Brad Pitt es uno de los actores más reconocidos de esta época, lleva activo desde 1987 y ha actuado en películas del calibre de 'Thelma & Louise', 'Seven', 'El club de la lucha' o 'Malditos bastardos'. Pero hubo una con la que no acabó demasiado contento y a partir de ahí decidió que no quería hacer películas del "estilo tío buenorro", y que solo participaría en historias de calidad.
Esta película es 'Troya', donde hace del héroe Aquiles. "Me he convertido en un niño mimado trabajando con David Fincher. No estoy despreciando a Wolfgang Petersen. 'El submarino' es una gran película. Pero, 'Troya' se convirtió en algo comercial" cuenta Pitt al New York Times. "Todos los planos hacían pensar: '¡Aquí está el héroe!'. No había misterio. Así que sobre esa época tome la decisión de solo participar en historias de calidad, a falta de un mejor término. Fue un giro distintivo que me llevó a la siguiente década de películas".
Tuvo efecto
Después de eso tuvimos el placer de verle en cintas como 'Malditos Bastardos' haciendo del cazador de nazis, algo bestia, Aldo Raine, o el extraño Benjamin Button en 'El curioso caso de Benjamin Button', así que, quizá tomó una buena decisión.
Brad Pitt ha sido nominado a los Globos de Oro 2020 como Mejor Actor de Reparto por 'Érase una vez en... Hollywood' junto a Tom Hanks por 'Un amigo extraordinario', Anthony Hopkins por 'Los dos papas', y Al Pacino y Joe Pesci, ambos, por 'El irlandés'.
Una dura competencia que hará que le sea difícil ganar el premio a pesar de su gran actuación en la cinta de Tarantino, y aún más complicado será eventualmente el Oscar. Premio que aún no ha ganado nunca Pitt por su actuación.