'Stranger Things' ha revalidado este año su título como uno de los mayores éxitos de Netflix en lo que a series originales de la plataforma se refiere. La cuarta temporada, lanzada en dos volúmenes, acaparó la conversación durante días, encumbró a nuevos actores y catapultó a lo alto de las listas de éxitos canciones de hace décadas. La serie de los hermanos Duffer ya forma parte de la cultura pop. Pero al principio de su historia no sonaba tan a éxito para uno de sus protagonistas.
David Harbour ha admitido en una entrevista con la BBC que creía que 'Stranger Things' no iba a pasar de la primera temporada: "Recuerdo cuando estábamos rodando la primera temporada en Atlanta. Netflix nos había dado un presupuesto de unos 20 dólares. Hacia la mitad recuerdo que mi peluquera se acercó, estaríamos rodando el cuarto episodio, y me dijo: 'no creo que esto vaya a funcionar'. Cuando terminamos, pensé que no conseguiríamos una segunda temporada y que seríamos la primera serie de Netflix que no tendría segunda temporada. Pensamos que nadie la iba a ver, que iba a ser un desastre".
Como hemos podido comprobar, David Harbour y su estilista estaban pero que muy equivocados. La serie se convirtió en un pelotazo desde la primera temporada, arrasando en visionados, vendiendo un montón de merchandising y llevándose cinco premios Emmy por esa temporada, además del premio al mejor reparto en los Screen Actors Guild Awards.
El final, ¿y después?
Pero aunque siga siendo uno de los títulos más grandes del catálogo original de la plataforma, Matt y Ross Duffer ya han anunciado que la quinta temporada de la serie será la última. Todavía no hay fecha de estreno así que no sabemos cuándo nos tocará despedirnos de Hawkins y del Upside Down. Pero será un hasta luego, no un adiós, porque los creadores ya han avisado que están pensando en spin-offs para expandir el universo de 'Stranger Things'. Eso sí, la idea es que no se centren en ninguno de los personajes que conocemos. Pero las posibilidades siguen siendo enormes.