El adiós de Rick en la venidera novena temporada de 'The Walking Dead' va a dejar tocados a muchos de sus seguidores. Pero ahora les queda el consuelo de que podía haber sido mucho peor: Norman Reedus, el actor que interpreta a Daryl ha confesado que pactó con Andrew Lincoln que si uno de los dos abandonara la serie, el otro lo haría también.
"Hicimos un pacto", ha contado Reedus a Entertainment Weekly Radio. "Creo que fue en la temporada 3 o 4. Dijimos algo así como, si tú te vas, yo me voy", ha explicado el intérprete de Florida. Lincoln, gran amigo con el que siempre se le ve bromeando, aprovechó para preguntarle si estas palabras significaban que él también se marcha. La respuesta de Reedus no pudo ser más clara: "Diablos, no".
Dos grandes amigos que se separan
La relación entre los actores que dan vida a Daryl y Rick siempre ha sido la de dos grandes amigos, más que compañeros de reparto. Hasta tal punto que ha sido calificada de bromance. Por todo ello, Reedus ha lamentado lo que supone la marcha de su colega: "Era la primera persona que veía cada mañana. Hacíamos cada comida en mi tráiler. Compartiremos un tráiler para siempre". Sobre la marca que Lincoln deja en todo el equipo, el actor que interpreta a Daryl Dixon ha mostrado su admiración hacia el intérprete inglés, que abandona la serie para dedicar más tiempo a su familia: "Ha fijado un precedente para todos nosotros en la serie, dejó el listón muy alto desde el principio y siempre estamos intentando alcanzarlo".
Reedus resume sus sentimientos con estas palabras: "Me ha hecho mejor actor, es un amigo, un padre, todo junto. Es una persona muy importante para mí". Eso sí, el final de Rick no significa que su amistad se termine, hasta tal punto de que el intérprete ha confesado que "todavía le pregunto qué debo hacer en cada escena". Lincoln lo corroboró con un escueto pero certero "es verdad". ¿Cómo no le vamos a echar de menos?
14 parejas de cine con relaciones ambiguas
'Thelma & Louise'
El beso final que se plantan Susan Sarandon y Geena Davis en la road movie de corte feminista dirigida por Ridley Scott plantea alguna alguna que otra duda acerca de la orientación sexual de sus protagonistas. Mientras que para algunos cinéfilos se trata de un simple gesto de solidaridad y cariño entre amigas (algo bastante aceptable teniendo en cuenta que ambas están a punto de suicidarse en pleno Gran Cañón) para otros espectadores el discreto pico refleja una pasión reprimida. En este sentido, Sarandon quiso descartar la segunda opción argumentando que sus personajes "estaban más allá de la sexualidad y que lo suyo era amor". "Si estás a punto de saltar por un despeñadero no creo que vayas a ponerte a flirtear" explica la intérprete.
'Adiós a la reina'
A diferencia de esa visión rockera y barroca que ofrecía Sofia Coppola del mítico personaje de María Antonieta, Benoît Jacquot optó por aproximarse a la popular figura desde una óptica bien distinta. En 'Adiós a la reina' asistimos a un desfile de destrucción, decadencia y desesperación. Pero también contemplamos una especie de triángulo amoroso compuesto por tres grandes mujeres: Gabrielle de Polignac (Virginie Ledoyen), María Antonieta (Diane Kruger) y su lectora Sidonie (Léa Seydoux). Preguntas sin contestar, miradas furtivas y peticiones indecentes lanzadas al aire dominan una trama que incorpora un punto de vista diferente a un acontecimiento histórico analizado hasta la saciedad. Una obra que hace hincapié de forma sibilina en uno de los rumores mas difundidos de la época: la supuesta tendencia homosexual de la desdichada reina.
'Magical Girl'
Carlos Vermut es un experto en dejar huecos narrativos en los relatos para que el espectador complete su sentido. Una interesante estrategia que ha utilizado en cintas como 'Magical Girl. En este caso, el cineasta omite y difumina la turbulenta relación sentimental que une a personajes como Bárbara (Bárbara Lennie) y su antiguo profesor Damián (José Sacristán). Intuimos, gracias a alguna que otra referencia, que el segundo siente un amor incondicional por la joven capaz despertar el instinto asesino que lleva dentro. No obstante, desconocemos con exactitud los acontecimientos pasados que rodearon a la pareja, cuestión que provoca que nuestra imaginación confeccione un contenido macabro y demoledor. Una técnica muy acertada para una cinta que habla del lado oscuro de las personas.
'Y tu mamá también'
La cinta de Alfonso Cuarón parece abordar de forma especialmente sutil una historia de amor encubierta. Durante el largometraje Julio (Gael García Bernal) y Tenoch (Diego Luna) mantienen una relación de amistad caracterizada por la complicidad y la fidelidad. No obstante, el espectador comienza a reinterpretar los sentimientos de los personajes gracias a una serie de silencios incómodos, de comportamientos injustificados y reproches. Nadie dice nada pero lo cierto es que se sabe todo. Se trata de una cinta que denuncia la insufrible homofobia mexicana a pesar de que el cineasta opta por silenciar el elemento homoerótico dentro del encuadre (atentos al insuperable y desgarrador encuentro final entre los protagonistas).
'Julieta'
Llama la atención en 'Julieta' el increíble silencio impuesto respecto a la relación amorosa que mantienen Antia y Bea. Conforme avanza la trama, intuimos que la hija de la protagonista mantuvo un noviazgo con la joven que terminó como el rosario de la aurora. Y es que aunque la película de Pedro Almodóvar no incluya ni una sola confesión al respecto, una Bea ya madura (Michelle Jenner) deja caer esta cuestión cuando nos aproximamos al desenlace de la cinta. Una decisión de guión que está justificada ya que apoya una idea que recorre todo el film: Antía es una auténtica desconocida para su madre Julieta (y por tanto para los espectadores).
'Soñadores'
La cinta de Bernardo Bertolucci nos presenta unos juegos un tanto particulares entre Matthew (Michael Pitt), Isabelle (Eva Green) y su hermano Theo (Louis Garrel). Estos dos últimos mantienen una desconcertante relación sentimental e invitan al primero a formalizar su adhesión al grupo mediante "pruebas de amor" (entre las que se encuentra permitir que los hermanos le rasuren el vello púbico). El erotismo, la relaciones liberales y el sexo sin ataduras desfilan por esta cinta que escapa de las convenciones sociales y de las normas morales preestablecidas. Un trío con pocos frenos a la hora de dar rienda suelta a su imaginación. Cabe destacar que el contacto entre Theo y Matthew queda un tanto desdibujado ya que tal y como comentó el propio Bernardo Bertolucci se eliminaron pasajes de su relación homosexual.
'Stoker'
La relación odio-atracción que mantienen India (Mia Wasikowska) y su tío Charlie (Matthew Goode) es capaz de generar inquietud hasta en el más veterano cinéfilo. El director de 'La doncella' juega constantemente con nuestras expectativas dentro de este relato malsano dominado por unos personajes tenebrosos y ambiguos. Es por ello que incluimos a 'Stoker' y su reprimido dúo protagonista dentro de nuestra lista. Un ejemplo de enfrentamiento interno entre el deseo carnal y el ansia asesina que algunos llevan dentro.
'Tomates verdes fritos'
No fueron pocos los espectadores que se sintieron decepcionados con la adaptación cinematográfica de la novela escrita por Fannie Flag. Y es que la versión creada para pantalla grande optó por sustituir la relación claramente lésbica entre las dos protagonistas por una amistad de tintes más bien suaves. Decisión que, por supuesto, impidió desarrollar una trama romántica entre Idgie (Mary Stuart Masterson) y Ruth (Mary-Louise Parker) dando paso a un subtexto que era necesario escuadriñar. "La pasión que estas dos mujeres sienten la una por la otra no se presentó abiertamente en la película. Era como si alguien me hubiese llenado de pulgas. Durante su visionado me sentí irritada porque no te contaban la verdad" comenta al respecto la escritora y productora Susie Bright.
'Queen of Earth'
Elisabeth Moss ('Mad Men') y Katherine Waterston ('Animales fantásticos y dónde encontrarlos') se reúnen en 'Queen of Earth' para dar vida a una pareja de amigas que se toman unas vacaciones con el objetivo de desconectar y olvidar traumas del pasado. No obstante, conforme pasan los días el espectador asiste a una guerra de reproches, comportamientos bizarros y humillaciones. Se trata de una rivalidad inesperada y singular que llama la atención por el desmoronamiento emocional que provoca en sus protagonistas. También por un desconocimiento sobre el origen de semejante odio y repulsión. Muy recomendable para aquellos que disfruten con las pullas, las múltiples lecturas y la tensión dramática presente en cintas como 'Persona' de Ingmar Bergman.
'El silencio'
La obra de Ingmar Bergman nos presenta el complejo vínculo entre dos hermanas llamadas Ester (Ingrid Thulin) y Anna (Gunnel Lindblom). Pronto descubrimos que el cariño, el desprecio, las discusiones y la sumisión constituyen elementos centrales dentro de su relación. Y es que a pesar del tipo de parentesco que las une, su comportamiento se torna muy similar al de un matrimonio en crisis. Es por ello que la narración queda manchada por un ambiente enrarecido, tenso y tremendamente oscuro. Está claro que el cine de Bergman tiende a favorecer segundas lecturas y 'El silencio' no supone una excepción.
'La soga'
Alfred Hitchcock se pasó al color en 1948 con una historia plagada de tensión y homoerotismo. 'La soga', centrada en dos amantes asesinos llamados Phillip (Farley Granger) y Brandon (John Dall) generó una gran controversia en su época debido a la férrea censura. De hecho, todavía se analizan algunos detalles que esconden algunas lecturas queers (toqueteo intenso de botellas incluido). "Sabíamos que eran gays, sin duda. Nadie dijo nada sobre eso. Esto era 1947. No olvidemos eso" comenta Granger en el documental 'El celuloide oculto'.
'La pianista'
La protagonista de esta historia, Erika (Isabelle Huppert), manifiesta un trastorno mental marcado por el sadomasoquismo, la perversión y la psicosis. Porque no son pocas las cruentas escenas en la que contemplamos a la profesora de piano automutilándose y desarrollando una conducta destructiva con uno de sus alumnos. No obstante, también llama la atención el enfermizo vínculo emocional que mantiene Erika con su totalitaria y abusiva madre (Annie Girardot). A este respecto, cierta secuencia deja entrever más de una fantasía reprimida entre ambas.Y es que tras recibir un inesperado asalto sexual por parte de su hija, la anciana no emprende acciones y tarda más bien poco en cambiar de tema. "Ahora, duérmete. Vas a necesitar todas tus fuerzas. Aunque sólo sea una sustitución, debes ir bien preparada" sentencia un par de segundos después de recibir el desagradable ataque. Extraño comportamiento que amplía poderosamente el abanico de posibilidades en cuanto a sentimientos incestuosos se refiere. Porque...¿nos encontramos ante una madre demente? ¿acaso disfruta sometiendo a su hija al yugo materno? ¿la desea? ¿por qué considera dicho ataque normal?
'Ben-Hur'
No son pocos los trabajos y análisis cinematográficos que han observado cierto subtexto gay en la versión de 'Ben-Hur' de 1959. Y es que parece que la relación entre el protagonista (Charlton Heston) y su antiguo compañero de fatigas Messala (Stephen Boyd) siempre estuvo marcada por cierta tensión de tipo sexual. El escritor Gore Vidal, a quien el director de la cinta pidió consejo, fue una de las figuras que propuso esta lectura queer dentro del propio guión. "William Wyler me preguntó '¿qué vas a hacer'? y yo le respondí 'déjame intentar algo; digamos que estos tipos tenían 15 o 16 años la última vez que se vieron, fueron amantes y ahora se reencuentran y el romano (Messala) quiere empezar de nuevo" comenta Vidal en el documental 'El celuloide oculto'. Una cuestión que, por cierto, ha desaparecido en la reciente versión dirigida por Timur Bekmambetov.
'Rebeca'
Aunque nunca se menciona la homosexualidad en 'Rebeca', es obvio que la ama de llaves (Judith Anderson) se encuentra bajo la sombra del lesbianismo. Mrs. Danvers representa a un tipo de lesbiana neurótica y obsesionada con su objeto de deseo que no es otra que su antigua señora, la primera mujer de Winter. "Hay una escena que llama la atención del público gay. Rebecca está muerta y la Sra. Danvers abre el cajón de su ropa interior. Es muy sensual" comenta Susie Bright al respecto. Por otro lado, se trata de una figura que ha pasado a la historia del cine y que ha inspirado infinidad de personajes posteriores como la árida asistenta Marian (Rossy de Palma) de 'Julieta'.