¡Caigan las rosas blancas!

Violeta, una joven directora de cine, es convocada para realizar una película pornográfica dentro de los parámetros del cine mainstream. Sin embargo, sus ideas sobre los sistemas de género —tanto cinematográficos como sexuales— entran en conflicto con las exigencias del encargo, impidiéndole avanzar con la filmación.

En busca de otra forma de crear y de mirar, parte junto a sus amigas actrices desde Buenos Aires hacia São Paulo, un largo viaje con mucho tiempo para pensar donde años atrás filmaron juntas una porno lésbica, gozosa y libre, un largo camino con mucho tiempo para pensar. Pero ni el viaje ni el reencuentro parecen ofrecer respuestas. Impulsada por una inquietud persistente, Violeta se lanza al océano Atlántico y llega a una isla misteriosa, donde es recibida por una comunidad que habita el territorio de forma singular.

En ese entorno exuberante y fuera del tiempo, surgen nuevas formas de narrar, de vincularse y de imaginar el deseo. Entre lo real y lo fantástico, la experiencia se transforma en un proceso de búsqueda y transformación que desafía las convenciones del cine, la sexualidad y la identidad, abriendo un nuevo panorama para la protagonista, que deberá enfrentarse a la concepción de un nuevo mundo ante sus ojos.