Con canas, colmillos y algo de mal humor. Así promete ser el padre de Dracula en la secuela de 'Hotel Transilvania', una de las nuevas incorporaciones de esta segunda parte. La esperada continuación del debut cinematográfico de Genndy Tartakovsky tiene previsto llegar a los cines de medio mundo a finales del año que viene, dispuesta a arrasar en taquilla, tal y como en su día hizo su predecesora.
Y si los de Sony buscaban alguien canoso y de mal humor, han dado con él. Aunque le falten los colmillos, parece que el veterano actor y director Mel Brooks será el encargado de ponerle voz a este nuevo personaje, que después de haber estado ausente varias eras, ha decidido volver junto a su hijo el conde Drácula, al que "da voz" Adam Sandler.
Brooks parece encantado con este nuevo proyecto, y según las declaraciones que recoge Variety, el actor se identifica bastante con su nuevo y malhumorado papel. A sus 88 años, la palabra jubilación aún no entra en el vocabulario de este actor, director, guionista, y en los últimos años, experimentado doblador, que demuestra seguir muy ligado a la gran pantalla.
Más de una
Para Brooks no es su primera vez con Drácula. El actor, dirigió en 1995 'Drácula, un muerto contento y feliz', pero esta vez era Leslie Nielsen el encargado de ponerse la capa y los colmillos. Esta comedia era la última en la que veíamos a Brooks detrás de las cámaras, y lo "celebraba" dando vida al profesor Van Helsing, quién le iba a decir que 10 años después seguiría vinculado al mundo vampiro.