A lo mejor no sabías que para evitar filtraciones y desvelar sorpresas antes del momento apropiado, las estatuillas que salen al escenario cuando se entrega el premio son todas iguales: ninguna lleva aún el nombre del ganador en la placa. Solo más tarde, poco después de la ceremonia, se personaliza para cada uno de los premiados.
Leonardo DiCaprio por fin tiene el suyo por una inigualable interpretación en 'El renacido (The Revenant)', y parece no querer separarse de él ni un instante. Llegado este momento es comprensible que el actor mire con nerviosismo cómo una extraña le arrebata la figura unos instantes. Variety ha captado el momento en el que, durante más de un minuto, el actor finge tranquilidad ante la espera.
.@LeoDiCaprio gets his Oscar engraved at the Governors Ball: "Do you do this every year? I wouldn't know." #Oscarshttps://t.co/3dBRsS1FQ4
? Variety (@Variety) February 29, 2016
Y la verdad, es un gran profesional... pero no creemos que todos esos golpecitos, frases amables llenas de ironía ("¿Hacéis esto todos los años? No lo sabía.") y su mejor cara de relajación para los fotógrafos consigan ocultar la impaciencia de recuperar el ansiado galardón. Y es que, seamos justos ¿no os darían ganas de saltar al mostrador y hacer vosotros mismos el grabado con tal de no alejaros del hombrecillo dorado?
La larga espera
Pero vamos, Leo, sé comprensivo, ella está nerviosa y unos segundos más de aguardar para tenerlo definitivamente en tu posesión no es mucho, si comparamos con que han pasado veintitrés años desde aquella primera nominación en 1993 por '¿A quién ama Gilbert Grape?' o más de dos que lo disputaste por 'El lobo de Wall Street' o 'Django desencadenado'. Muchas felicidades, hombre, ¡ponlo en la mesilla!