Señalar a Steven Spielberg como uno de los grandes y más esenciales directores de la historia del cine está, a estas alturas, mucho más cerca de la evidencia que del análisis lúcido y exhaustivo. Es cuestión de cantidad y calidad. Su trayectoria habla por sí sola y a gritos, sin dar demasiadas explicaciones a todos aquellos detractores empeñados en acusar con el dedo el azúcar de más o de menos que tienen algunas de sus películas. Debe ser extremadamente aburrido quedarse en la superficie. A lo largo de varias décadas, Spielberg ha demostrado en decenas de ocasiones ser un narrador superdotado, capaz de atrapar al espectador y mantener su hipnosis durante dos horas, provocando una experiencia inolvidable. Uno de los ejemplos más claros lo encontramos en 'Minority Report', uno de esos trabajos que conviene reivindicar con contundencia y pasión.
Después de estrenar una obra maestra tan maravillosa como infravalorada, 'A.I. Inteligencia Artificial', Spielberg volvía al género de la ciencia ficción con esta adaptación de una historia de Philip K. Dick con la que el cineasta encontró una excusa perfecta para rendir homenaje al cine negro más clásico. Por supuesto que tenemos escenas de acción vibrantes, una trama trepidante repleta de giros y un Tom Cruise entregando el cuerpo y el alma en cada escena, pero por encima de todo, 'Minority Report' es una historia de detectives, engaños y crímenes (resueltos) por resolver.
Una combinación a la que Spielberg aportó dosis industriales de talento visual, de perfección técnica y de sentido del ritmo que terminaron por dar forma a una de las grandes películas de su filmografía. En este especial, regresamos a ella para señalar alguna de sus anécdotas más curiosas, factores, elementos y sucesos que marcaron el proceso creativo de una de las obras maestras de la pasada década. Imposible negarse a regresar, por enésima vez, al universo de 'Minority Report'.
10 curiosidades de 'Minority Report'
Sueldos y beneficios
Si estás dispuesto a trabajar a las órdenes de Spielberg deberías saber algo antes de firmar. No le pidas un aumento. Si lo haces, probablemente estés fuera del proyecto antes de terminar de preguntar. Y es que, el director tiene la firme costumbre de que sus actores y actrices cobren solamente el salario mínimo, ni un dolar más. Eso sí, a cambio tienen la opción de llevarse un porcentaje de los beneficios que la película en concreto consiga en la taquilla.
En el caso de 'Minority Report' y Tom Cruise, la norma se siguió cumpliendo al cien por cien. La estrella protagonista, junto al director, bajó su sueldo antes de firmar pero el 15% de recaudación neta fue a parar a sus bolsillos. Si estáis preocupados por si perdieron dinero, tranquilos, no ocurrió. En absoluto.
Contorsionistas de prestigio
Incluso la escena que, a priori, puede parecer más intrascendente, tiene importancia para Steven Spielberg. Es lo que tienen los genios. Por eso, para el momento en el que el personaje interpretado por Tom Cruise, John Anderton, atraviesa una ventana en plena persecución para acabar en una posición imposible en mitad de una clase de yoga, el director contrató a los doce contorsionistas más reconocidos del mundo, adquiriendo sus servicios para una escena que no llega al minuto. No importa, para alcanzar la perfección se debe recurrir siempre a los mejores.
'La películas más fea'
En la lista de colaboradores ilustres que aparece en la agenda de Steven Spielberg, el director de fotografía Janusz Kaminski cuenta con un lugar privilegiado. Y no es para menos. Su trabajo conjunto, que comenzó con esa obra maestra llamada 'La lista de Schindler', es absolutamente deslumbrante, y en el caso de 'Minority Report', no es una excepción.
Lo realmente curioso es que, en las reuniones previas al rodaje, el director le dio a Kaminski unas directrices tan concretas como sorprendentes: 'Quiero que hagamos la película más fea y sucia de nuestra carrera'. Lo consiguieron, claro, pero lo realmente importante es que eso se convirtió en una virtud más.
La secuela que nunca fue
Los orígenes del proyecto de 'Minority Report' no pueden estar más alejados de lo que finalmente ocurrió con la película. Antes de que Steven Spielberg y Tom Cruise se pusieran manos a la obra con ella, los guionistas de 'Desafío Total' se pusieron en contacto con el director y el protagonista de aquel clásico, es decir, Paul Verhoeven y Arnold Schwarzenegger, para ofrecerles un regreso a la ciencia ficción por la puerta grande. El director se mostró interesado, pero Arnie fue rotundo en su negativa. Ellos salieron perdiendo. Nosotros ganando.
Y Bardem dijo no
A estas alturas, cuesta imaginar 'Minority Report' sin su reparto original, pero lo cierto es que, en la mayoría de casos, los papeles terminaron en manos de actores y actrices que no eran la primera opción. Por ejemplo, Steven Spielberg tenía claro que quería a Javier Bardem para que interpretara a Danny Witwer, un personaje con el que finalmente se hizo Colin Farrell. En el caso de Agatha (Samantha Morton), la opción inicial era Cate Blanchett, quien tampoco terminó participando en el proyecto.
Misterios
Es evidente que el espíritu y la esencia que recorren cada segundo de 'Minority Report' están directamente relacionados con las historias de misterio más clásicas. Un '¿quién ha sido?' en toda regla en el que los sospechosos se multiplicaban después de cada giro de la trama. Por si acaso no fuera suficiente, la película guardaba un guiño aún más evidente en tres de sus personajes más esenciales, los 'precogs'. O mejor dicho, en sus nombres: Agatha, Arthur y Dashiell. El ejercicio es sencillo, colocar los apellidos de Christie, Conan Doyle y Hammet. Voilà! Homenaje en toda regla a tres los autores más destacados del género de la intriga y el misterio.
Marca Cruise
La pasión y el sacrificio con el que Tom Cruise se enfrenta a cada uno de sus proyectos es una de las señas de identidad del actor. En lo que respecta a 'Minority Report', pese a que no hay ningún avión ni edificio imposible del que colgarse, el protagonista tuvo la oportunidad de lucirse, y jugarse la vida otra vez, en el momento en el que debe aguantar la respiración en una bañera llena de hielo para no ser descubierto por sus perseguidores. Steven Spielberg propuso que el aire se generara por ordenador, pero Cruise fue contundente y decidió ocuparse él mismo de cumplir con el reto. No falló.
Conexión Fincher
Los efectos especiales de 'Minority Report' funcionan siempre como elemento complementario esencial por encima de factor protagonista que eclipse a la historia y sus personajes. Su papel es clave dentro de la trama, especialmente para las escenas en las que el equipo de Tom Cruise observan los crímenes antes de que ocurran. Por eso, a la hora de elegir a los responsables para llevar a cabo esta misión, Steven Spielberg terminó decidiéndose por la compañía Imaginary Forces. Una apuesta que surgió después de que el director descubriera que se trataba de la compañía que estaba detrás del diseño de los títulos de crédito de 'Seven', la obra maestra de David Fincher. Steven siempre ha tenido buen gusto.
Coches bien limpios
Son muchos los elementos fascinantes que plantea el futuro diseñado por Steven Spielberg para 'Minority Report', pero está claro que los coches ocupan un lugar impactante. Sin embargo, pese a que se trate de todo un espectáculo para la vista, lo cierto es que no todo lo que rodea a estos automóviles es tan deslumbrante, especialmente en lo que respecta al sonido. Y es que, el ruido del coche que conduce el personaje interpretado por Tom Cruise en la película, corresponde al de la lavadora de la casa del diseñador de sonido de la película. Una apuesta arriesgada pero efectiva.
Cameos ilustres
Dos directores, dos cameos. Paul Thomas Anderson y Cameron Crowe. ¿Fáciles de detectar? No, para nada. El primero de ellos, nombre ilustre que todavía no había desplegado del todo el inmenso talento que continúa marcando cada uno de sus proyectos, es uno de los tipos que aparece en la escena en la que Tom Cruise se encuentra en el tren, complicando aún más su identificación.
En el caso de Crowe, también volvemos al tren pero, en esta ocasión, es mucho más sencillo detectar la presencia del director, ya que cuenta con un plano específico para él en el que reconoce al personaje de Cruise tras ver su foto en el periódico que se encuentra leyendo.