Posiblemente, entre todos los contenidos originales producidos por Movistar, 'Vergüenza' sea una de las series que más salen a relucir. Estrenada a finales de 2017, esta comedia creada por Juan Cavestany y Álvaro Fernández Armero logró ofrecer una propuesta cómica nunca explorada en la ficción televisiva española, dando lugar a una serie llena de situaciones incómodas, divertidas y totalmente pasadas de rosca y llevadas al extremo con la que se constituyó un producto altamente adictivo y logrado.
Con el anuncio de una segunda temporada, varias cuestiones quedaban planteadas respecto a todo lo que la serie podría continuar dando de sí en próximos capítulos, pudiendo dejar dudas respecto a si sería capaz de repetir la misma fórmula sin perder su frescura e impacto cómico o que argumentalmente se pudiera seguir dando juego a la historia de Jesús (Javier Gutiérrez) y Nuria (Malena Alterio) sin caer en la reincidencia. Lo cierto es que la serie consigue superar dichas barreras sin dificultad alguna, logrando ofrecer seis nuevos episodios muy destacables y efectivos donde incluso se lleva más al extremo lo visto en la anterior tanda de capítulos.
Aunque la fórmula y la propuesta sigan siendo las mismas, 'Vergüenza' consigue aportar un toque de frescura cambiando el contexto y las tramas por las que gira esta segunda temporada. Comenzando desde un pequeño salto temporal respecto al último capítulo de la primera, estos nuevos episodios nos cuentan la vida de Jesús y Nuria como padres de dos hijos, siendo uno de ellos un niño etíope adoptado que padece de gigantismo. Este nuevo contexto da lugar a poder ver a los personajes enfrentándose a nuevos entornos o situaciones: el formar parte de la comunidad de padres del colegio, realizar nuevas tareas en el hogar, formar nuevas relaciones de amistad,... permitiendo a la serie poder volver a sacar lo peor de roles como el de Jesús y construir nuevamente incómodas y divertidas secuencias.
Esto también trae consigo que un nuevo elenco de personajes secundarios entre en escena y en la vida de los protagonistas de 'Vergüenza', siendo, en su gran mayoría, papeles que vienen a reflejar diferentes ambientes de vida que acaban por chocar con los ideales que presentan Jesús y Nuria. Algunos de ellos puede que no resulten todo lo redondos o efectivos que deberían en cuanto a su planteamiento y función definida, pero, en general, el contrapunto que generan respecto a los dos roles principales acaba por generar muchos de los grandes momentos con los que nos obsequian estos nuevos episodios.
Además de incorporar nuevos personajes, volvemos a reencontrarnos con los principales secundarios de la anterior. Este es el caso de Oscar (Vito Sanz) o de Carlos, el padre de Nuria (Miguel Rellán), sobre quienes la serie apuesta por continuar con algunas de las cuestiones ya abordadas sobre ellos durante la primera temporada pero llevando todo a un extremo aun mayor, derivando de aquí dos de las mejores subtramas que ofrece esta continuación de 'Vergüenza'.
Aunque para situación extrema, más destacable es la situación a la que Cavestany y Fernández Armero conducen la historia de Jesús y Nuria de cara al final de esta temporada, siendo un hecho que vuelve a demostrar el buen nivel que la serie continúa presentando a nivel de guion, de ideas, de incomodidad y, sobre todo, de humor. Mención también al gran trabajo de interpretación que vuelve a presentar todo el elenco, especialmente el duo protagonista compuesto por Javier Gutiérrez y Malena Alterio sobre los que también recae gran parte del peso de la efectividad de la propuesta de la serie.
¿Solo seis capítulos?
En comparación con los diez que conformaron la primera temporada, esta nueva tanda de episodios ha sido reducida a 6 capítulos y a un especial de navidad, trayendo consigo que la serie avance de forma algo más forzada, con menos hueco a desarrollar las tramas y situaciones y conllevando también que el espectador se quede más sediento por ver más episodios.
Este hecho es posiblemente el mayor inconveniente que presenta esta segunda temporada de 'Vergüenza', porque en otros aspectos, la serie demuestra que consigue mantenerse igual de fresca, divertida y efectiva, volviendo a ofrecer los mismos alicientes que hicieron funcionar tan bien a sus anteriores episodios bajo nuevas ideas y situaciones. Y es que, sin duda alguna, 'Vergüenza' continúa siendo una de las mejores y más originales comedias que hay en el panorama televisivo español.
Nota: 8
Lo mejor: La serie consigue mantenerse fiel a su esencia a la vez que logra ofrecer nuevas y efectivas situaciones que llevan todavía más al extremo lo visto en la primera temporada.
Lo peor: Los seis capítulos que conforman la temporada puedan saber a poco en comparación con los 10 de la anterior.
15 comedias televisivas que no has visto y deberías
'Don't Trust the B---- in Apartment 23'
Antes de convertirse en Jessica Jones y poco después de ser la novia de Jesse Pinkman en 'Breaking Bad', Krysten Ritter fue la z---a del Apartamento 23, una de las protagonistas de esta serie de ABC, sobre una chica de pueblo que se muda a la gran ciudad y se va a vivir con una excéntrica y salvaje compañera de piso, Chloe, bala perdida y mejor amiga del mismísimo James Van Der Beek (que se interpreta a sí mismo en la serie, en un caso brillante de autoparodia). Alocada, surrealista y deliciosamente divertida, 'Apartamento 23' no logró conquistar a la audiencia a pesar de la descacharrante interpretación de Ritter, y fue cancelada en su segunda temporada. Pero gracias a Netflix (y al impulso de 'Jessica Jones'), está viviendo una segunda vida en España. Animaos a descubrirla vosotros también, y hagamos posible su regreso. Cosas más raras se han visto.
'Baskets'
Creada y protagonizada por Zach Galifianakis y producida por el prolífico Louis C.K., 'Baskets' es una de las mejores comedias de los últimos años de la que nadie está hablando. La serie cuenta la historia de un hombre empeñado en su sueño de ser payaso profesional, a pesar de que la vida le sigue dando indicios de que quizá no sea el mejor camino a seguir. Una serie que fusiona comedia absurda y drama dando como resultado un producto a ratos esperpéntico, a ratos conmovedor y sublime. El humorista Louie Anderson se llevó un Emmy por interpretar a la madre del protagonista, Christine Baskets. Merece la pena ver la serie aunque solo sea por conocer a este maravilloso personaje.
'Bob's Burgers'
Es simplemente un delito que 'Bob's Burgers' permanezca estancada en España. Fox emitió una cuantas temporadas en nuestro país, pero dejó las siguientes en la nevera, a la espera no sabemos de qué. Una pena, porque esta comedia animada es una auténtica joya. Frecuentemente comparada con 'Padre de familia', 'Bob's Burgers' tiene mucho más que ver con 'Los Simpson', concretamente con su época dorada. Aunque no huye del humor escatológico y a veces políticamente incorrecto, 'Bob's Burgers' está a años luz de la mala leche de la serie de Seth MacFarlane. Su humor es bobo pero inteligente, sus personajes se apoyan incondicionalmente, mostrando un ejemplo de familia siempre unida a pesar de las dificultades, y hay un gran corazón bombeando siempre sus historias. Pensándolo bien, que tarden tanto en emitirla en castellano puede ser una oportunidad para animarse a descubrirla en versión original, ya que las voces en inglés son la monda.
'Community'
Es una de las series de culto más importantes de los últimos años, pero aun así permanece oculta para muchos espectadores. 'Community' trata sobre un dispar grupo de estudiantes adultos de una escuela universitaria, y es la respuesta irreverente a 'The Big Bang Theory', una comedia inteligente que emplea el humor "geek" y las referencias pop de manera ingeniosa e intrincada. La serie, originalmente de NBC, estuvo a punto de ser cancelada en numerosas ocasiones, pero el apoyo de su fandom logró que sobreviviese para cumplir la primera mitad de la profecía #sixseasonsandamovie. La parte de las seis temporadas la llevaron a cabo milagrosamente, ahora hay que seguir haciendo ruido para que consigamos la película. Con la serie en Amazon Prime Video en nuestro país, ya podéis uniros a la resistencia, no os arrepentiréis.
'BrainDead'
Los creadores de 'The Good Wife', Robert y Michelle King, demostraron que se les daba muy bien la comedia en la serie protagonizada por Julianna Margulies. Por eso no nos extrañó verlos dar el salto completo a este género con 'BrainDead', original sátira política de ciencia ficción que narra una invasión extraterrestre en la que unos parásitos se instalan en el cerebro de los humanos y les hacen actuar de forma extraña. Esta premisa sirvió a los King para realizar una divertidísima crítica al sistema político actual, en la que no dejaban títere con cabeza (literalmente). Sin embargo, la audiencia no comulgó con la propuesta y CBS canceló la serie tras una sola temporada. No pasa nada, la historia queda más o menos cerrada y funciona muy bien como miniserie. No os la perdáis, aunque solo sea por sus geniales "previously on" musicales.
'Galavant'
Otro caso de serie injustamente cancelada antes de tiempo. 'Galavant' era demasiado buena para este mundo. Esta comedia musical de ABC seguía las andanzas de un héroe medieval y nos trasladaba a un mundo de espada y brujería en el que las canciones y el humor desmontaban los clichés de los cuentos de hadas. Su reparto era excepcional, su metahumor muy inspirado, y los temas musicales estaban compuestos nada más y nada menos que por Alan Menken ('La bella y la bestia', 'Aladdin'). Aunque nos dejase a medias con un cliffhanger y nos privase del "Vivieron felices y comieron perdices", 'Galavant' debe ser reivindicada y redescubierta. Imprescindible para los fans de Disney.
'Colgados en Filadelfia'
¿Qué serie puede presumir de llevar 12 temporadas en antena y seguir en la cima creativa y comercialmente? 'Colgados en Filadelfia' no es muy conocida en España, pero en Estados Unidos funciona muy bien desde la cadena FXX, donde es una de sus series más vistas. Salvaje, políticamente incorrecta, y muy ácida, 'Colgados en Filadelfia' se supera año tras año con ambiciosos episodios en los que vemos a la desastrosa pandilla del Paddy's Club protagonizando las aventuras más disparatadas. Sí, tiene ya un largo recorrido a sus espaldas, pero nunca es tarde para apuntarse a la locura.
'Chewing Gum'
Esta comedia británica es una de las gemas ocultas de Netflix. Creada y protagonizada por la divertidísima Michaela Coel, 'Chewing Gum' se suma a la corriente de series que exploran desde la comedia la generación millennial. Pero en este caso, el humor de Coel es mucho más pasado de rosca y caricaturesco que el de sus contemporáneas, Lena Dunham o Phoebe Waller-Bridge. Todas ellas tienen en común que practican el humor autocrítico y se ponen a sí mismas en situaciones extremas y embarazosas, pero la protagonista de 'Chewing Gum', Tracey, se lleva la palma. Nunca fue tan gracioso ver cómo el mundo se derrumba alrededor de una persona.
'Search Party'
Otra serie que entra en el cajón de las comedias millennial. 'Search Party' también nos habla de la juventud actual (y en concreto de los hipsters) con mucha bilis y autocrítica, pero además añade un componente de misterio que la acerca a otra serie de culto, 'Bored to Death'. En 'Search Party', una veinteañera (Alia Shawkat) emprende una investigación para averiguar qué le ha pasado a una compañera del instituto que ha desaparecido en misteriosas circunstancias, lo que le lleva a embarcarse en un peligroso viaje en el que acabará buscándose a sí misma. Humor sofisticado, crítica social y existencialismo millennial. Imprescindible.
'The Real O'Neals'
La cadena ABC es conocida por sus comedias familiares. Su buque insignia es 'Modern Family', pero hay otras series del mismo corte que merecen tanto la pena, incluso más, ahora que está de capa caída. 'Recién llegados', 'The Middle', 'Black-ish'. Todas ellas tienen algo valioso que aportar, pero la que más necesita que le echen un capote es 'The Real O'Neals', una de las más recientes incorporaciones a la parrilla de la cadena. La serie gira en torno a un adolescente gay que sale del armario para su familia católica. Haciendo gala de un chispeante sentido del humor, 'The Real O'Neals' visibiliza la comunidad LGBT en la televisión al situar a un adolescente gay en el centro de la serie. Desde 'Will y Grace' no ha habido prácticamente ninguna serie que haga esto. Por eso, 'The Real O'Neals' no es solo hilarante, sino también necesaria.
'Mom'
A simple vista parece una sitcom familiar al uso, y hasta cierto punto lo es. Pero a pesar de sus risas enlatadas y su factura de telecomedia de los 90 (propia de las series de CBS), 'Mom' está muy por encima de las demás series de su cadena. Su mayor virtud reside en un excelente grupo de personajes femeninos encabezados por dos actrices en estado de gracia, Anna Faris y Allison Janney. Ambas llevan las riendas de una serie que lo mismo te hace escupir la bebida de la risa que te provoca el llanto desconsolado. Pocas comedias saben manejar el drama y la tragedia con el tacto y la valentía de 'Mom', una serie que aborda el tema de la adicción de frente, sin tapujos y con una sensibilidad que ya quisieran otras. En Estados Unidos tiene buena audiencia, en España deberíamos hablar más de ella.
'Catastrophe'
Creada por Sharon Horgan y Rob Delaney, la británica 'Catastrophe' se presenta como una comedia romántica sobre las luces y las sombras de la vida en pareja. La serie comienza con un rollo de una noche que acaba desembocando en embarazo y matrimonio. Horgan y Delaney dan vida con una química desbordante a la pareja protagonista, siempre en conflicto con el mundo, el trabajo y consigo mismos. Una de las comedias más inteligentes y con mejores diálogos de la actualidad, réplica cuarentañera y madura a las series millennial sobre veinteañeros en la gran ciudad. Además, es un soplo de aire fresco que una serie nos hable de las dificultades de un matrimonio sin caer en el tópico de las relaciones tóxicas.
'Los Goldberg'
'Los Goldberg' no tiene la fama de 'Modern Family', especialmente en España, pero se la merece sin duda. Ambientada en los 80, esta telecomedia de ABC nos cuenta las andanzas de una familia estadounidense de clase media en una década en la que todo se vivía de otra manera gracias entre otras cosas a la ausencia de Internet y las nuevas tecnologías. Cada capítulo es como un pequeño viaje de regresión para el espectador, en el que se nos recuerda una costumbre, un juguete, un hito cultural o una moda propia de los 80 para reflexionar sobre lo diferente que era todo entonces. Imprescindible para aquellos que vivieron su infancia en esta década o los que siguen atrapados en la nostalgia, tan presente estos días.
'Fleabag'
Volvemos al Reino Unido para recomendar la que es simplemente una de las comedias televisivas más audaces y brillantes de los últimos años, 'Fleabag'. La humorista Phoebe Waller-Bridge, a la que veremos como la primera androide femenina protagonista de 'Star Wars' en el spin-off sobre Han Solo, escribe esta serie a partir de su exitoso monólogo teatral del mismo nombre. 'Fleabag' es hilarante y Waller-Bridge está descomunal. La mayor particularidad de la serie es que su protagonista rompe la cuarta pared constantemente, haciendo partícipe al espectador de sus vivencias. Así la acompañamos mientras atraviesa las situaciones más incómodas relacionadas con el sexo, la familia y el trabajo. Una mirada divertida y sin censura a la juventud actual que te puede hacer soltar una carcajada e inmediatamente te da el golpe en el estómago más seco que te puedas imaginar.
'Parks and Recreation'
Es un delito que 'Parks and Recreation' permanezca inédita en España, en especial ahora que uno de sus protagonistas, Chris Pratt, es una de las mayores estrellas de cine del mundo. Siguiendo el estilo del falso documental de 'The Office', 'Parks and Rec' se estrenaba en 2009 y durante siete temporadas se afianzaba como una de las comedias más queridas en Estados Unidos, a pesar de no ser nunca un gran éxito en los índices de audiencia. La clave de su popularidad era un grupo de personajes muy definidos y una protagonista, Leslie Knope (Amy Poehler), que simbolizaba los mejores valores (tesón, feminismo, trabajo duro, compañerismo, tolerancia). Leslie fue un gran modelo a seguir durante siete temporadas y la serie un chute de optimismo que no nos vendría nada mal hoy en día.