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Si Tom Hardy no se ha mostrado avergonzado por sus fotos desnudo, mucho menos lo hizo por sus famosas fotos de MySpace, antes de ser famoso. Alguien recuperó algunas de ellas y se hicieron virales, porque daban una imagen bastante contraria a la que se tenía del actor, desde el aspecto más "cani" bajándose los calzoncillos, hasta con diversos disfraces y poniendo caras de loco, o posando con una ropa interior de dudosa modernidad.

En declaraciones que hizo a Sky News sobre las fotos, dijo: "No me avergüenzo de mis fotos en MySpace, especialmente de la que salgo en calzoncillos, la cual es una gloriosa imagen de un hombre en su hábitat natural [...] En América dicen que debería sentir vergüenza por esto, pero no estoy ni remotamente avergonzado. Ese soy yo en mi vida cotidiana".

Y nos lo creemos porque... años después, con toda la fama que tiene ahora encima, vino el DubSmash.

Si alguien piensa que a Tom Hardy le pudo haber dado vergüenza hacer tonterías delante de una cámara , es que aún no le ha visto jugando con DubSmash. Da igual que esté en su casa, con sus amigos, con buen aspecto o con una barba sin haber sido recortada en meses: ahí está "cantando" como sus artistas favoritos. Una app que para usarla hay que tener mucha valentía y poca vergüenza.

Hay vídeos por internet con sus mejores interpretaciones en DubSmash.

En el año 2010, tras el estreno de 'Origen', Tom Hardy tuvo su primera y única nominación a los premios BAFTA como estrella emergente, y ganó. Sin embargo, y pese a tratarse de un momento muy especial en la carrera de todo actor británico, no acudió a la ceremonia, y nadie sabía por qué. Fue en el programa de Alan Carr donde dijo abiertamente que estaba rodando fuera y que sólo tenía una semana para ver a su hijo, así que tenía que elegir y prefirió no ir a los BAFTA.

Ahí ganó, no sólo el Premio Orange a la Estrella Emergente, sino que también se llevó un 10 como padre.

Si intentáis ver a Tom Hardy en programas tipo talk shows, como el famosísimo de Graham Norton en Reino Unido, u otros como el de Jimmy Kimmel, Conan, etc., en América, veréis que es imposible. Sus entrevistas en televisión son muy reducidas, y generalmente las concede a Alan Carr. Dicen las malas lenguas que es posible que esto venga de un par de malas experiencias con el presentador Jonathan Ross. En una ocasión, se mostró incómodo después de que el anfitrión mostrara un vídeo suyo cuando tenía 21 años, siendo muy escueto en el resto de preguntas. Pero luego aclaró que la entrevista iba sobre su papel de Bane en 'El caballero oscuro: La leyenda renace' y que en realidad no podía decir nada de la película. Por lo demás, afirmaba estaba bromeando para incomodar a Ross, y no dijo ninguna mala palabra de él. Aun así, en la despedida del programa, le dedicó al presentador una bonita peineta, entre risas. Pero, entre risas, nunca más volvió.

Tom Hardy tiende a aparecer siempre con el cuerpo muy musculado, debido a los papeles que tiene que interpretar, y junto a su voz grave, sus miles de tatuajes, y su carácter serio parece el prototipo de tipo duro. Sin embargo, ha dicho que es, precisamente, todo lo contrario a la idea de masculinidad. Algunas de las muestras que da de ello es que dice ser débil y temeroso, que se siente incómodo en grandes grupos de hombres, que por eso ha dejado de entrenar en gimnasios, y que tiene una gran pasión por los zapatos de tacón. Pero no en el sentido de que le resulten eróticos, sino que le gusta verlos, comprarlos y ayudar a combinarlos con la ropa. Dice que eso lo solía hacer de niño con su madre.

Hardy ha definido la masculinidad algo que "no tiene que ver con ser un macho. Es tener consideración, paciencia y habilidades cognitivas. En un sentido profesional, es mostrar respeto mutuo por tus compañeros".

Esta es una de las facetas que más nos gustan de él, porque romper con esa idea clásica de masculinidad es una de las vías para luchar contra el machismo de la sociedad, alimentado por los roles de género que nos marcan cómo tenemos que ser según el sexo con los que hayamos nacido.

Tom Hardy no es el típico actor de Hollywood cuya imagen valga más que sus principios. Por eso, aunque se habla mucho de sus dientes torcidos, no ha querido arreglarlos. En este sentido, hay unos pocos actores y actrices de Hollywood que se mantienen fieles a su imagen natural, como Keira Knightley o Michael Fassbender (todos británicos: ¿casualidad?), y nos encanta. ¿Acaso hay algo más bonito que la sonrisa de estos tres famosos?

Con su barba ocurre algo parecido. Desde hace unos años, pocas veces le hemos visto fuera de la pantalla sin barba, e incluso desde Esquire le pidieron que se afeitara para la sesión de fotos. Dijo que no, aunque sabía que "nadie compraría una revista con una barba en la portada".

Uno de los episodios más conocidos protagonizados por Tom Hardy fue en la presentación de la película 'Legend' en el Festival de Cine de Toronto. Un periodista hizo alusión a la orientación sexual de Tom. El periodista de Daily Xtra le preguntó que uno de sus personajes, Roonie, es muy abierto sexualmente, y que él, según diversas entrevistas en el pasado, se había mostrado muy ambiguo al respecto, y que si pensaba que a los famosos les cuesta hablar de su sexualidad. Tom Hardy le contestó de manera tajante diciendo que qué le estaba preguntando exactamente, que no creía que a los famosos les cueste hablar de ello, y que si le estaba preguntando por su propia sexualidad. El entrevistador, nervioso, respondió que sí, y la respuesta de Hardy fue, simplemente: "¿Por qué?", y sin dejarle contestar, le espetó un: "Gracias [pero cállate]".

Posteriormente, Hardy dijo que no tendría ningún problema en hablar largo y tendido sobre su sexualidad en una entrevista, pero que ese no era el momento ni el lugar. Viendo la sinceridad con la que el actor inglés suele responder en entornos distentidos, no dudamos de su palabra, la duda está en por qué nadie ha ofrecido aún esa entrevista.

Aun así, Tom Hardy no ha mostrado reparo en defender al colectivo LGTB, y sintió que había decepcionado, en cierta manera, a mucha gente por el tema de la homosexualidad (por no serlo), pero que no podía salir del armario sin ser gay.

Para Tom, la familia es lo primero, y no importa si tienes que llevártela al trabajo. Woody es uno de los perros inolvidables de Hollywood, aunque no haya aparecido en la gran pantalla. Hardy lo llevaba mucho con él, desde los rodajes, hasta las entrevistas de la televisión, le acompañaba cuando leía cuentos en Cbeebies, y también al estreno de 'Legend'. Así fue que Woody posó con los protagonistas y el director de la película, como uno más. También estuvo bastante libre por allí, cazando palomas o saltando encima de su dueño.

Sin embargo, el pobre Woody murió con tan solo 6 años de edad, porque tenía una enfermedad de nacimiento. Tom le dedicó públicamente una carta muy sentimental que nos enseñó a ese Tom Hardy que no es como sus personajes, sino un hombre sensible. En ella explicaba que su amigo tenía ansiedad por separación, odiaba estar lejos de sus dueños, lo cual explica por qué le acompañaba tanto.

Parece muy lógico, políticamente correcto y "quedabien" defender la igualdad de género, pero en realidad pocas celebridades hablan de ello abiertamente si no es para quejarse de lo "demasiado" que piden las mujeres. Por eso Tom Hardy es un ejemplo a seguir y todo un icono feminista, porque ha dicho sin ningún tapujo que estaba harto de los papeles de madre y novia que se le dan a las mujeres en las películas, que eso no las reprensentaba de ninguna manera.

También hizo unas sonadas declaraciones, en el contexto del estreno de 'La entrega', en las que decía que que habría que escribir más y mejores papeles para las mujeres: "sería interesante coger el género del crimen y sustituir los papeles masculinos por mujeres. Y no cuestionarlo, sólo hacerlo".

Otro gran "quote" de nuestro protagonista fue en la presentación de 'Mad Max: Furia en la carretera'. La primera pregunta que le hicieron fue que si al ver el guión de la película no pensó que qué hacían todas esas mujeres en una película que se suponía que era para hombres y respondió: "no, ni por un minuto".

Parece una historia graciosa, la típica locura de una noche de desfase en la que te despiertas con un montón de cosas de las que arrepentirte. Pero no es gracioso, en este caso, es una de las historias que Tom Hardy vivió en relación a su su pasado con el alcohol y las drogas. Contó que esta fue una de las historias más turbias que vivió, en ese sentido, aunque en otras declaraciones dijo cosas tan duras como que "hubiera vendido a mi madre por crack", o que se dio cuenta de a dónde había llegado su vida cuando se despertó una mañana en una calle del Soho cubierto de sangre y vómito. Le ocurre al revés que a otras estrellas: éstas se hacen famosas y entran en una espiral de sustancias y malas conductas, y para Hardy fue precisamente la interpretación lo que le ayudó en su camino por sentar la cabeza.

Cuenta sus historias para mostrar a la gente la parte más dura de las drogas y del alcohol, pues se ha sentido cerca de la muerte por culpa de estas sustancias. ¡Ole por su valentía!

Si quieres ganarte a Tom Hardy en una entrevista, llévale algo de comer. Es un glotón de pro, y él pasa de mantener el tipo delante de los periodistas o la cámara, se pone fino a chocolates. Así le vimos en una entrevista sobre 'El renacido': estaba junto a un impecable trajeado Leonardo DiCaprio, gran amigo de Hardy, y un periodista les llevó unos dulces. Leo, agradecido, los dejó a un lado, pero Tom empezó a comerse unas chispas de chocolate como si fuera tu hermano pequeño con una bolsa de gusanitos. ¡Adorable!

Además, este es el secreto de Alan Carr para hacer que haya ido a su programa hasta 3 veces. En una de las entrevistas, la del desnudo de 'Taboo', tenía una mesa llena de dulces típicos ingleses y no paraba de comer. ¡Y tú, que seguro no te atreves ni a coger una galleta de más en casa de tu abuela!