En el día de hoy pude ver, en el Festival de San Sebastián, una película basada en unos escalofriantes hechos reales ocurridos en la Argentina de los años 80. 'El Clan' nos narra el día a día de la familia Puccio y de su patriarca, Arquímedes. Los Puccio tienen un pequeño negocio debajo de su casa. El padre, un antiguo miembro de la inteligencia argentina, está jubilado y cuida de todos sus hijos. Viven como una familia normal sin que nadie sospeche nada de ellos. Sin embargo, tanto el padre como Alejandro, el hijo mediano, forman parte de una red criminal de secuestros y extorsión de altos empresarios del país.
Por primera vez este año, he visto una película basada en hechos reales que no haya resultado una decepción. 'El Clan' no solo consigue contar una buena historia, sino hacerlo bien.
Con el Leon de Plata de Venecia a sus espaldas, el director Pablo Trapero nos atrapa desde el principio de la historia y consigue hacer que la tensión no deje de aumentar cada minuto hasta casi instantes antes de los créditos finales. La descripción de la complicada situación política del país y la corrupción son en partes los culpables de hacer la vista gorda con hombres como Arquímedes, y permiten que él siga secuestrando y matando sin peligro. La música y la ambientación de los 80 están muy logradas, ayudando a meterse completamente en la película.
Personajes con fuerza
Los personajes son unos de los puntos fuertes en 'El Clan'. Alejandro Puccio, en el primer papel para cine de Peter Lanzani, es el hijo que sabe todo lo que su padre hace, pero, sin conseguirlo, desea dejarle atrás y poder continuar con su vida. Por otro lado, un casi irreconocible Guillermo Francella interpreta al frío patriarca de los Puccio, Arquímedes, con esa mirada calculadora y sin vida, maquinando siempre el siguiente paso.
Esta película compite en la Sección Perlas y tiene muchas papeletas para llevarse el codiciado premio. El estreno en nuestro país está previsto para el próximo 13 de noviembre.
