La 69 edición del Festival de Cine de Venecia se inauguró ayer miércoles con la proyección de 'The Reluctant Fundamentalist', dirigida por la india Mira Nair ('La boda del monzón'). La película cuenta la historia de un pakistaní que busca el éxito como analista financiero en Wall Street, pero se ve envuelto en un conflicto entre su sueño americano, una crisis de rehenes y la llamada permanente de la patria de su familia.
El film, quizá por ser tan esperado, ha decepcionado a la prensa especializada desplazada al certamen. Según Justin Chang, de Variety, cuenta con "una estructura laboriosa pero mal concebida, con elementos de thriller en un equivocado intento de abrir lo que debería ser una historia íntima". Geoffrey Macnab (The Guardian), coincide en que "hay algo fofo y evasivo en la inevitable equivalencia entre el fundamentalismo islámico y el agresivo capitalismo americano". Para Indiewire, "no cuenta nada que no nos hayan contado antes", mientras que Deborah Young en THR es más entusiasta al esgrimir que "es tan colorida como convincentemente unida a Pakistán, su doloroso drama desafía a la división cultural creada por la tragedia del 11 de septiembre".
Kate Hudson, poco afortunada
La película está protagonizada por el actor británico de origén pakistaní Riz Ahmed ('Four Lions'), acompañado de Kiefer Sutherland, Liev Schreiber y una morena Kate Hudson, quien tampoco se salva de la quema. María Guerra, en su crónica para la web de la Cadena Ser, se muestra muy hiriente en sus impresiones: "tampoco ayuda la pésima interpretación de Kate Hudson, a la que tiñen de morena para salir del cliché de encantadora novia americana. Da igual el pelo, su gestos se limitan a hacer pucheros y carantoñas".