A finales de los setenta, a George A. Romero nadie podía arrebatarle el título de 'Padre del Zombi Moderno', el cual se había ganado en 1968 gracias a la inimitable 'La noche de los muertos vivientes'.
Como realizador al margen de la industria de Hollywood y uno de los pioneros del terror moderno de la época, a mediados de dicha década Romero ideó la que sería la secuela de su famoso film, conocida como 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes', y con la que el director de Pittsburgh realizó toda una crítica hacia el consumismo y los valores negativos del sistema capitalista.
Zombis de culto
Protagonizada por Ken Foree, David Emge, Scott H. Reiniger y Gayleen Ross, la primera secuela de la saga de los muertos vivientes de Romero vio la luz en 1978, gracias a la mano como productor del maestro del terror italiano Dario Argento.
Continuando con la devastadora epidemia que convierte a los muertos en ávidos seres comedores de carne humana, Romero llevó a unos pocos supervivientes hasta un centro comercial, visto como uno de los últimos reductos de vida humana que pasará de ser un sueño capitalista para los que aún luchan contra las hordas de zombies, para acabar convertido en una prisión (de ahí, parte de la visión del realizador hacia el sistema y la opresión que causa sobre la población).
A continuación, repasamos todo lo que convirtió a 'Zombi' en el film de culto como el que se le conoce a día de hoy, cuyo legado es equiparable al de la ópera prima de Romero, quien revalidó el título de padre del nuevo zombi.
Todo sobre 'Zombi', la obra maestra de Romero
Origen
Era 1974 cuando a George A. Romero se le ocurrió la idea para el argumento de 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes'.
Habían pasado ya seis años desde el estreno de 'La noche de los muertos vivientes' y fue durante la visita al centro comercial de Monroeville, en Pennsylvania, junto a su amigo Mark Mason, cuando pensó que sería posible sobrevivir dentro de un lugar como ese en una situación de catástrofe o emergencia.
Argento entra en juego
Pese al éxito que había supuesto 'La noche de los muertos vivientes' años atrás, una vez que George A. Romero ya tuvo en mente lo que quería contar en 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes', empezó a encontrarse con una negativa tras otra por parte de las productoras a las que presentó el proyecto.
Fue entonces cuando apareció la persona que se convertiría en clave para la producción de la película: Dario Argento. Cuando el maestro del giallo, un fan confeso de la ópera prima de Romero, se enteró de que Romero y su productor Richard P. Rubinstein querían sacar adelante una secuela, se reunió con ellos para asegurarles que la película tendría distribución internacional.
Argento, en calidad de productor, invitó a Romero a pasar una temporada en Roma, donde este terminó el guion de la película, sobre la que ambos tomaron varias decisiones argumentales.
El problema de rodar en Navidad
El 13 de noviembre de 1977 se inició el rodaje de 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes' en el centro comercial de Monroeville, el mismo que había servido de inspiración para Romero para idear la película.
Al tratarse de un espacio que estaba abierto al público, el rodaje se tenía que llevar a cabo durante las noches, entre las once y las siete de la mañana. Todo parecía ir bien hasta que llegó la campaña de Navidad y, con ella, los pertinentes decorados navideños en el lugar, los cuales tenían que ser quitados por el equipo de producción cada noche, suponiendo una pérdida de tiempo bastante importante.
Finalmente, durante las tres últimas semanas del año el rodaje se paralizó y no se volvió a retomar hasta el 3 de enero de 1978, periodo en el que Romero aprovechó para comenzar a montar todas las partes de la película que ya estaban rodadas.
Tom Savini
George A. Romero había contado con Tom Savini para que este llevase a cabo los efectos especiales de 'La noche de los muertos vivientes', pero este fue reclutado para la guerra de Vietnam y no pudo participar en la película.
Después de haber colaborado con el director en su anterior película, 'Martin', Savini se encargó del maquillaje y efectos de 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes', para el que su participación en el conflicto armado le sirvió como inspiración.
Para ello, decidió que el maquillaje de los muertos sería en un tono gris, el cual visto luego en pantalla acabó resultando ese tono azulado tan característico, pero contra el que ya no se pudo hacer nada.
La sangre brillante
Toda la sangre falsa que se utilizó en la película fue producida por 3M Company, y desde un primer momento Tom Savini mostró su descontento con el aspecto de la misma, pues era demasiado brillante, siendo su tono más cercano al fluorescente que al verdadero rojo sangre.
Sin embargo, George A. Romero apostó por ella desde el primer momento, pues consideró que el aspecto puramente falso de la sangre dotaba a la película del aire a cómic con el que quería dotar a 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes'.
Los motoristas
En la parte final de 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes', George A. Romero incluyó la incursión de un grupo de motoristas que supondrán el detonante para el desenlace de la película.
Para ello, Romero contó con un grupo de motoristas local, entre los que se incluyó a modo de cameo (el realizador también aparece al inicio de la película como uno de los miembros del equipo de televisión).
En su siguiente film, 'Los caballeros de la moto', el director explotó a modo de road movie su pasión hacia el mundo de los motoristas y las motocicletas.
Los diferentes montajes
Debido a que 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes' había contado con Dario Argento como productor, la película contó con diferentes montajes a la hora de su distribución internacional.
George A. Romero fue el encargado de su montaje para los países anglosajones, con un título que alcanzaba los 139 minutos y que es el que se conoce como el Director's Cut, el cual fue presentado en el Festival de Cannes de 1978. Para su estreno comercial en salas, la duración fue de 127 minutos.
Por su parte, Argento presentó en Europa una versión de 119 minutos, en la que variaba la banda sonora a la que incluyó los míticos temas de Goblin, el grupo que se había encargado de los tema que sonaron en 'Suspiria' y 'Rojo oscuro'.
Recepción
George A. Romero había contado con un presupuesto de 1,5 millones de dólares, los cuales fueron compensados con una buena acogida por parte de la taquilla internacional.
En todo el mundo, 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes' consiguió la nada desdeñable cifra de 55 millones de recaudación, a los que se sumaron las buenas impresiones por parte de la crítica. Los expertos elogiaron el buen uso del gore que Romero plasmó en pantalla, elevándolo al término de arte.
Por si fuera poco, el mensaje que el film lanzaba sobre el consumismo lo convirtió casi de forma inmediata en un título de culto al que pronto le surgieron imitaciones.
Legado
El título con el que fue presentada en Europa, 'Zombi', propició que un año después de su estreno Lucio Fulci estrenase 'Zombi 2'.
Conocida en nuestro país como 'Nueva York bajo el terror de los zombis', el film de Fulci no solo fue la secuela no oficial del título de George A. Romero, sino que como este se convirtió en objeto de culto e inició una saga propia que forma parte de la exploitation italiana.
Por su parte, Romero continuó con su saga de los muertos y el 'Zombi' original tuvo varias ediciones en el mercado doméstico. En 2016, de la mano de Koch Media, vio la luz una edición especial con los diferentes montajes del film, incluyendo la restauración en 4K de la versión de Argento.
Remake
Para acabar de afianzar el legado e influencia de 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes' de George A. Romero, en 2004 vio la luz 'Amanecer de los muertos', remake dirigido por Zack Snyder, el cual contó con un guion escrito por James Gunn.
Protagonizada por Sarah Polley, Jake Weber, Ving Rhames, Ty Burrell, Mekhi Phifer, Michael Kelly y Kevin Zegers, el film contó con el beneplácito de Romero y sirvió como actualización para el arquetipo del muerto viviente, monstruo que continuó siendo visto cual víctima del sistema capitalista en uno de los remakes de terror más elogiados por el público y la crítica.
