CRÍTICA

'Tierra de nadie': Acción y emoción en un thriller que no arriesga, pero gana

Albert Pintó dirige esta película en la que Luis Zahera, Karra Elejalde y Jesús Carroza se convierten en tres amigos envueltos por el conflicto del narcotráfico en el sur de España.

Por Amaia Sanz Equiza Más 28 de Marzo 2025 | 09:30
Escribo sobre películas y series porque no puedo vivir dentro de ellas.

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Luis Zahera, Jesús Carroza y Karra Elejalde protagonizan 'Tierra de nadie'
Luis Zahera, Jesús Carroza y Karra Elejalde protagonizan 'Tierra de nadie' (Sony Pictures)

Estoy segura de que, si piensas en cine español, el thriller es uno de los géneros en los que más rápido te viene a la cabeza, probablemente después de la comedia. Albert Pintó nos propone algo diferente dentro de las numerosas ofertas del género: nos presenta una película llena de acción pero también con mucho drama, social y personal. Así podría definirse 'Tierra de nadie', la historia de tres amigos dentro del marco del conflicto del narcotráfico en el sur de España.

Una de las cosas que más ha llamado mi atención es el componente emocional y humano de la cinta. No os voy a mentir, al ver el cartel y leer la sinopsis esperaba ver mucha acción y violencia, algo que evidentemente está presente, pero no esperaba encontrarme con unos personajes profundos y una conexión que llega a enternecer al espectador. Me gusta mucho que este sea el hilo conductor de la historia y no un simple complemento. La amistad y el vínculo de los tres es, en sí mismo, el conflicto. Un guardia civil, un narcotraficante y otro que está en el medio de la ley, parece el inicio de un chiste. Un grupo, como poco disfuncional, pero que funciona a la perfección.

Los protagonistas junto a Albert Pintó, director de la película, durante el rodaje
Los protagonistas junto a Albert Pintó, director de la película, durante el rodaje (Sony Pictures)

Ese es otro de los puntos fuertes de la cinta: presentarnos tres perspectivas diferentes sin que resulte pesado y consiguiendo que empaticemos con todos. Hay personajes que son más sencillos, como el Benito de Jesús Carroza, que desde un primer momento se presenta como una persona que cae bien. Pero Mateo, el Gallego, y Juan El Antxale son algo más complejos. En el caso del personaje de Luis Zahera, aunque es el que está en el lado bueno de la ley, su carácter resulta algo seco y fuerte, justo al contrario de lo que ocurre con el personaje de Karra Elejalde, cuyo punto débil es su profesión. Con sus grises, los tres consiguen que les cojas cariño y que quieras (aunque no puedas imaginar cómo) que todo les vaya bien.

Parte del mérito recae sobre los actores. No es ninguna sorpresa, escuchar sus nombres ya te hace intuir que lo que vas a ver merece la pena, pero es que es necesario recalcarlo. Zahera, Elejalde y Carroza están más que creíbles en sus respectivos papeles, llevando a la pantalla los complejos y completos personajes escritos por Fernando Navarro. Es cierto que con esto no nos demuestran nada nuevo, pero nos reafirman lo que ya sabemos: que son muy buenos en lo que hacen, siempre.

Fórmula repetitiva

Así como me ha parecido innovador el hecho de que se muestre un componente humano tan alto, hay muchas cosas que siento que ya he visto antes. Es una película que no arriesga; busca gustar al gran público, por lo que han utilizado fórmulas que saben que funcionan. Y, evidentemente, esto sale bien, de eso no hay duda, pero también provoca que el impacto sea menor.

No pasa nada por esto; no todas las películas tienen que ser las más reivindicativas o las más sorprendentes. Pero sí que creo que la denuncia sobre el conflicto social que se vive en el sur con el narcotráfico se queda a medio gas. La trama de la lucha por el terreno acaba en un segundo plano y acaba no siendo tan determinante como siento que querían que fuese. Los componentes de la banda liderada por Damián Alcázar se convierten prácticamente en extras y, aunque eres consciente de lo que representan y por qué están ahí, es fácil olvidar su importancia real en el conflicto, por lo menos durante la primera mitad de la película, casi hasta el final.

Con todo esto podemos decir que 'Tierra de nadie' es una película hecha por y para el público. Cumple su objetivo de entretener, aunque se queda un poco corta en la denuncia social que intenta realizar. Una cinta que nos muestra los increíbles paisajes del sur de España al ritmo de disparos y puñetazos, con unos increíbles Zahera, Elejalde y Carroza que destacan sobre todo lo demás.

7
Lo mejor: El trabajo de Luis Zahera, Karra Elejalde y Jesús Carroza y el vínculo de sus personajes.
Lo peor: Se nutre mucho de elementos típicos del género, por lo que a veces tienes la sensación de haber visto esto antes.