Este fin de semana llega a nuestras salas 'The cove', documental ganador del Oscar en la ceremonia celebrada el pasado 10 de marzo y de los premios del Público en los festivales de Sundance, Toronto, Tokio, Ámsterdam, Estocolmo y Sidney, llegando a ser cancelado su estreno por las presiones sufridas por el distribuidor y los exhibidores en el país del sol naciente.
En un momento del film, uno de sus protagonistas dice que, para hacer lo que tenían en mente, tuvieron que organizar un grupo como el de 'Ocean's eleven', y lo cierto es que el film dirigido por Louie Psihoyos -fotógrafo de National Geopgraphic- hace gala de un montaje más cercano al entertainment -con, por ejemplo, el continuado uso de las cámaras en negativo- que al formato documental clásico, de un modo ciertamente similar al del enarbolado por, por ejemplo, 'Man on wire', excelente documental que se hiciera con la estatuilla en 2008.
Por su parte, 'The cove' es uno de esos muchos trabajos en los que se denuncia la destrucción de nuestro planeta a manos del ser humano, un título que juega con destreza con la tensión y el drama, con ese terror inducido por la ausencia del mismo del que hacía gala Ridley Scott en 'Alien' y que, por desgracia, en este film toma la forma de la masacre de delfines en Taiji. De este modo, 'The cove' se sirve de todos los trucos cinematográficos habidos y por haber para dinamizar un formato habitualmente enemistado con el gran público, al menos hasta la llegada de Michael Moore a las salas, y al mismo tiempo guarda la etiqueta al no recrearse por derroteros más mórbidos.