine viven en el pelotazo del fin de semana y perduran en las eternas discusiones de reddit, en las acaloradas cenas entre amigos llenas de teorías y en las expectativas ante próximas entregas y demás conexiones con otros productos de su mismo universo. Nada y todo que ver.
También mencionamos las trayectorias de los hermanos Russo y Rian Johnson, la manera tan distinta en la que Kevin Feige y Kathleen Kennedy llevan sus respectivas sagas, y la diferencia que esconde ese "riesgo" que han corrido ambas propuestas con el objetivo de sorprender a los espectadores y llevar su historia a un punto novedoso con respecto a lo que habíamos visto dentro de la franquicia.
El extra imprescindible
La edición doméstica de 'Star Wars: Los últimos Jedi' viene cargada de extras geniales, escenas eliminadas, cómo se hizo, etc. Pero lo mejor sin duda es 'The Director and The Jedi', el documental que se sumerge de lleno en el rodaje de esta propuesta de Johnson resaltando cómo ha planteado la historia este cineasta y el disgusto de Mark Hamill ante el camino que estaba tomando su personaje. En Tatooine Directo recomendamos el mencionado viaje por la producción de esta cinta de 'Star Wars' porque no se corta y plasma de la manera más directa a la par que sutil el verdadero motivo del disgusto de Hamill ante el destino de Luke, y la forma de afrontar el reto de cada una de las nuevas incorporaciones a la saga. Además transmite de una manera tan entrañable el cariño y la dedicación con las que Johnson afrontó el proyecto que seguro que se gana a más de un disgustado con la película.