Ya no queda ninguna duda: estamos ante un momento histórico en la industria del entretenimiento. La huelga de guionistas del WGA ya había obligado a detener un gran número de producciones, pero al sumarse el SAG-AFTRA (que representa a 160.000 actores y actrices, presentadores, cantantes y demás profesionales de la industria), Hollywood va a verse prácticamente paralizado. Lo que ocurre en la industria del entretenimiento estadounidense termina afectando al resto del mundo, y las consecuencias van a notarse más pronto que tarde.
Con la huelga en pie los actores y actrices no pueden prácticamente trabajar en ningún proyecto. Para empezar, los rodajes van a paralizarse inmediatamente. Cuando la huelga correspondía solo a los guionistas algunas producciones pudieron iniciar su rodaje, simplemente trabajando con el guion que ya tenían y sin hacer modificaciones, pero poco pueden hacer si no hay actores. 'La Casa del Dragón' es una de las pocas excepciones, ya que la mayoría de sus intérpretes son británicos y están afiliados al sindicato Equity, por lo que su rodaje continuará. Pero tendremos que tener paciencia si las películas y series que esperábamos con ganas sufren retrasos de varios meses.
Esto va a tener un impacto directo en los beneficios que las grandes compañías y los servicios de streaming tenían planeados para las producciones del último trimestre. Todos los estudios parecen aún intentar recuperase de los estragos del COVID, que cambió por completo el panorama del cine y la televisión; Bob Iger, CEO de Disney, ha dicho que "este es el peor momento del mundo" para paralizar la industria. Ha defendido la idea de que "el nivel de expectativas" que tienen los trabajadores en huelga "no es realista sobre el mundo de los negocios". Los guionistas y actores piden, entre otras cosas, ser compensados justamente por sus trabajos; Iger, por su parte, cobró 15 millones de dólares el año pasado y este año se ha subido el sueldo hasta los 27 millones.
Los actores y actrices en huelga tampoco pueden participar en eventos promocionales o hacer publicidad de cualquier tipo para sus películas, aunque estas ya hayan sido rodadas. 'Barbie' y 'Oppenheimer', a una semana de su estreno, probablemente deberán modificar o cancelar sus últimos eventos promocionales. Los intérpretes ni siquiera puede hacer promoción en sus redes sociales.
Premios y festivales
De momento ya se ha dicho que es muy posible que la gala de los Emmy se aplace de septiembre a noviembre o incluso a enero, esperando que la huelga haya terminado para entonces. Las nominaciones se anunciaron horas antes del fin de las negociaciones entre el SAG-AFTRA y la AMPTP, y las campañas de publicidad de cara a los premios van a ser más complicadas que nunca si los actores no pueden participar.
La Comic-Con de San Diego, que se celebra del 20 al 23 de julio, ya sufría las consecuencias de la huelga de guionistas: Marvel, Lucasfilm, Disney, Netflix, Sony Pictures, HBO y Universal Pictures no estarán presentes en el evento. Sumando ahora la ausencia de actores, los asistentes a la convención quizá podrán disfrutar de la presencia de algunos directores o profesionales de proyectos de animación, pero nada al nivel que se esperaba en años anteriores.
Los festivales de cine también se verán afectados. Si las películas que tenían programada su premiere en alguno de ellos cuentan con actores del SAG-AFTRA, estos no podrán asistir, por lo que quizá no tiene sentido que los estudios inviertan cientos de miles o incluso millones de dólares en el evento. El primero es el Festival de Cine de Venecia, del 30 de agosto al 9 de septiembre; 'Ferrari' de Michael Mann y 'Pobres criaturas' de Yorgos Lanthimos son algunas de las películas esperadas. Posteriormente vendrán el Festival de Telluride, el de Toronto y el de Nueva York. Si bien los directores pueden asistir a eventos, ya que el Sindicato de Directores tiene un nuevo contrato, puede que su presencia no sea suficiente para despertar el interés que necesitan en los espectadores.
