Una de las películas de terror más esperadas del año es 'Suspiria', remake de Luca Guadagnino del film de 1977. Está protagonizada por Dakota Johnson, que se aleja del papel de Anastasia Steele para meterse en la piel de Susie Bannion, una estadounidense que se une a una academia de baile alemana cuando desaparece una de las bailarinas. No tardará en darse cuenta de que existe algo extraño en la institución mientras desarrolla una relación de profesora-estudiante "intensa y bonita", en palabras de Johnson, con Madame Blanc (Tilda Swinton).
Como contó a Entertainment Weekly, lo que más miedo le dio grabar a la actriz no fueron los elementos paranormales, sino las actuaciones de baile. "Estuve entrenando de vez en cuando el año antes de empezar a grabar, pero no soy una bailarina profesional. Estaba aterrada", afirma, ante la idea de tener que bailar frente al público. "Nos movíamos sobre un pentagrama, como si el baile estuviese conjurando un hechizo".
Por su parte, Guadagnino habló sobre la importancia del baile en sí en esta nueva versión de la película. "En el film de Dario Argento se ven, sobre todo, las clases; no hay una escena con un gran baile. Sentíamos que el baile tenía que ser parte del proceso de hechicería. Esa actuación prepara el terreno para el gran ritual que hay en el centro de la película".
La carrera de Dakota Johnson
Habiendo alcanzado fama internacional con la saga de Cincuenta Sombras, Johnson contó a la revista Elle que "hay muchas más experiencias que tener. Es muy bueno seguir aprendiendo de las cosas que amo", refiriéndose a la cantidad de géneros que ha tocado, desde la comedia hasta la aventura gracias a su futura película, 'The Peanut Butter Falcon' que protagonizará junto con Shia LaBeouf y Jon Bernthal. Una vez estrenadas ésta y 'Suspiria' que, en palabras de Johnson, "me jodió tanto que tuve que ir a terapia", se centrará en sus propias producciones: "He descubierto que hay proyectos en los que quiero trabajar y no existen, así que tendré que crearlos yo misma. Me siento increíblemente agradecida de estar en una posición que me permita hacerlo".
Curiosidades de 'Suspiria'
El viaje inspirador
Durante un viaje a través de Europa en el que visitó, entre otras ciudades, Praga, Lyon y Turín, a Dario Argento le surgió la idea de llevar a cabo una historia sobre brujería en la que tendría en cuenta el triángulo mágico entre Francia, Alemania y Suiza.
Dicho triángulo era parte de las teorías del filósofo y ocultista Rudolf Steiner, fundador de la Sociedad Antroposófica a principios del siglo XX.
La base literaria
El concepto de las Tres Madres surgió directamente de 'Suspiria de profundis', obra del escritor romántico Thomas de Quincey publicada en 1845, la cual funcionaba como representación de los arquetipos jungianos en torno a la figura de la madre.
Pese a que no hubo mención a la obra en los títulos de crédito, se trata de una inspiración evidente, ya que en la obra de Quincey, se menciona a las figuras del siguiente modo: "Mater Lacrymarum, Nuestra Señora de las Lágrimas. Mater Suspiriorum, Nuestra Señora de los Suspiros. Mater Tenebrarum, Nuestra Señora de las Tinieblas".
Dario Argento acabaría explotando a las Tres Madres en 'Inferno' y 'La madre del mal'.
Jessica Harper
Fascinado por su interpretación en 'El fantasma del paraíso' de Brian de Palma, Dario Argento decidió contar con Jessica Harper para que fuese la encargada de encarnar a Suzy Bannion, la protagonista.
Tras ver 'Cuatro moscas sobre terciopelo gris', el giallo que Argento había dirigido en 1971, la actriz aceptó la propuesta sin pensárselo, rechazando la oferta de trabajar junto a Woody Allen, quien le había ofrecido aparecer en 'Annie Hall'.
Miguel Bosé
Por aquel entonces, Miguel Bosé ya tenía cierta experiencia como actor, debido a que había tenido la oportunidad de debutar en 1973 frente a las cámaras. Desde entonces, eran ya varios los papeles que había tenido en el cine, tanto en España como en Italia.
Curiosamente, Dario Argento le contrató creyendo que era italiano, debido a la nacionalidad de su madre, Lucía Bosé, y a que el actor y posterior cantante (no grabaría su primer disco hasta 1977, año en el que se estrenaría 'Suspiria'), hablaba un perfecto italiano.
El propio director aseguró que durante el rodaje, todos le llamaban Michele, ya que nadie sabía que, en realidad, Bosé era español.
Pionera
En 1975, Cinema Products Corporation presentó el concepto de steadicam, inventada por Garrett Brown y que servía para estabilizar una cámara. En cine, el primero en utilizarla fue Hal Ashby para algunas secuencias de 'Esta tierra es mi tierra', estrenada en 1976.
Ese mismo año llegaban también 'Rocky' y 'Marathon Man', otros de los primeros ejemplos del uso pionero del steadicam.
Dario Argento consiguió ser en 1977 el primer italiano en utilizarlo para 'Suspiria', tres años antes de que se popularizase gracias a 'El resplandor' de Stanley Kubrick.
El color
Dario Argento estaba totalmente fascinado por el Technicolor y el uso de los colores en 'Blancanieves y los siete enanitos', el film de animación de Disney que le aterró de pequeño y en el que quiso inspirar levemente.
El director de fotografía Luciano Tovoli, optó por iluminar las secuencias pasando la luz de los focos a través de sábanas pintadas de diferentes colores, y no con el sistema de filtros de gelatina, el utilizado normalmente. Además, durante el proceso de impresión de los fotogramas, continuó jugando con los colores dejando de utilizar los filtros que corregían este, dando así a la película el brillante colorido irreal que fue su sello de identidad desde el principio.
La última en Technicolor
'Suspiria' fue una de las últimas película occidentales impresas en Technicolor (pese a que no se rodase siguiendo dicha técnica). Dario Argento había tenido en mente la técnica dada su fascinación con el tratamiento de los colores de 'El mago de Oz', de ahí que optase por imprimir el film así.
Curiosamente, Argento cerraba su propio círculo, convirtiendo su obra maestra en una de las últimas en Technicolor, siendo la primera y más famosa de todos los tiempos 'Blancanieves y los siete enanitos', fuente de inspiración y a la que rindió su particular homenaje con su propuesta.
La banda sonora
Otro de los aspectos más destacados de 'Suspiria' es, sin duda, su banda sonora. Compuesta por el propio Dario Argento en colaboración con la banda italiana de rock progresivo Goblin, quienes ya habían trabajado con Argento en 'Rojo oscuro' y lo harían después con George A. Romero en 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes'.
Considerada como una de las mejores bandas sonoras de la historia del cine según Pitchfork, sus piezas musicales han sido imitadas e incluso reutilizadas en repetidas ocasiones, tal y como hizo Tsui Hark en 'We're going to eat you', (tristemente traducida aquí como 'Cole, cole, que te como').
El enigma de Helena Markos
Durante años, se especuló en torno a la verdadera identidad de Helena Markos, la Mater Suspiriorum que hace acto de presencia al final de 'Suspiria' y a la que debe enfrentarse el personaje de Jessica Harper.
Se dijo que Dario Argento quiso contar para el papel con un paciente de un hospital psiquiátrico, pero las autoridades no se lo permitieron. Así fue como el director inició un proceso de búsqueda que, supuestamente, encontró a una mujer cerca de una oficina de correos.
Para darle más misterio al asunto, Helena Markos apareció sin acreditar en los títulos de la película, pero con el paso de los años, se desveló el nombre de la persona que la llevó a cabo: una tal Lela Svasta.
El remake
Tal es el impacto que 'Suspiria' generó en el mundo del cine, y no solo en lo que al género de terror se refiere, que el film de culto de Dario Argento fue considerado como uno de aquellos títulos intocables durante años.
Como era de esperar, tarde o temprano llegaría el pertinente remake, tal y como ya ha pasado con los grandes clásicos del género ('Psicosis', 'La matanza de Texas', 'La noche de Halloween' o 'Viernes 13' ya cuentan con sus respectivas actualizaciones).
El responsable de llevar a cabo esta nueva 'Suspiria' ha sido Luca Guadagnino, responsable de una de las sensaciones del pasado año, 'Call Me By Your Name', quien ha contado con Dakota Johnson, Tilda Swinton y Chloë Grace Moretz para llevar a cabo esta revisión, donde se despoja del colorido del film de Argento y parece haber abrazado la estética tenebrosa de otros títulos de horror de los setenta.