Parece que 2016 no quiere que nos quitemos el luto. Debbie Reynolds, la emblemática actriz de 'Cantando bajo la lluvia' y nominada al Oscar por su papel protagonista en 'Molly Brown, siempre a flote', ha fallecido a la edad de 84 años en Los Angeles. En el momento en el que la intérprete comenzó a sentir malestar se encontraba con su hijo, Todd Fisher, preparando el funeral de Carrie Fisher.
El director fue el encargado de compartir el comunicado de la muerte de su madre, al mismo tiempo que dio a conocer cuáles fueron las últimas palabras que pronunció Reynolds antes de su fatal desenlace: "La echo mucho de menos, quiero estar con Carrie". La fuerte unión de madre e hija era muy conocida por todos y así lo hizo saber Debbie Reynolds antes de decir adiós. Todd Fisher confirmó a E! News esta última declaración de la mítica intérprete, afirmando que "ella quería estar con Carrie. De hecho, estas fueron las últimas palabras que dijo esta mañana".
La muerte de la actriz de 'Star Wars' fue un duro varapalo para su familia, y es que el ataque al corazón que sufrió durante el vuelo a Los Angeles pilló por sorpresa no solo a sus más allegados, sino al resto del mundo. El temprano fallecimiento de la queridísima princesa Leia ha supuesto una auténtica conmoción, a la cual se une la muerte de otra de las estrellas que alumbraron durante muchos años la industria de Hollywood.
Los recuerdos junto a sus hijos
Debbie Reynolds y Carrie Fisher eran una madre e hija muy unidas, quienes vivían "puerta con puerta, separadas por una sobrecogedora colina", tal y como dio a conocer Fisher en 'Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds' y recoge Deadline. El documental, que verá la luz en marzo en HBO, muestra un repaso sobre la vida de Reynolds, sus hijos y cómo ha sido el desarrollo de estos a lo largo de los años que han estado inmersos en el mundo del espectáculo.