Tom Welling apareció la semana pasada en la Fan Expo de Vancouver, convención de fans a la que el actor acudió junto a Erica Durance para participar en un panel de 'Smallville', donde interpretaron respectivamente a Clark Kent y Lois Lane. La serie sobre el joven Superman celebró recientemente su vigésimo aniversario y sus protagonistas lo han celebrado rememorando el pasado y anunciando nuevos planes para el futuro.
Durante el panel, Welling habló sobre la serie de animación de 'Smallville' que él mismo anunció en junio de 2021. Por aquel entonces, él y Michael Rosenbaum (Lex Luthor en la serie) anunciaron que volverían para prestar su voz a sus personajes en sus versiones animadas. Pero Welling espera que los demás actores originales de la serie se unan también a la reunión. Todos menos una, claro, Allison Mack, Chloe Sullivan en la serie, que fue condenada en 2021 a tres años de prisión por su participación en la secta sexual Nxivm.
Durante la ronda de Q&A, Welling respondió lo siguiente a la pregunta sobre si volverá a interpretar a Clark Kent algún día: "Estamos trabajando en una serie animada que continúa justo después de 'Smallville', contando nuestra propia historia, y nuestra intención es conseguir que Erica vuelva como Lois Lane...". A lo que añadió bromeando: "Puede que sea difícil conseguir a Allison".
Pero la cosa no quedó ahí. El comentario inesperado fue recibido con revuelo por parte de la audiencia y Durance, visiblememente aguantándose la risa, añadió su propio comentario: "Tenemos Zoom", aludiendo indirectamente al encarcelamiento de Mack, tras lo cual dijo "¿Demasiado pronto?". Welling continuó hablando de la serie como si nada, señalando que tanto Sam Jones III como John Glover estarían interesados en volver, aunque una reunión del reparto de 'Smallville' en acción real parece menos posible. Podéis ver el momento a continuación y juzgar por vosotros mismos.
La sentencia
En julio de 2021, la actriz Allison Mack fue condenada a tres años de cárcel por su participación en la secta Nxivm, organización relacionada con la trata de personas y manipulación. La propia Mack se había declarado culpable de haber convencido a mujeres para que se convirtieran en las esclavas sexuales del líder de la secta, Keith Raniere, quien marcaba a las víctimas con sus iniciales.
Aunque inicialmente se enfrentaba a condenas de hasta 17 años de prisión, su cooperación para acabar con la organización y con Raniere, que el año pasado fue condenado a 120 años de cárcel por tráfico sexual, consiguió reducir la pena. Una semana antes de hacerse pública la decisión del juez, Mack envió una carta al tribunal arrepintiéndose de todo lo que había hecho dentro de la secta: "Es de suma importancia para mí decir, desde lo más profundo de mi corazón, lo siento mucho". La actriz se encuentra actualmente cumpliendo su condena en la prisión de Dublín, California.
